Profesora de la Universidad de Navarra

Fallece la teóloga Jutta Burggraf

 

La teóloga alemana Jutta Burggraf (Hildesheim, 1952), profesora de la Universidad de Navarra y autora de más de 20 libros, ha fallecido hoy en Pamplona tras una enfermedad que ha sufrido en los últimos meses. La teóloga alemana era doctora en Psicopedagogía por la Universidad de Colonia (1979) y doctora en Teología por la Universidad de Navarra (1984), según ha informado hoy el centro académico en un comunicado. La teóloga centró su actividad investigadora en el ecumenismo y la teología de la mujer, entre otros temas.

06/11/10 2:35 PM


 

(Efe) La profesora Burggraf se incorporó al departamento de Teología Dogmática del campus navarro en 1996, proveniente del Instituto Académico Internacional (Kerkrade, Países Bajos), donde ejercía la docencia desde 1989.

Durante estos años centró su actividad investigadora en diversos campos como el ecumenismo, la teología de la creación, la teología de la mujer o el feminismo, sobre los que ha publicado numerosos trabajos.

Entre sus más de 20 libros, algunos de ellos traducidos a otros idiomas, se encuentran “Teresa von Avila”, “Vivir y convivir en una sociedad multicultural”, “Una perspectiva cristiana en un mundo secularizado”, “Teología Fundamental”, “Conocerse y comprenderse”, y “Libertad vivida: con la fuerza de la fe”.

Asimismo fue codirectora -junto con los profesores César Izquierdo y Félix María Arocena- del Diccionario de Teología.

También colaboró en alrededor de 70 obras colectivas, publicó más de 70 artículos en revistas especializadas y divulgativas, participó en numerosos simposios y congresos internacionales e impartió conferencias en una veintena de países.

Por otra parte, era coeditora de la revista germana Mariologisches, directora de la colección “Antropología” de la editorial Promesa (Costa Rica), miembro del Consejo Científico del Internationaler Mariologischer Arbeitskreis Kevelaer (Alemania) y miembro correspondiente de la Pontificia Academia Mariana Internationalis.

En 1987 fue nombrada por Juan Pablo II perito en el Sínodo Ordinario de los Obispos sobre “La vocación y misión de los laicos en la Iglesia y en el mundo”, celebrado en Roma.