L'Osservatore analiza el resultado electoral

Caída de los socialistas en España

Los populares triunfan en las elecciones autonómicas y municipales

L'Osservatore Romano, 23 de mayo de 2011 a las 18:13

 

(L'Osservatore Romano).- Clara derrota del presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero: su partido socialista (PSOE) ha obtenido el peor resultado de la historia en las elecciones autonómicas y municipales, quedándose en el 27,79% de los votos, cerca de 10 puntos y 2,2 millones de votos menos que el Partido Popular (PP) de Mariano Rajoy. El diario "El País" ha hablado sin medias tintas de tsunami.

El PP es el verdadero triunfador de la consulta de ayer, conquistando once de las trece autonomías donde los electores fueron llamados a las urnas, a pesar de que prácticamente se han duplicado los votos en blanco. Por otro lado no ha influido en el electorado el impacto del llamado movimiento de los indignados. En efecto, ha aumentado la participación. Se presentó a las urnas el 65,67% de los ciudadanos con derecho a voto, respecto al 63,27% de 2007.

Concluido el escrutinio, el PP se ha hecho con el 37,53% de los votos; el PSOE con el 27,79%. En 2007 también había ganado el Partido Popular, pero entonces la distancia fue de sólo 0,7 puntos: 35,62% frente a 34,92%. El PSOE ha pagado muy cara su gestión de la crisis económica: pierde 1,5 millones de votos respecto a 2007. Rodríguez Zapatero ha reconocido la "clarísima" derrota, pero ha excluido la anticipación de las elecciones, afirmando que desea llevar a término "las reformas imprescindibles para la recuperación económica".

Para los socialistas la derrota es histórica también porque arrasa algunos de sus principales feudos, como la comunidad de Castilla-La Mancha, el municipio de Barcelona —que controlaban desde hace 32 años— y las ocho capitales andaluzas, Sevilla incluida. De hecho, las elecciones dejan un mapa político en el que predomina el PP en los ayuntamientos e igualmente en las principales comunidades autónomas. Los socialistas conservan el gobierno de Andalucía y del País Vasco (en este caso con el apoyo del PP), regiones donde no se ha votado. El Partido Popular ha ganado las elecciones por primera vez igualmente en Extremadura, hasta ahora otro gran bastión del PSOE, donde, sin embargo, podría mantener el gobierno regional si llega a un acuerdo con Izquierda Unida. Los populares conservan, con mayoría absoluta de escaños, la capital, Madrid, y su región. La segunda ciudad del país, Barcelona, pasa a los nacionalistas de  Convergència i Unió, quienes, para gobernar, necesitarán del apoyo del PP.