Iglesia-Estado
30/07/2011

Zapatero aún confía en sacar adelante las leyes de ‘muerte digna’ e igualdad antes de las elecciones del 20-N. Varios expertos consideran que no dará tiempo

El presidente del gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, aún confía en sacar adelante en el parlamento los proyectos de ley de 'muerte digna' e igualdad. Según ha dicho, dependerá de la "agilidad" con que trabajen los grupos políticos durante el mes de septiembre. Sin embargo, expertos consultados por este portal consideran muy difícil que dé tiempo a aprobarlas.


 

Como es sabido, la ley de 'muerte digna' abriría la puerta a prácticas eutanásicas, y la ley de igualdad prohibiría la financiación pública de colegios de educación diferenciada.

La ministra de Sanidad, Leire Pajín, aseguró hace unos días que la ley de igualdad será aprobada antes de que termine la legislatura. Pero todo parece indicar que eso no ocurrirá.

En su comparecencia para anunciar elecciones generales para el 20 de noviembre, Zapatero no mencionó en un primer momento las leyes de 'muerte digna' y de igualdad entre las prioridades de su gobierno. Pero respondiendo a preguntas de los periodistas, precisó luego que dichos proyectos podrían ser aprobados también.

El presidente del gobierno ha declarado que, con "un esfuerzo especial de los grupos parlamentarios y de las cámaras, estaremos en condiciones de aprobar algunas leyes de reforma que se encuentran en la fase final de su tramitación". Entre ellas, ha destacado las leyes de agilización procesal, concursal o de la de jurisdicción social; la ley de integración de los trabajadores agrarios en el régimen general de la Seguridad Social; y la ley de reconocimiento y protección integral a las víctimas del terrorismo.

La ley de 'muerte digna' se encuentra en estos momentos en la comisión de Sanidad del Congreso de los diputados, con un plazo para la presentación de enmiendas abierto hasta el 6 de septiembre. La ley de igualdad se encuentra en fase de ampliación de enmiendas hasta el 1 de septiembre. Sin embargo, el gobierno podría intentar adelantar los plazos, incluso presionando a los grupos parlamentarios para que trabajen en agosto.

Los obispos españoles no se han pronunciado sobre el adelanto electoral.