21.06.11

 

Pues sí, en Roma ya saben que la Iglesia está presente en el patronato de algunos hospitales de Cataluña que practican abortos. Y sí, parece que a la Santa Sede le preocupa el asunto. Pero no, Roma no ha tomado ninguna medida efectiva para poner fin a semejante barbaridad. Y no, la carta de la que se hace eco el ABC en su edición de hoy, y que recogemos en InfoCatólica, no supone un cambio esencial en la cuestión. Porque por muy monseñor que sea Mons. Jean Marie Mupendawatu, no deja de ser el subsecretario del Pontificio Consejo para la Pastoral de la Salud. Y un subsecretario es… eso, un subsecretario. Ni siquiera es obispo. Mucho menos arzobispo y cardenal.

En otras palabras, si el P. Custodio Ballester, cuyo testimonio, valentía y coraje apostólico en este asunto son dignos de alabanza y de agradecimiento por parte de quienes amamos a la Iglesia y defendemos el derecho a vivir, se acerca a su arzobispo, el cardenal Sistach, y le enseña la carta de Roma, el prelado le puede decir: “¿Esto de quién es? Ah, veo, ¡ni más ni menos que de todo un subsecretario! Vale hijo, déjala ahí encima de ese montón de papeles, que luego le echaré un vistazo“.

Y mientras tanto, la Iglesia en Cataluña -o sea, la Iglesia- seguirá presente en los patronatos de hospitales donde se practican abortos. De hecho, hay quien se malicia de que el día menos pensado veremos al P. Manel Pousa de capellán de alguno de esos hospitales. Pura coherencia pastoral, señores míos.

Exsurge, Domine, et iudica causam tuam

Luis Fernando Pérez Bustamante