Los obispos de Brasil hablan del concordato
20.08.09 | 06:39. Archivado en América

Brasilia (RD, Patricio Downes). A la hora de la siesta en América del Sur y al atardecer en Europa, los titulares de la Conferencia Nacional dos Bispos do Brasil (CNBB), sigla en portugués de la Conferencia Episcopa Brasileña, hablará con la prensa a las 14,30 en la sede del episcopado en la capital brasileña al finalizar la reunión ordinaria del Consejo Episcopal Pastorl (Consep). En la lista de temas que están dispuestos a tratar los obispos figuran el acuerdo firmado por Brasil y la Santa Sede (Vaticano) sobre el Estatuto Jurídico de la Ilgesia Católica en Brasil, en vías de aprobación en el Congreso de la Nación, y a punto de pasar al Senado.
Firmado el 13 de noviembre de 2008, el acuerdo sobre el Estatuto Jurídico de la Iglesia Católica en Brasil fue aprobado por la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados la semana pasada. Aprobado con carácter de urgencia, el texto será votado ahora pors la Cámara y luego pasará al Senado.
La presidencia de la CNBB está a cargo de dom Geraldo Lyrio Rocha, arzobispo de Mariana, y lo secundan en el cargo, dom Luiz Soares Vieira, arzobispo de Manaus, como vicepresidente, y dom Dimas Lara Barbosa, obispo auxiliar de Rio de Janeiro, como secretario general.
En una reciente declaración, el episcopado brasileño aseguró que la ratificación del concordato no significa la atribución de ningún privilegio al catolicismo brasileño y su jerarquía.El cardenal Geraldo Majella Agnelo, arzobispo de San Salvador de Bahía, recordó en junio pasado que elpropósito de los concordatos a lo largo de la historia ha sido "poner fin o prevenir disensos entre la Iglesia y los poderes civiles, ganando existencia desde fines del siglo XI".
Se refirió el cardenal Majela Agnello al acuerdo firmado entre Brasil y el Vaticano durante la visita oficial del presidente Luiz Ignacio Lula da Silva al papa Benedicto XVI, el 13 de noviembre de 2008.
"El término 'acuerdo' fue encontrado por Brasil y la Santa Sede para definir el tratado celebrado. El acuerdo consolida posiciones ya establecidas en varios sectores del organismo político-jurídico brasileño, estructurándolas en un documento único", reflexionó.También señaló el cardenal "el acuerdo satisface la antigua postulación de la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil (CNBB), la cual ya en 1953 apoyaba un primer proyecto de acuerdo, autoría del Minserio de Relaciones Exteriores de Brasil, no alcanzando sin embargo éxito".
"Desde la proclamación de la República y con el fin del patronato se desarmaron los vínculos orgánicos del Estado con la Iglesia, librando a la Iglesia de interferencias de los poderes públicos sobre su economía doméstica, sin perjuicio del reconocimiento de la existencia jurídica de la Iglesia Catolica en todos los momentos constitucionales republicanos. Faltaba, entonces, el agrupamiento de las normas que fueron desenvolviendo en un texto unificado".