La reforma del Código Civil para abrir el matrimonio homosexual «adultera» y
«desnaturaliza» el contenido de esta institución, según un informe del
Consejo General del Poder Judicial, que pide paralizar la iniciativa y, en
todo caso, excluir la posibilidad de adopción.
El texto, que debatirá el martes la Comisión de Estudios del CGPJ, cree que
la realidad social de uniones entre homosexuales «puede hacer aconsejable
que se les procure un tratamiento que les dé seguridad jurídica, lo que
puede implicar la necesidad de que esas uniones sean contempladas por el
ordenamiento jurídico».
Sin embargo «en la satisfacción de tal objetivo, el legislador no puede
adulterar una institución como el matrimonio», «la opción no puede consistir
en desnaturalizar una determinada institución jurídica que presenta unas
características bien claras», señala el documento redactado por el vocal del
CGPJ José Luis Requena.
Para posibilitar la reforma «no queda más remedio que eliminar de la
institución matrimonial un signo identificador hasta ahora indubitado y
jurídicamente incuestionado, esto es, que el matrimonio es una unión
heterosexual», añade el texto de más de medio centenar de páginas y que
apunta a «serias"»dudas sobre la constitucionalidad de la iniciativa.
«La heterosexualidad es un elemento constitutivo esencial del propio
concepto de matrimonio: el matrimonio o es heterosexual o no es», subraya el
informe sobre el proyecto de ley aprobado por el Gobierno el pasado 30 de
diciembre para su remisión a las Cortes.
Razona también que la satisfacción jurídica de una «parte mínima de la
población no puede hacerse a costa de adulterar el contenido esencial de una
institución ni a trastocar los fundamentos del Derecho de Familia».
No adoptar
En cuanto a la adopción, señala que «implica postergar el interés superior
del menor, declarado como tal prioritario por los tratados suscritos por
España en materia de derechos fundamentales y supedita ese interés a la
necesidad de una minoría de que sus tendencias homosexuales sean
homologadas».
Aún cuando se regulase el matrimonio entre personas del mismo sexo, «en este
momento y en esa norma debería excluirse expresamente la regulación de la
adopción por esas parejas hasta que haya un pronunciamiento del Tribunal
Constitucional y, en todo caso, hasta que la sociedad protagonice un debate
profundo».