Confía en que la visita del Papa ayude a ello

El presidente de la Conferencia Episcopal Cubana apuesta por la reconciliación entre los cubanos

 

La Iglesia Católica en Cuba apuesta por la «reconciliación» entre los cubanos como prioridad en un año marcado por la visita del Papa a la isla, en el que se propone continuar el diálogo abierto con el Gobierno en medio de los «tímidos cambios» que vive el país. El presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba (COCC), Mons. Dionisio García, afirmó en una entrevista con Efe que los cubanos necesitan esa «amplia» reconciliación, aunque advierte de que aún «hay gente que la rechaza» dentro y fuera de la isla.

18/02/12 10:01 AM


 

(Efe) El también arzobispo de Santiago de Cuba considera que la "división", la "separación" y las "diferencias" afectan tanto a las familias como a los ámbitos social, cultural o político, y por ello ve necesario fomentar una actitud de "aceptar al otro, aceptar lo que piensa, lo que dice, lo que es, cómo ve la realidad de las cosas".

Las autoridades católicas cubanas han puesto énfasis en potenciar esa actitud conciliadora durante su labor pastoral en 2012, cuando se celebra el Año Jubilar por el 400 aniversario del hallazgo de la imagen de la Virgen de la Caridad del Cobre, patrona de Cuba.

Mons. García recuerda que esa celebración, así como la visita del papa Benedicto XVI en marzo, tienen lugar después de que el país haya transitado "de un Estado marxista rígido a un Estado en que la libertad religiosa (...) sea aceptada".

La visita de Juan Pablo II a Cuba en 1998 significó un "punto de inflexión" tras años de trabajo en los que la Iglesia de Roma se propuso lograr una mayor presencia en la isla, donde los vínculos entre las autoridades católicas y el Gobierno revolucionario tienen un historial de crisis, tensiones y altibajos.

En ese sentido, el arzobispo recalca que la visita de Juan Pablo II y el próximo viaje de Benedicto XVI son "situaciones diferentes". Hubo "cambios internacionales que conmovieron a Cuba. Hubo cambios también en la manera del Estado, del Gobierno, de ver el papel de la fe y del religioso, la caída del campo socialista, y una vuelta más firme de Cuba hacia América Latina", señala García.

En particular, destaca el hecho de que el Gobierno haya puesto "su mirada" en Iberoamérica, ya que en la región "el papel de los creyentes tiene un peso social y cultural, y eso también hizo que (...) el respeto a la fe de la persona se empezara a ver de otra manera".

El viaje de Benedicto XVI a la isla entre los días 26 y 28 de marzo se enmarca en las celebraciones del Año Jubilar, y el Papa llegará como "peregrino" para visitar el Santuario Nacional de la Virgen de la Caridad del Cobre en Santiago de Cuba.

No obstante, el arzobispo reconoce que es "inevitable" que se busquen los "efectos políticos" de esa visita a Cuba, donde el presidente Raúl Castro impulsa ajustes económicos e Iglesia católica y Gobierno abrieron un inédito diálogo en 2010 que culminó con la liberación de más de un centenar de presos políticos muchos de los cuales se trasladaron a España.

"Esta visita del Santo Padre, en este momento de cambios, que son muy tímidos todavía pero son cambios, nos va a animar a vivir estos cambios en una perspectiva de respeto a cada persona, en su dignidad como persona", sostiene García.

Para el presidente de la Conferencia de Obispos, de 67 años, las reformas que desarrolla el Gobierno "podrían ser más audaces", aunque añade que las transformaciones que se impulsan "sí pueden ayudar".

Asimismo confirma que la Iglesia católica y el Estado mantienen su comunicación con "fluidez", y, aunque no existe una agenda predeterminada de áreas para trabajar en conjunto, el canal de diálogo se mantiene abierto.

La Iglesia católica ahora "puede verter con más facilidad sus opiniones", sus criterios "son escuchados" y muchas veces reciben respuesta, añade.

"Me parece que es una continuidad producto de la presencia de la Iglesia en Cuba en todo este tiempo, del trabajo amplio de la Iglesia (...) y también un cambio de actitud de parte del Estado", afirma.

Sin olvidar antiguas reclamaciones, como un mayor acceso al sistema educativo y a los medios de comunicación, Mons. García admite que sin duda tienen actualmente una mayor presencia en los medios que en años pasados.