16.03.11

 

No sé quién será el máximo responsable de la campaña de la CEE con motivo de la próxima Jornada por la Vida, pero sea quien sea, quiero felicitarle efusivamente. El vídeo principal es sencillamente emotivo, impactante y muy útil para el fin que se busca.

Y es que, como dice el lema de la campaña, “Siempre hay una razón para vivir”. Y lo que debemos hacer con aquellas personas que no encuentran su razón para vivir es ayudarles a buscarla, no a morir.

La Iglesia, aunque sabe bien que el fin óptimo para todo hombre es alcanzar la vida eterna que nos da por gracia Cristo, se ha convertido en la principal defensora del derecho a la vida terrenal. Es ella la que más hace por defender a la cultura de la vida de los ataques brutales de los que están al frente de la cultura de la muerte, con abortos y eutanasias.

No me negarán ustedes lo patético que resulta el hecho de que aquellos que por lo general piensan que después de la muerte no hay nada, sean los más empeñados en apoyar que se ayude a que la gente se escape de sus problemas quitándose de en medio (eutanasia) o quitando de en medio al ser que no ha nacido (aborto). Pero su miseria moral y existencial no puede vencer siempre. De la misma manera que cuando se enciende una vela en una habitación oscura, las tinieblas retroceden, una campaña como la de la CEE puede ayudar a que retroceda, siquiera un poco, la cultura de la muerte en la sociedad española. Si conseguimos eso, habrá merecido la pena. Y si no, también, pues en todo caso habremos dado testimonio de la verdad y de la vida.

Luis Fernando Pérez Bustamante