19.08.09
¿Qué pasa con la cruz que tanto parece molestar?
Dijo el torero aquel que “Lo que no puede ser, no puede ser y, además, es imposible”
Muchas personas creen y entienden que, en realidad, lo que está haciendo o tiene intención de hacer el Ejecutivo de Rodríguez Zapatero acerca de los símbolos religiosos es, sólo, el cumplimiento de la Constitución Española.
Se trata de aplicar el principio según el cual el Estado es laico y, por tanto, nada que tenga que ver con la religión puede aparecer en un organismo público, sea el que sea.
Pero también sabemos que, por encima de la concepción política que pueda existir en una nación existe lo que se llama tradición y, sobre todo, algo que ni siquiera un gobierno elegido democráticamente puede olvidar: el querer del pueblo que lo ha elegido.
Decir ahora que la religión cristiana y, en concreto, la católica, ha sido, a lo largo de la historia, un referente en España y en el modo de vivir de los españoles podría estar de más. Por lo evidente.
Pero, muy al contrario, hacer tal cosa sería conceder, al Mal, algún tipo de duda sobre nuestro pensamiento acerca de este tema.
Hace poco, Elena Valenciano, dirigente socialista ha dicho, para que no quepa duda alguna, que, en realidad, no se quiere obligar a nadie a no llevar un crucifijo colgado del cuello o donde se crea oportuno. Sólo faltaría eso. Lo que quieren hacer es quitar el que “está puesto sobre la pizarra“. Además, claro, del que pueda estar en la entrada de los centros públicos.
Podemos preguntarnos qué problema tienen con el crucifijo porque parece que sienten alguna aversión ciertamente extraña.
Pues, para que terminen con sus dudas, ahí van tres “perlas” de lo dicho por Benedicto XVI sobre el tema en 2005. Era agosto, como ahora. En Castelgandolfo. Sólo han pasado 4 años que son los mismos que han pasado desde Rodríguez Zapatero maltrata a la Iglesia católica y trata de apartarla de la vida pública.
Y dijo esto:
1.-“Es importante que Dios esté presente en la vida pública con la señal de la cruz, en las casas y en los edificios públicos”.
2.-“Donde desaparece Dios, el hombre no crece porque pierde su dignidad y se convierte en fruto de una evolución hueca, y por ello puede ser usado y abusado”.
3.-“En la época moderna, el hombre ha creído que dejando de lado a Dios y siguiendo sólo nuestros días y nuestra voluntad seríamos verdaderamente libres, pero esto no ha sucedido”
¿Lo ven?, no es tan difícil de entender.
Dios es importante…; la desaparición de Dios supone la pérdida de dignidad del ser humano…; existe la creencia de que la libertad consiste en olvidar a Dios…
Y ¿Qué es lo que se opone a esto?
Pues, en primer lugar, hacer notar que Dios les importa un bledo…; hacer constar que su propia dignidad les importa poco…; creerse libres de Dios para hacerse dueños de sus propias esclavitudes.
Tal es la propuesta socialista y progre ante el tema del crucifijo.
Y quieren que traguemos con eso sin decir esta boca es mía y creo en lo que creo.
Pues si tienen algún problema con el crucifijo deberían hacérselo ver por algún profesional que entendiese de eso porque puede resultar perjudicial para la salud… !De los demás¡
Tal es el problema de un pensamiento totalitario.