"Vengo como peregrino, tras las huellas de Pablo y Bernabé"
Papa: "La muerte de Padovese no debe manchar a Turquía"
"La violencia no es la solución", dijo sobre Gaza
Redacción, 04 de junio de 2010 a las 15:26

El Papa Benedicto XVI consideró que el asesinato ayer de su vicario apostólico en Anatolia, el obispo italiano Luigi Padovese "no debe oscurecer" el diálogo con el Islam, según declaró a los periodistas a bordo del avión con el que esta mañana viajó a Chipre.
Su muerte no tiene nada que ver con "Turquía o con los turcos" y "no debe oscurecer de ningún modo el diálogo con el Islam", aseguró el Papa recalcando que, aunque todavía se tienen "pocas informaciones" sobre lo sucedido, "es seguro que no se trata de un asesinato político o religioso".
Padovese fue apuñalado ayer por la mañana en su casa, en la provincia turca de Hatay. El principal acusado es su chófer, que ya ha sido arrestado y afirma haber actuado por inspiración "divina", según los medios locales.
El Papa, que acogió la noticia con "desconcierto y dolor", se dijo "profundamente apenado" y destacó el papel que Padovese estaba teniendo en la preparación del Sínodo de Obispos sobre Oriente Medio que se celebrará en octubre en el Vaticano, afirmó Benedicto XVI.
Precisamente, Padovese era uno de los altos prelados de Oriente Medio que iban a participar en el viaje a Chipre del Pontífice, durante el que éste les entregará el 'Instrumentum Laboris', es decir, el documento de trabajo para preparar el próximo sínodo especialmente dedicado a la región.
El papa Benedicto XVI hizo hoy, camino de Chipre, un llamamiento a las partes en conflicto en Oriente Medio para que no pierdan la paciencia y sigan adelante en la búsqueda de la paz a través del diálogo.
"La violencia no es la solución", dijo el Pontífice en el avión que le llevaba desde Roma a Paphos, primera etapa de su visita de tres días a Chipre, al comentar a los periodistas que le acompañaban el ataque de Israel a la flotilla humanitaria que se dirigía a Gaza y que ha dejado nueve muertos y decenas de heridos.
El Pontífice manifestó que con episodios de violencia "se corre el riesgo de perder la paciencia".
"Hay que tener la valentía de volver a empezar de nuevo con la certeza de que podemos seguir adelante. La violencia no es la solución, hay que crear las condiciones para volver a empezar el diálogo", afirmó el Pontífice.
Benedicto XVI ya expresó el pasado 2 de junio en la audiencia pública de los miércoles su "angustia" por el ataque de Israel a la "Flotilla de la Libertad" e hizo un llamamiento a las autoridades locales e internacionales para que "busquen soluciones justas con el diálogo, que garanticen a la población del área mejores condiciones de vida".
Sobre el asesinato ayer en Turquía del presidente de la Conferencia Episcopal turca, el obispo italiano Luigi Padovese, el Papa expresó su profundo dolor pero precisó que no es un asesinato político o religioso sino que se trata de "una cuestión personal".
"No debemos mezclar esta situación trágica con el diálogo con el Islam. Es una caso aparte, triste, pero que no debe oscurecer el diálogo en todos los sentidos. El diálogo es el objetivo de este viaje", precisó el Pontífice.
Benedicto XVI manifestó que su visita a Chipre es la prolongación del viaje que realizó el pasado año a Tierra Santa y en abril de este año a Malta, siguiendo las huellas de Cristo y del apóstol Pablo.
El Papa añadió que va a la isla a "testimoniar la paz y la fe en un único Dios".
Las palabras del Papa para este viaje son "diálogo y paz". La paz, precisó, está en el centro del pensamiento paulino. "No vengo con un mensaje político sino religioso, auspicio la paz, trabajemos por la paz", añadió.
Chipre es un país de mayoría ortodoxa. El 88 por ciento de sus habitantes pertenecen a la Iglesia ortodoxa griega.
Benedicto XVI abogó por proseguir el diálogo ecuménico con los ortodoxos y las otras iglesias cristianas en este mundo secularizado y dijo que este diálogo no se trata de una coalición moral o política sino de profunda fe y de la fisonomía de la fe cristiana.
Durante esta visita entregará el documento preparatorio del Sínodo que se celebrará próximamente en el Vaticano sobre la situación de las Iglesias católicas en Oriente Medio.
El Papa afirmó que en esta zona hay muchas Iglesias que están esparcidas, aisladas, y que se desconocen unas a otras y que el Sínodo puede ser el momento para que se encuentren y establezcan puntos comunes y medidas para afrontar el futuro en una zona como es Oriente Medio, donde son minoría.
Sobre estas Iglesias el Papa precisó que son antiquísimas comunidades cristianas que demuestran la importancia de la Iglesia, y el Papa espera que se conozcan mejor y que durante el Sínodo de Roma estará cerca de ellas para que se ayuden las unas a la otras en estos difíciles momentos.
El Papa agregó que estas Iglesias deben dialogar entre ellas y abrirse a las otras Iglesias cristianas y que, asimismo, deben abrirse al Islam, a quienes llamó "los hermanos musulmanes".
En Chipre
En su discurso, en la ceremonia de bienvenida, Benedicto XVI ha reconocido su alegría y gratitud por su encuentro con la población de Chipre, situada "en una encrucijada de culturas y religiones".
E inmediatamente ha trazado el sentido de su viaje: "Vengo como peregrino y siervo de los siervos de Dios, tras las huellas de nuestros padres comunes en la fe, los santos Pablo y Bernabé"; "desde que los apóstoles trajeron el mensaje cristiano a estas orillas, Chipre fue bendecida por una destacable herencia cristiana".
Y como hermano en la fe cristiana, saludó al arzobispo ortodoxo de todo Chipre, expresando su deseo de encuentro con muchos otros miembros de la Iglesia ortodoxa.
"También espero saludar a otros responsables religiosos chipriotas -añadió el Papa-. Deseo que se refuercen nuestros vínculos comunes y reitero la necesidad de afianzar la confianza recíproca y la amistad duradera con todos los que adoran al Dios único".
"Como Sucesor de Pedro, vengo de modo especial para saludar a los católicos de Chipre -explicó-, para confirmarlos en la fe y animarlos a ser cristianos y ciudadanos ejemplares, para que desempeñen cabalmente su papel en la sociedad, en beneficio de la Iglesia y del Estado".
(RD/Agencias)