El nuevo obispo tomará posesión de la diócesis el 2 de abril

Atilano destaca la “la libertad de espíritu” de José Sánchez

Sánchez: “Os invito a dar gracias conmigo por el regalo de un nuevo pastor”

Jesús Bastante, 02 de febrero de 2011 a las 12:29
 

(Jesús Bastante).- "Os invito cordialmente a todos a alegraros y a dar gracias a Dios conmigo, por que el Señor, por medio de la Iglesia, nos concede el regalo de un nuevo Pastor diocesano", afirma el ya obispo emérito de Sigüenza-Guadalajara, José Sánchez, en una carta a los fieles y de acogida al nuevo prelado, Atilano Rodríguez, que tomará posesión de la sede el 2 de abril. Un relevo ordenado y deseado.

En la misma, Sánchez desvela que conoció el nombramiento el pasado 25 de enero, a través de una carta, "bajo secreto pontificio", enviada por el Nuncio en España, Renzo Fratini. Una designación que fue acogida con alegría por Sánchez. "Agradezco muy especialmente a nuestro nuevo Obispo D. Atilano su aceptación y su disponibilidad de venir a servirnos en nombre del Señor. Lo felicitamos muy cordialmente y le deseamos salud, gracia y bendición que pedimos desde ahora a Dios para él. Que Jesucristo, Buen Pastor, conceda a su servidor, nuestro nuevo Obispo, la gracia de apacentar su grey, esta parcela de de su Iglesia de Sigüenza-Guadalajara, conforme a su voluntad y encuentre en todos y en cada uno de nosotros el afecto filial y un pueblo bien dispuesto".

José Sánchez define a Atilano Rodríguez como "una persona sencilla y cercana, de trato afable, hombre de Dios y fiel servidor de su Iglesia, con una buena formación y una larga, variada y acreditada experiencia pastoral, primero, como sacerdote - párroco rural y en la ciudad, formador del Seminario, colaborador de los Arzobispos de Oviedo y de Zaragoza - después, como Obispo Auxiliar de Oviedo y Obispo de Ciudad Rodrigo. Comprometido con el Apostolado Seglar, con la Acción Católica y con la Pastoral Social, experimentado también en el servicio a los sacerdotes, a los seminaristas y a la Vida Consagrada".

Por su parte, el nuevo obispo, en una carta dirigida a los fieles de Ciudad Rodrigo y de Sigüenza-Guadalajara, afirmó que "en estos momentos brota de lo más hondo de mi corazón la acción de gracias a Dios", al tiempo que agradece a Benedicto XVI "la confianza depositada en mi humilde persona al encomendarme la misión de apacentar la Iglesia particular de Sigüenza-Guadalajara, regida hasta este momento con entrega generosa y con disponibilidad evangélica por mi querido hermano y amigo, Don José Sánchez González".

Sobre Sánchez, afirma haber "admirado siempre su inquebrantable amor a la Iglesia, el celo pastoral, la búsqueda incansable de nuevos caminos para el anuncio del Evangelio, la libertad de espíritu y la entrega servicial a todos, especialmente a los pobres y marginados por la sociedad".

El nombramiento ha provocado en el nuevo prelado de Sigüenza-Guadalajara "sentimientos de tristeza y alegría. Tristeza, por tener que dejar la querida diócesis de Ciudad Rodrigo, en la que he ejercido el ministerio episcopal durante los últimos ocho años (...). Pero, junto a la tristeza por tener que separarme de tantas personas para mí tan queridas, he experimentado también una profunda alegría al saberme llamado por el Señor, a pesar de mis muchas limitaciones, para cumplir esta nueva misión al servicio de la Iglesia particular de Sigüenza-Guadalajara. Soy consciente de que el Señor me envía a una diócesis con profunda solera cristiana, que hunde sus raíces en los primeros siglos de la cristiandad y en la que han florecido con el correr de los tiempos hombres y mujeres, testigos de la santidad y del amor de Dios hasta entregar la vida por Él".

"Confío en que todos me ayudaréis a descubrirlas con el paso de los días para buscar desde la comunión fraterna las soluciones más evangélicas para las mismas", concluye su escrito.