18.01.11

Juan Pablo opaca a Juan de Palafox

A las 7:01 PM, por Andrés Beltramo
Categorías : Iglesia en México, Pederastia en el clero católico
 

Fueron dos obispos, hombres de Dios con carácter impasible. Ambos serán elevados a los altares como beatos y, tal vez por la providencia divina, eso casi ocurre en el mismo día. Si no fuera porque uno llegó a ser Papa y el otro vivió en el siglo XVII. Se trata de Juan Pablo II y Juan de Palafox. La alegría por el anuncio de la beatificación del primero hizo a los católicos olvidar al segundo, cuya ceremonia de elevación a los altares estaba programada justo en el 1 de mayo. Resultado: la fecha se tuvo que cambiar. Palafox y Mendoza será beatificado el próximo 5 de junio.

Era prácticamente imposible realizar las dos ceremonias el mismo día. En primera porque muchos fieles mexicanos y españoles querrían estar en Roma para ver a Karol Wojtyla ser reconocido por la Iglesia. Además, en la beatificación de Palafox, deberá estar presente un enviado pontificio puesto que -en este caso- estoy seguro ningún cardenal habría ambicionado.

Normalmente es el prefecto para las Causas de los Santos, Angelo Amato, quien preside los ritos para los nuevos beatos. Como todavía el cardenal no cuenta con el poder de la bilocación, también eso era un problema. En fin, como resultaba inverosímil la idea de empalmar dos beatificaciones bien pensó el obispo de Osma-Soria, Gerardo Melgar Viciosa, en comunicarse con El Vaticano para encontrar otro día. Apenas le dieron el visto bueno lo comunicó a la feligresía, para evitar confusiones.

El 5 de junio en la catedral del Burgo de Osma (provincia de Soria, norte de España) Juan de Palafox y Mendoza será declarado beato. México, y en especial la ciudad de Puebla, recuerdan bien a este personaje que, durante 14 años, guió los destinos de la Iglesia angelopolitana. No sólo destacó en la labor pastoral, con gran empeño y ardor, sino también en el ámbito social, político y educativo.

Si no fuese porque en 1653 el Papa lo trasladó a su país natal como obispo de Osma (tras diferencias con Jesuitas y Dominicos) quizás ahora la capital poblana tendría una beatificación en puerta.

Por el cariño a esa figura el 26 de diciembre pasado el actual arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, inauguró oficialmente el “Año Palafoxiano”, que se extenderá hasta finales de este 2011 y que permitirá a los fieles que peregrinen a la catedral de esa ciudad (y atraviesen la puerta del perdón) ganar la indulgencia plenaria. Además el vocero de la arquidiócesis, el sacerdote Eugenio Lira Rugarcía, viajará en próximos días al “viejo continente” para coordinar actividades conjuntas.

Serafines susurran.- Que resultó muy sospechosa la reacción tenida por muchos medios de comunicación (y comentaristas muy amigos de la transparencia total) ante la noticia del abuso sexual cometido, hace 40 años, por el canónigo belga Francois Houtart.

Sorprendió en demasía que quienes hace pocos ayeres lanzaban dedos acusadores contra el Papa Benedicto XVI por supuestamente encubrir a pederastas o restregaban a diestra y siniestra el caso de Marcial Maciel Degollado, ahora respondieron con tibias expresiones de indignación.

Por ejemplo el periódico La Jornada de México prefirió destacar cómo el clérigo “acepto parcialmente las acusaciones” y sostuvo su afirmación consignando que, en dos ocasiones, “sólo tocó las partes íntimas” de un niño a diferencia de su prima que habla de “violación”. Cómo si existieran grados que hacen de una persona más o menos abusadora. Un abuso es un abuso y punto, sea el culpable de izquierda, derecha o centro. Todos los casos son deplorables y deben ser combatidos con todas las fuerzas.

Pero en este episodio el comportamiento de los “opinionistas” huele a doble rasero. ¿Será porque el profesor de la Universidad de Lovaina es uno de los íconos de la teología de la liberación? ¿O quizás porque sus “iluminadas reflexiones” sirven de asesoría para políticos como Hugo Chávez y Rafael Correa? La poca dureza de esos que aman lanzar flamígeras críticas a la jerarquía eclesiástica ¿tendrá que ver con su condición de “artífice” del Foro Social Mundial, de fundador del grupo internacionalista ATTAC, de amigo personal de Fidel Castro y promotor del Subcomandante Marcos?

Querubines replican.- Que diversos sectores de la Iglesia mexicana han visto con desconfianza el anunciado proyecto del obispo Felipe Arizmendi Esquivel de dividir la diócesis de San Cristóbal de las Casas, en Chiapas. El plan fue presentado en la última asamblea diocesana, celebrada en el mes de mayo, y de entrada no cayó bien entre párrocos y feligreses.

Arizmendi se ha empeñado en asegurar que no se trata de un “golpe del Vaticano” a esa demarcación eclesiástica y tiene razón. Porque el proceso para “partir” un territorio eclesiástico debe iniciar justamente en el propio lugar. Es necesario redactar un proyecto que incluye un sinnúmero de requisitos para después presentarlo a la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM). Si ese organismo aprueba la iniciativa ésta debe someterse a la nunciatura apostólica y después al Vaticano. Es un proceso largo y tortuoso.

La nueva diócesis llevaría el nombre de Ocosingo y, aunque el obispo Arizmendi ha dicho que “sólo se trata de una idea”, en realidad la redacción del documento se encuentra más que avanzado. Con estadísticas, proyección territorial y todo.

Pero almas profanas aseguran que la iniciativa busca liberar a la nueva diócesis de una serie de limitaciones impuestas por El Vaticano a San Cristóbal de las Casas. De entrada la suspensión de ordenar diáconos permanentes (casados) aún vigente. Según esta versión se trataría de una estrategia para saltar las indicaciones papales y continuar el proyecto de la “iglesia diaconal”, un modelo que aspira a la expansión del sacerdocio uxorado o, lo que es igual: una nueva forma de hacer iglesia católica, con curas casados y todo.