Un informe advierte que la ley de Pajín consagra el derecho absoluto del paciente terminal frente a la buena praxis médica
Católicos
Viernes, 03 de Junio de 2011 01:00

Según un informe del Foro Español de la Familia, el anteproyecto de ley de derechos del paciente terminal permite prácticas eutanásicas, pues consagra el derecho absoluto del enfermo para decidir sobre las intervenciones o tratamientos que recibe, aunque se opongan a las prácticas médicas aceptadas o la conciencia del facultativo.


La entidad afirma que mientras la ley de 2002 no da pie a que el paciente pueda imponer al médico sus decisiones respecto a los tratamientos a recibir, el nuevo anteproyecto sí parece permitir esta imposición en determinadas materias.

El anteproyecto presentado por la ministra de Sanidad, Leire Pajín, suprime esta frase de la ley vigente: “No serán aplicadas las instrucciones previas contrarias al ordenamiento jurídico o a la lex artis”. Ésta se define como el conjunto de prácticas médicas aceptadas generalmente como adecuadas para tratar a los enfermos en el momento presente.

Ningún artículo del anteproyecto se refiere al juicio profesional del médico, a la ‘lex artis’, a la objeción de conciencia, o a lo clínicamente indicado como criterios a tener en cuenta a la hora de decidir los tratamientos.

Además, el borrador del gobierno califica el proceso terminal del paciente como “lesivo de la dignidad de la persona”, lo cual es considerado por el Foro Español de la Familia como “una visión de la agonía y la muerte éticamente inadmisible y sectaria”.

La asociación advierte también de que considerar la sedación como un derecho absoluto del paciente “carece de toda justificación técnica y puede dar lugar a prácticas eutanásicas”, tal como adelantó ‘Religión Confidencial’. Y la nueva ley deja desprotegidos a los profesionales sanitarios, que se convierten en “proveedores automáticos de servicios sin conciencia, libertad, ciencia o arte propios”.

Pinche aquí para leer el informe del Foro Español de la Familia.