Joaquín Navarro-Valls invita al Gobierno a releer el discurso del Papa porque “ilustra perfectamente la posición de la Iglesia”

Redacción - 28/01/2005 El director de la oficina de prensa de la Santa Sede, Joaquín Navarro-Valls, invitó ayer al Gobierno, a través de un comunicado, a releer el discurso que el Papa Juan Pablo II ofreció a los obispos españoles, ante la “extrañeza” que han provocado sus palabras en el Ejecutivo. Navarro-Valls considera que “ilustra perfectamente la posición de la Iglesia”. Por otra parte, Eduardo Zaplana criticó la reunión del Nuncio con Exteriores, del pasado miércoles, y manifestó que demuestra “un sectarismo y un radicalismo sin precedentes en la España democrática”.

Ante la “extrañeza” que el discurso del Papa ha provocado en el Gobierno, el director de la oficina de prensa de la Santa Sede, Joaquín Navarro-Valls, ha recomendado al Ejecutivo, a través de una declaración pública, que lo “relean atentamente”, apuntando que “ilustra perfectamente la posición de la Iglesia”. Además, Navarro-Valls afirma que han “tomado nota con satisfacción de la voluntad del Gobierno español de mantener un entendimiento fructífero”, porque esa “ha sido y será siempre la línea de la Santa Sede", dijo.

Por otro lado, el portavoz del PP en el Congreso, Eduardo Zaplana, criticó la reunión que el pasado miércoles mantuvieron el Nuncio del Vaticano en España, Monseñor Manuel Monteiro de Castro, y el subsecretario de Asuntos Exteriores, Luis Calvo. Zaplana afirmó que no cree oportuno “que se llame a capítulo para una rectificación cuando se muestran discrepancias con el Gobierno” y que esta decisión “denota un sectarismo y un radicalismo sin precedentes en la España democrática”.

Para Eduardo Zaplana, “con las declaraciones de Su Santidad se está en acuerdo o en desacuerdo, pero no se debe tener ese afán de reprimir y censurar lo que no nos gusta escuchar". A este respecto, el portavoz del PP en el Congreso, recordó las críticas que se han hecho al Gobierno de José María Aznar, y “no por ello se llamaba a capítulo ni se exigían rectificaciones a las personas que legítimamente criticaban o censuraban”, puntualizó. Según Zaplana “la discrepancia y la crítica es lo normal en democracia y hay que acostumbrarse a que la opinión de uno no es la única que existe".

"Ese afán de sectarismo y de radicalismo que acompaña al Gobierno en cualquier manifestación no había pasado ni con los Gobiernos de Felipe González; no se había conocido en la reciente historia democrática de España. Y no estoy dramatizando lo más mínimo",añadió por último el portavoz en el Congreso del Partido Popular.
 

  Comunicado del director de la oficina de prensa de la Santa Sede, Dr. Joaquín navarro-Valls
Joaquín Navarro-Valls - 27/01/2005