5.10.10

Supongo que el Cardenal Sistach no lo permitirá

A las 11:55 AM, por Luis Fernando
Categorías : Papado, Actualidad, Benedicto XVI, Obispos españoles
 

La noticia la da hoy El Periódico: “Católicos de base recibirán al Papa con un rezo para que pierda poder”. Según Jordi Casabella, Església Plural prepara un acto de reflexión y plegaria que reivindicará un cambio del modelo de gobierno de la Iglesia católica que reste poder a la curia y al propio pontífice. La entidad ha invitado al resto de los movimientos católicos progresistas a unirse a su propuesta.

Además, se asegura que estos “católicos no-católicos” pretenden reunirse en una iglesia a la misma hora en que una multitud aclamará al Papa en la avenida de la Catedral, tras su aterrizaje en el aeropuerto de El Prat procedente de Santiago de Compostela, sobre las nueve de la noche del sábado 6. Església Plural confía en que al menos una decena de asociaciones de cristianos progresistas secunden la propuesta, que consistirá, inicialmente, en la redacción de un documento que recoja las reclamaciones que se darán a conocer coincidiendo con la visita del Santo Padre a la ciudad.

Bien, vamos a ver si quedan claras un par de cosas. La primera, que los ciudadanos miembros de esas organizaciones tiene perfecto derecho a reunirse, manifestarse, publicar comunicados y bailar sardanas hasta altas horas de la madrugada. Pueden criticar al Papa, a los obispos, a la Iglesia y al Altísimo. Pueden decir, como se asegura en la noticia, que el papado “no es un hecho inamovible e incuestionable". Pueden eso y mucho más. Ahora bien, lo que no pueden pretender es pensar como piensan y decir lo que dicen y a la vez ser católicos. Y de ninguna de las maneras pueden usar un templo católico para reunirse, manifestarse y publicar comunicados contrarios al Vicario de Cristo y la Iglesia.

Quien puede impedir semejante despropósito es S.E.R, el Cardenal Arzobispo Lluís Martínez Sistach, pastor de la Iglesia en Barcelona. Yo, y como yo creo que muchos fieles, le solicito humildemente que, por amor a Cristo y su Iglesia, curse inmediatamente la orden a todas las parroquias y centros de culto católicos de su archidiócesis para que impidan que Església Plural y demás grupos afines hagan lo que se proponen. La Iglesia en Barcelona no puede estar con el Papa y contra el Papa. No puede estar al lado del Vicario de Cristo en la Catedral y atacando al Vicario de Cristo desde una parroquia, ermita o instalación propiedad de la Iglesia.

Y si de paso el cardenal Sistach pone en su sitio a esos infieles que dicen ser católicos pero que, con sus hechos y sus dichos, demuestran que no lo son, tanto mejor. No es tiempo de tibiezas y complacencias con los enemigos de la Iglesia, especialmente si están infiltrados en su seno. Llega el Papa a Barcelona. El pastor de la Iglesia en Barcelona tiene una oportunidad inmejorable de librarse de aquellos que piensan que el papado no tiene sentido. No son católicos. No los admita como tales, estimado cardenal.

Luis Fernando Pérez