23.05.11

La Aparición del Apóstol Santiago

A las 6:50 PM, por Juanjo Romero
Categorías : General

Santiago Matamoros, escuela cuzqueña, siglo XVII, Perú

 

Hoy tocaría análisis post-electoral. Me supera, ¡qué pereza!. Así que, aprovecharé la fecha para recordar una fiesta que se celebraba hoy en toda España: la Aparición de Santiago, que tenía misa propia, con la siguiente oración:

¡Oh Dios, que encargaste misericordiosamente la nación española a la protección de tu Bienaventurado Apóstol Santiago, y que la libraste por él de la ruina que la amenazaba! Concédenos que, con la protección del mismo Santo Apóstol, lleguemos á gozar de la paz eterna. Por Nuestro Señor, etc.

Cuenta la tradición, que el rey Ramiro I de Asturias se niega a conceder el «Tributo de las Cien Doncellas» a Abderramán III, denunciando así el tratado que le obligaba al tributo lo que le obligaba al recomienzo de las hostilidades contra los moros. Reunidas las tropas salen derrotados de Albelda (Logroño) y todo lo más que consigue el diezmado ejército es esconderse en Clavijo. Apesadumbrado el rey se le aparece el Apóstol Santiago en sueños prometiéndole que estaría en el campo de batalla, espada en ristre, con túnica, estandarte y caballo blancos.

El día siguiente, 23 de mayo de 844, al grito de «¡Dios ayuda a Santiago!», tal como había contado el rey, apareció el apóstol. La escabechina de moros es considerable. Santiago se convierte en Santiago Matamoros y da comienzo el «voto de Santiago», por el que convertía en el santo patrón de España y germen del Camino peregrino de Compostela.

Supongo que la conmemoración herirá sensibilidades modernas. Ya lo siento, es lo que me ha venido a la cabeza, no tanto por lo sangriento, como por la absoluta necesidad de intervención sobrenatural para salir del marasmo actual. Por lo que se ve, a veces ocurre.