1.12.10
Gobierno cobarde ante los violentos, valiente contra los católicos
Primero fue la presencia de agentes de la Guardia Civil para impedir a un grupo de fieles asistir a Misa en la Basílica del Valle de los Caídos. Luego supimos que grupos antisistema de extrema izquierda quieren acabar con la capilla de la Facultad de Económicas en la Universidad autónoma de Barcelona. Y ahora han sido esos mismos grupos los que hoy deben de estar jubilosos ante el éxito que han obtenido. Han logrado que todo un cardenal de la Iglesia Católica no pueda dar una conferencia en la Universidad autónoma de Madrid.
Conviene tener en cuenta que esos grupúsculos ya han actuado en otras ocasiones intentando reventar conferencias de políticos o historiadores contrarios a su sectarismo totalitario. Es decir, esa gentuza no es sólo anticlerical sino anti-todo lo que no sean ellos mismos.
Ahora bien, el problema no es que existan grupos así. Desde el mayo del 68 francés, la universidad europea ha sido siempre una especie de punta de lanza del rojerío más casposo. Y en no pocas ocasiones, es apoyado por el claustro y por rectores inanes. El problema está en cuando el Estado no es capaz de impedir que los violentos se hagan los amos de la calle o de la universidad. O peor aún, cuando es capaz pero no quiere. Eso es lo que pasa en España. Si ante las amenazas de los antisistema el gobierno enviara antidisturbios suficientes como para impedir cualquier incidente, nadie se extrañaría. Y si esos grupos insistieran en montar jaleo, pues palo y tentetieso, detenciones y cárcel. En el País Vasco saben lo bien que funciona el usar de mano dura contra los kale borrokos batasunos. No hay razón alguna para que no se haga lo mismo en el resto de España.
El gobierno de Zapatero está demostrando ser muy “valiente” cuando tiene que enfrentarse a los católicos. Envía guardias civiles a impedir misas o a registrar los maleteros de fieles que quieren asistir a una misa al aire libre. Pero luego es cobarde cuando se trata de plantar cara a los antisistema de izquierda. Habrá quien piense que no es cobardía sino simplemente complicidad. Y es que la teoría de que unos muevan el nogal y otros recogen las nueces puede aplicarse no sólo a la región vasca sino a toda España.
Luis Fernando Pérez Bustamante