La monja María Catalina Irigoyen también subirá a los altares

Otros 22 sacerdotes y un seglar asesinados en la Guerra Civil serán beatificados

Fueron fusilados por "odio a la Fe", algunos de ellos en Paracuellos del Jarama

Redacción, 02 de abril de 2011 a las 17:11

 

Otros 22 sacerdotes y un seglar asesinados durante la Guerra Civil española (1936-39) y un seglar serán beatificados, después de que hoy Benedicto XVI aprobara el decreto que reconoce sus martirios, que abre el paso a su elevación a la gloria de los altares, informó el Vaticano.

Se trata del sacerdote Francisco Esteban Lacal, de 48 años, provincial de la Congregación de los Misioneros Oblatos de María Inmaculada y otros 21 compañeros, de edades comprendidas entre 19 y 38 años, que vivían en el convento de Pozuelo de Alarcón (Madrid).

Los religiosos y el seglar, un exconcejal del Ayuntamiento de Pozuelo, fueron fusilados entre el 24 de julio de 1936 y finales de noviembre el mismo año, algunos de ellos en Paracuellos del Jarama.

Los 23 fueron asesinados, según el decreto aprobado por el papa, "por odio a la fe durante las persecuciones religiosas en España".

Las beatificaciones de los 22 sacerdotes y el seglar, "mártires del siglo XX", como llama la Iglesia española a los religiosos asesinados durante la II República española y la Guerra Civil de 1936-39, se anunciarán en fechas próximas y se celebrará, presumiblemente, en la catedral de Madrid durante este año.

Según datos de la Iglesia española, los mártires de los años 1934 y 1936-39 pueden ser unos diez mil. Ya han sido beatificados 977 y proclamados santos once.

La monja española Catalina Irigoyen, a los altares

La monja española María Catalina Irigoyen Echaegaray (1848-1918) será beatificada, después de que hoy Benedicto XVI aprobara el decreto que reconoce un milagro por intercesión de la religiosa, informó el Vaticano.

María Catalina Irigoyen Echaegaray pertenece a la Congregación de las Siervas de María Ministras de los Enfermos. Nació en Pamplona (Navarra, norte español), el 25 de noviembre de 1848 y falleció en Madrid el 10 de octubre de 1918. La beatificación de la monja navarra se anunciará en fechas próximas y la ceremonia se celebrará en España.

Benedicto XVI también reconoció hoy las virtudes heroicas, primer paso hacia la santidad, del niño alemán Bernardo Lehner, nacido en Herrngiersdorf en 1930 y fallecido a los catorce años en Ratisbona. Siempre la información, el pequeño soportó con valentía y serenidad una larga enfermedad. Él mismo, añade el Vaticano, pidió el sacramento de la Unción de los Enfermos y después exclamó: "Ya no puedo llorar sabiendo que veré pronto a Dios, dejadme morir ya". (RD/Efe)