El Papa expresa "desconcierto y dolor" por el asesinato del vicario apostólico en Anatolia
Asesinado en Turquía el obispo católico de Anatolia, Luigi Padovese
El prelado fue presuntamente apuñalado por su chófer
Europa Press, 03 de junio de 2010 a las 18:08

El presidente de la Conferencia Episcopal turca, el italiano Luigi Padovese, ha muerto a consecuencia de las puñaladas que le infligieron en su casa y la policía ha detenido a su chófer como sospechoso, informaron hoy los medios turcos.
El también obispo católico de Anatolia (Turquía) fue hallado herido de gravedad en el jardín de su domicilio en Iskenderun, una localidad en la sureña provincia de Hatay, y murió poco después de ser trasladado a un hospital.
La primera versión de los hechos difundida por los medios de información turcos indica que el obispo fue presuntamente apuñalado por su chófer, sin que se haya podido conocer si existen motivos personales para el crimen.
La policía turca ha detenido al sospechoso y lo va someter a un interrogatorio, según los medios turcos, que no agregaron más detalles.
Padovese era el vicario apostólico de la Iglesia Católica en Anatolia, un cargo creado hace diez años y que cubre casi la mitad del territorio de Turquía, desde el Mar Negro al Mediterráneo.
En la provincia turca de Hatay hay una pequeña comunidad cristiana que vive de forma pacífica con la mayoría musulmana, y es especialmente importante en la tradición cristiana porque es el lugar donde por vez primera se definió como cristianos a los seguidores de Jesús.
En los últimos años se han producido diversos ataques a cristianos en el país euroasiático, uno de los más brutales fue el asesinato en Malatya (este de Turquía) de tres trabajadores de la editorial cristiana Zirve, cometido en 2007.
Los cuerpos de las tres víctimas fueron encontrados degolladas y atados de pies y manos.
Con anterioridad, en febrero de 2006, fue asesinado por dos disparos el sacerdote italiano Andrea Santoro en su parroquia de la localidad turca de Trebisonda, al noreste del país.
Pavese declaró entonces que el asesinato del sacerdote, ocurrido mientras el mundo islámico protesta por las viñetas sobre Mahoma en 2006, "no es una casualidad".
"El hecho de que el asesinato se haya producido ahora no me parece una casualidad. Aquí hay un ambiente muy caliente y muchos islamistas fanáticos", indicó entonces Padovese.
El Papa expresó "desconcierto y dolor" tras ser informado del asesinato del vicario apostólico en Anatolia, el obispo italiano Luigi Padovese, que fue apuñalado esta mañana en su casa, en la provincia turca de Hatay.
Así lo declaró a los medios de comunicación el director de la sala de prensa del Vaticano, el padre Federico Lombardi. "Es una noticia horrible que nos deja profundamente desconcertados y, naturalmente, apenadísimos", aseguró en declaraciones a 'Radio Vaticano'.
Padovese tendría que haber participado a partir de mañana en la visita del Papa a Chipre y, junto a los demás líderes de la Iglesia católica en la región, el domingo habría recibido de manos del Pontífice el 'Instrumentum Laboris', que es el documento que servirá para preparar el Sínodo de Obispos sobre Oriente Próximo que se celebrará en otoño en el Vaticano.
"Monseñor Padovese ha sido una persona que ha tenido grandes méritos", explicó Lombardi, que añadió que "su muerte nos hace pensar espontáneamente en la de don Andrea Santoro", el sacerdote católico italiano que fue asesinado en 2006 en la localidad de Trapisonda, a orillas del Mar Negro, a manos de ultranacionalistas turcos.
Estas muertes "nos hacen ver que el testimonio de la Iglesia en ciertas situaciones puede llegar a pagarse con la sangre", destacó el portavoz vaticano, que precisó que todavía hay que "entender mejor cuáles han sido las circunstancias y motivaciones" que han llevado al asesinato de Padovese.
Lombardi recordó que la noticia llega en la vigilia del viaje del Papa a Oriente Próximo, a donde se dirige "precisamente para animar a las comunidades cristianas que viven en esta región". "Este suceso hace entender muy profundamente que la solidaridad de la Iglesia universal y el apoyo a estas comunidades cristianas es absolutamente urgente y necesario", concluyó el portavoz vaticano.