30.07.11

Estados Unidos: se fue el "súper nuncio"

A las 3:56 PM, por Andrés Beltramo
Categorías : Iglesia en América, Diplomacia y Política
 

“Súper nuncio” era su sobrenombre. Se llamaba Pietro Sambi y era embajador del Vaticano en Estados Unidos. Falleció la tarde del pasado 27 de julio en la ciudad de Baltimore a la edad de 73 años. Era tan estimado en el cuerpo diplomático que el mismo vicepresidente estadounidense Joe Biden expresó sus condolencias.

Nacido en la localidad italiana de Sogliano sul Rubicone en 1938, recibió la ordenación sacerdotal el 14 de marzo de 1964. Era doctor en derecho canónico y teología. Ingresó en el servicio diplomático del Vaticano en 1969 y sirvió en las nunciaturas y delegaciones apostólicas de Camerún, Cuba, Argelia, Nicaragua, Bélgica e India.

Fue nuncio en Burundi e Indonesia, pero su prueba de fuego llegó en 1998 cuando asumió el puesto de representante pontificio en Chipre e Israel, que va aparejado con el título de “delegado apostólico” para Jerusalén y Palestina.

Desde ese puesto se convirtió en uno de los artífices de la histórica visita pastoral que cumplió Juan Pablo II a Tierra Santa en el año 2000, un sueño hecho realidad. Benedicto XVI lo mandó a Estados Unidos en diciembre de 2005. Sambi así pudo mostrar todo su perfil diplomático al organizar la visita de Ratzinger a la Unión Americana en abril de 2008, uno de los más exitosos viajes internacionales del actual pontificado.

Con el fallecimiento del nuncio sufre una transformación sustancial lo escrito en este espacio hace unos días respecto de los cambios que se vienen en El Vaticano. El Papa deberá buscar otro sucesor al cardenal Velasio De Paolis al frente de la Prefectura para los Asuntos Económicos de la Santa Sede. Así, la aceptación de la renuncia del purpurado deberá esperar.

Serafines susurran.- Que se quedó sin palabras la titular de la Procuraduría General de la República de México, Marisela Morales, cuando fue cuestionada por periodistas sobre su paseo por El Vaticano el 28 de julio, en el marco de su gira por Europa.

No supo qué decir, tanto que debió intervenir su encargada de prensa primero con un “no hay comentarios” y luego el todavía embajador mexicano en Roma, Jorge Chen, para explicar que la visita de la procuradora al Vaticano tuvo una parte privada y una parte oficial, que correspondió al intercambio de opiniones con funcionarios pontificios respecto al tema de seguridad. “Como la prioridad de las relaciones con El Vaticano no puede ser la seguridad, se habló del tema sólo como cortesía”, agregó.

Y es que Morales debió firmar, la mañana del jueves, dos tratados (uno de extradición y otro de asistencia jurídica) con el ministro de Justicia italiano. Empero la tarde del día anterior, miércoles 27, el entonces ministro Angelino Alfano renunció a su puesto para dedicarse de lleno a la política.

La primer damnificada por este repentino cambio fue la procuradora, a quien primero le pusieron la firma a las 13:00 horas y después la mandaron a las 19:00, porque apenas dos horas antes (a las 17:00) el nuevo ministro, Nitto Palma, tomó protesta. Por ello su agenda cambió drásticamente y, en las horas libres, realizó un recorrido por El Vaticano del cual salió “emocionada y agradecida”. Emoción que no pudo expresar en público, porque cuando se le preguntó por su visita le limitó a un “qué te puedo decir, al fin y al cabo todos terminan allá”.

Querubines replican.- Quien ya se apuntó para visitar El Vaticano es el gobernador de Puebla (México), Rafael Moreno Valle. Esta semana lo anunció abiertamente y hasta dijo que pronto se reunirá con el arzobispo de esa arquidiócesis, Víctor Sánchez Espinosa, para definir los detalles.

Quizás los periodistas entendieron mal o mal comprendió el gobernador, ya que según la prensa poblana Moreno “viajaría para reunirse con Benedicto XVI”. Algo prácticamente imposible ya que el pontífice sólo recibe en audiencia privada a los jefes de Estado de las naciones y, en algunos casos, también a los jefes de Ejecutivo. Pero nada más.

El resto de los funcionarios sólo tienen la oportunidad de saludarle, si bien les va, unos segundos al finalizar una audiencia pública, como muchos otros fieles y personas elegidas. Aunque existe una posibilidad adicional: que Puebla se convierta en el próximo Estado en patrocinar la “Navidad mexicana en El Vaticano”, esa iniciativa cultural que comenzó en 2007 con motivo del 15 aniversario de relaciones diplomáticas entre México y la Santa Sede.

En ese contexto cada diciembre algún gobernador viene a Roma para obsequiar al Papa la artesanía de su entidad federativa. Ya lo hicieron en 2007 Emilio González Márquez (Jalisco), en 2009 Enrique Peña Nieto (Estado de México) y en 2010 Juan Manuel Oliva Ramírez (Guanajuato). Entonces sí el saludo del gobernador podría pasar de unos segundos a unos minutos, pero no para analizar temas políticos sino como un simple gesto de cortesía.