30.03.12

 

Policías del municipio de Nacozari (Estado de Sonora, México) detuvieron a ocho miembros de una misma familia que presuntamente realizaba sacrificios humanos en honor a la Santa Muerte, tal como informábamos ayer del suceso en este blog. En declaraciones a la prensa, recogidas por el diario Proceso, el director de la corporación en ese municipio serrano, José Miguel Espinoza Osuna, explicó que los detenidos están implicados en el secuestro y muerte de dos menores y una mujer, cuyas osamentas fueron halladas en un predio ubicado al noroeste de Nacozari.

Recapitulación del suceso

Las víctimas respondían a los nombres de Jesús Octavio Martínez Yáñez, Tete, y Martín Ríos Chaparro, ambos de 10 años, y Clotilde Pacheco, de 55. El primero fue reportado como desaparecido el pasado 6 de marzo; el segundo, en julio de 2010, y la tercera, en septiembre de 2009. De acuerdo con Espinoza Osuna, la pista que llevó a dar con los responsables de la presunta secta fue el seguimiento que se hizo del caso de la desaparición de Tete, el pasado 6 de marzo.

Los detenidos confesos son: Silvia Meraz Moreno, de 44 años, quien es matriarca de la familia; su cónyuge, Eduardo Sánchez, de 37; Francisca Magdalena Barrón Meras, La Nena, de 21; Georgina Guadalupe Barrón Meras, La Cookies, de 20, y su marido, Martín Barrón López, de 48; Ramón Omar Palacios Meras, de 28, y su pareja Zoila Santacruz, y Yhajaira, de 15.

El jefe policiaco narró que los miembros de esa familia confesaron su participación en el secuestro y muerte de los menores y la mujer, y en su inhumación clandestina en un predio ubicado al noroeste de Nacozari. Al escarbar, los policías encontraron los restos de Tete y, envueltos en una cobija, los de Clotilde Pacheco y Ríos Chapa. En su declaración, los integrantes de la secta dijeron que a Clotilde la mataron de un hachazo en la nuca y que después la apuñalaron en el abdomen y le sacaron la sangre para ofrecerla como ofrenda a la Santa Muerte.

Como explica la agencia Efe en un despacho, la Santa Muerte es una figura mexicana de veneración que combina elementos del culto prehispánico a los muertos y del catolicismo. En ocasiones el culto es vinculado a distintos tipos de delincuencia, principalmente el narcotráfico.

Condena del gobernador

El gobernador Guillermo Padrés Elías condenó los hechos, según relata Milenio. Padrés Elías confirmó que “hasta ahora” la agencia investigadora ha detenido a ocho personas, quienes confesaron sus delitos pero no descartó que pudiera haber más gente implicada. “Hasta donde sabemos no hay más víctimas, pero vamos a ver que información aportan estas personas… tengo entendido que las personas son originarias de Nacozari”, refirió.

Padrés Elías indicó que “es un hecho muy lamentable, todos los sonorenses reprobamos que existan todavía este tipo de prácticas. Hubo una denuncia donde se hacía ver que estaba un niño desparecido, y la Policía Estatal Investigadora puso atención en eso y así dieron con la pista de quienes habían cometido el acto y fueron allá y se enteraron de las demás muertes”, según leemos en Termómetro en línea.

Dijo que los detectives de la PEI tienen la presunción de que los miembros de la secta cuentan familiares en otros municipios del estado, pero no aclaró si podrían estar involucrados en los asesinatos. Añadió que en Sonora no había antecedentes de la presencia de sectas como la del culto a la Santa Muerte que operaba en el municipio de Nacozari de García.

“No, para nada, que yo sepa no existen antecedentes de esto, es algo muy lamentable y no lo vamos a permitir y yo estoy de alguna manera muy pendiente de que la PEI haga su trabajo, lo hizo y lo hizo bien y felicito a esos elementos que inmediatamente encontraron a los responsables. Tengo entendido que son como ocho, sino es que más en este momento con el seguimiento de las investigaciones, hasta donde sabemos no hay más victimas, pero pues, vamos a ver que información aportan estas personas, pero lo importante es que estas personas ya están detenidas”, expresó, en declaraciones recogidas por El Reportero de la Comunidad.

Reacción del Arzobispo de Hermosillo

En tanto, el Arzobispo de la Diócesis de Hermosillo, José Ulises Macías Salcedo, dijo que las personas que asesinaron a los dos jóvenes y la anciana mostraron desprecio a la dignidad humana y la vida. Pidió a la grey católica no confundir una secta con una religión. Una secta, dijo, es un grupo que se disfraza de religiones para atraer más gente ya que “el pueblo de México es muy religioso”.

El pastor de la Iglesia católica en esta capital dijo que mucha gente inocente es engañada porque “quien no conoce a Dios, a cualquier palo se le hinca”. “Es un hecho que nos tiene que doler, debemos acercarnos más al Señor”, comentó el obispo, tal como leemos en Ehui. Macías Salcedo pidió perdón para las personas involucradas en los asesinatos “que han caído en pecado y les pido que sepamos aceptar la vida con el alto costo que tiene”, puntualizó.

“Las expresiones de la muerte que se inventan son pretextos para arrebatar la vida”, dijo, tal como informa Dossier Político. Macías Salcedo explicó que una secta que habla de cultos y ritos que atentan contra la vida, causándole la muerte a seres inocentes, no es una religión. Dijo no tener conocimiento de que en años anteriores se hubieran presentado este tipo de casos (sacrificios humanos) hasta ahora, a excepción de gallos negros muertos colgados o por las calles de Hermosillo.

El arzobispo de Hermosillo dijo que es una incongruencia de las sectas que adoran a la Santa Muerte que “por un lado hagan veneraciones, pero por el otro quiten la vida”. Habitantes de Nacozari, conmocionados con el triple homicidio, han convocado a salir a la calle vestidos de blanco para manifestar su pesar a los familiares de las víctimas. La reunión está prevista para hoy, viernes 30 de marzo, en la Plaza Juárez.