29.07.11

La cara oculta de Medjugorje (II). El discernimiento

A las 5:22 PM, por Milenko
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En sus publicaciones (Trono de Sabiduría y Espejo de Justicia, entre otras) respecto al tema de las apariciones en Medjugorje, el obispo Peric enumera los criterios habituales para averiguar el origen sobrenatural (divino) de fenómenos similares. Arranca desde el conocido criterio del Papa Benedicto XIV (1740-1758) que subrayaba respecto a la validez de la “aprobación” concedidas (en su caso) a las apariciones, visiones, “revelaciones”: “Hay que saber que esa aprobación no es nada diferente que el permiso para la difusión de las apariciones con el fin de la educación y provecho de los fieles, después de un examen serio. Sin embargo, a esas revelaciones, aprobadas de esa forma, aunque no se les debe, ni se les puede dar, el consentimiento de la fe católica, se les debe a pesar de eso el consentimiento de la fe humana según las reglas de prudencia, por las cuales tales revelaciones son probables o devotamente fidedignas. (De Servorum Dei beatificatione et Beatorum canonizatione, Liber II, págl 32, Nº II)”. Sigue así hasta la Dei Verbum, CIC y los trabajos de teólogos actuales respecto al tema, como por ejemplo los profesores de la Univ. Gregoriana Jean Galot, R. Fisichella, así como el estudio de M. Mazza que aplica reglas establecidas a las apariciones de Medjugorje y cuya autenticidad rechaza metódicamente, criterio por criterio.

A mi parecer, los puntos esenciales de todos esos criterios son los siguientes (por no alargar):
1) Coherencia de los mensajes con la Revelación.
2) Desobediencia a la autoridad legítima.

Hay otros criterios, todos muy razonables, pero los tocaremos a lo largo de los siguientes post.

Debo mencionar de momento, ya que es muy oportuno en este caso, otro criterio recogido por Galot: “Se debe observar que de los mismos frutos espirituales no se puede sacar la conclusión respecto a su autenticidad; hay casos en los que han ocurrido muchas conversiones, pero luego han sido rechazados por la autoridad eclesiástica por carecer de cualquier fundamento.”

Trabajos como estos y los criterios de siempre, han utilizado las tres comisiones que han trabajado de momento con respecto a estas apariciones. Las primeras dos comisiones las ha nombrado el obispo Zanic (la primera ya en el 82 hasta el 84 y la segunda desde el 84 hasta el 86), la tercera comisión, encargada ya por toda la Conferencia Episcopal de antigua Yugoslavia, en el período 1987-1990 (mientras tanto se han emitido las declaraciones y advertencias oficiales de los ordinarios y comisiones, es decir, la Iglesia en ese nivel muy respetable, sí habló. Todo fue comunicado a la Santa Sede desde los comienzos. Procuraremos aportar esos datos también más adelante)

Por lo tanto, no es cierto que la Iglesia no se ha pronunciado. Las tres comisiones han dado un veredicto en definitiva negativo, non constat. De acuerdo, no es constat de non, pero debemos saber que las comisiones han trabajado a conciencia, con mucha seriedad en el asunto (recuerdo el testimonio particular de un miembro de las dos primeras comisiones, “en dos años estuve en Medjugorje más de 300 veces”). Han tenido acceso a la crónica de las apariciones, a los mensajes, han estudiado los distintos sucesos en cuestión, etc. Todo eso que muchísimas personas no han podido conocer, pero por desgracia por lo general hay poca valoración del trabajo de estas comisiones. Como si la gente fuera a su bola, ellos siempre saben más y de todo, aunque les pillan tantas cosas al margen. Luego, a muchísimas personas les falta la formación, pero se la pasa por el foro.

Sin embargo, a mi me gustaría poner al menos algún ejemplo concreto que indique la “mística correcta”, sin quitar valor alguno a los mencionados estudios. Los he mencionado, allí están, iremos publicando los extractos de la crónica de apariciones más conflictivas que os ayudarán a ver el asunto con claridad, eso espero.

O sea: ¿me puede Usted dar algunos ejemplos concretos de la buena mística? ¿Me puede Usted ilustrar, mediante ejemplos contrarios, dónde están los fallos aquí?

En ese sentido, mencionaré ejemplos sencillos que estén en perfecta sintonía con los dos puntos esenciales mencionados.

A san Martín se le aparece la figura de Cristo, sin heridas. Le espeta sin pensar: “apártate de mi Satanás, que no quiero a Cristo sin heridas.” (No me fío de lo que veo, sino de lo que creo, que es por la fe que sí me ha dado Dios)

Unos ejemplos de santa Gema Galgani, que tuvo numerosas visiones de Cristo, Madre de Dios, su ángel de la guarda.

Como las apariciones de su ángel eran muy frecuentes, su director espiritual temía que se trata de engaños del demonio (“Queridísimos, no creáis a cualquier espíritu, sino examinad los espíritus si son de Dios”; 1 Juan 4,1). Le ordena que la próxima vez que lo vea, lo escupa. Gema obedece, ve sin embargo como allí donde cae la saliva aparece una rosa blanca en cuyos pétalos estaba escrito: “Del amor todo se recibe”.

Gema sufre los estigmas, su director le prohíbe que duren más de una hora. En la aparición Jesús le dice que por atender a su director le deja los estigmas durante una hora.

Se le aparece Jesús sufriente, que lleva la cruz, le pide que haga más penitencia. El confesor había reducido la penitencia a Gema. Ella dice que no puede aumentarla porque el confesor se lo prohíbe. Desaparece la imagen de Jesús y el demonio le golpea fuertemente.

Padre Pío decía con la radicalidad que lo caracterizaba, que si su obispo le ordenara saltar por la ventana, que lo haría sin pensar.

¿Y qué es lo que vamos a ver en estas apariciones (todo lo documentaremos)?
Pues que no se le da instrucción ni exigencia alguna a la aparición, sino todo lo contrario. Es la aparición que dicta condiciones, aconseja desobediencia, presiona al ordinario que acepte las apariciones como válidas, comunica mensajes no compatibles con la doctrina católica… todo lo documentaremos en los próximos post.

[¿Veis cuál es el principal problema aquí? ¿Cuál es el inmenso mal que está escondido aquí? Que se quita la autoridad de gobierno de la Iglesia, que Cristo mismo ha dado a los apóstoles y a sus sucesores y se la da a una aparición. Es la promoción del supuesto conflicto entre carisma y jerarquía, es el peligro de la desnaturalización de la Iglesia y de su estructura, que no le pertenece ni siquiera a la Iglesia como algo propio, sino le es dado por su Cabeza, Jesucristo. Y más cosas.]

Quise aquí marcar la diferencia entre un proceder y otro, entre a mi entender buena y mala mística.

Ya hablaremos del tema de los videntes, pero se imagina alguien a Bernadette, Gema, etc. ir por todas partes haciendo show “sobrenatural” en “directo”:

En el próximo post presentaré la crónica de los mensajes exactos respecto a los frailes rebeldes Vego y Prusina, que hasta que no lo leas, no te puedes imaginar el semejante disparate. Por desgracia, los disparates no terminan en eso.