ZENIT

El mundo visto desde Roma

Servicio diario - 15 de julio de 2012

Santa Sede

'Animo a responder con generosidad y prontitud de corazón a la voz de Cristo'
Palabras del papa en el Ángelus

Mundo

Catorce mil misioneros españoles a favor de los empobrecidos
Clausura de la 65 Semana Española de Misionología

México: Peregrinación de la diócesis de Querétaro al Tepeyac
Con asistencia del nuncio apostólico

La comunicación más allá de la palabra
La madre Escolástica Rivata, un testimonio profético que se cumple hoy

México: 'Con paz y alegría construimos la Iglesia común'
Caminata por la paz, la vida y la Familia en la diócesis de Nezahualcóyotl

Desmienten que una persona acusada de abusos sexuales sea sacerdote
Comunicado del Arzobispado de Granada

Donde Dios llora

Sudáfrica: "Los preservativos son parte de la arrogancia de la comunidad internacional"
Entrevista al obispo XoleloThaddaeus Kumalo, de Eshowe

Entrevistas

Los movimientos eclesiales y las nuevas comunidades aportarán sus carismas en el Año de la Fe
Entrevista a monseñor Miguel Delgado, subsecretario del Consejo Pontificio para los Laicos

Foro

¿Por qué en Brasil los católicos diminuyen?
Análisis de las causas de este fenómeno

Iglesia profética y colaboradora
Para la construcción de una sociedad justa y fraterna

Documentación

'Toda la historia tiene como centro a Cristo'
Palabras de Benedicto XVI en el Ángelus


Santa Sede


'Animo a responder con generosidad y prontitud de corazón a la voz de Cristo'
Palabras del papa en el Ángelus
CASTEL GANDOLFO, domingo 15 julio 2012 (ZENIT.org).- A la vuelta de Frascati, donde esta mañana se trasladó en visita pastoral, a las 12 horas, Benedicto XVI se asomó al balcón del patio del Palacio Apostólico de Castel Gandolfo y recitó el Ángelus junto a los fieles y a los peregrinos presentes.

El papa en su introducción al Ángelus recordó que hoy se celebra la memoria de san Buenaventura de Bagnoregio, franciscano, doctor de la Iglesia y sucesor de san Francisco de Asís en el gobierno de la Orden de los Frailes Menores.

"Francisco de Asís --recordó el papa--, después de su conversión, practicó a la letra este Evangelio, convirtiéndose en un fiel testigo de Jesús; y asociado de un modo especial al misterio de la Cruz, fue transformado en un 'otro Cristo', como san Buenaventura lo presenta".

Esta centralidad de Cristo, subrayó Benedicto XVI, "la encontramos en la segunda lectura en la Misa de hoy, el famoso himno de la Carta de Pablo a los Efesios, que comienza así: 'Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos ha bendecido con toda clase de bendiciones espirituales, en los cielos, en Cristo'. El Apóstol muestra cómo se ha realizado este designio de bendición, en cuatro etapas que comienzan todos con la misma expresión 'en Él', refiriéndose a Jesucristo. 'En él', el Padre nos ha elegido antes de la fundación del mundo; 'en Él' tenemos la redención por su sangre; 'en Él' nos hemos convertido en herederos, predestinados a ser 'alabanza de su gloria'; 'en Él', cuantos creen en el Evangelio fueron sellados con el Espíritu Santo".

"Queridos amigos --concluyó el papa--, invoquemos a María Santísima, a quien mañana celebraremos como la Virgen del Monte Carmelo, para que nos ayude, como a san Francisco y a san Buenaventura, para responder generosamente al llamado del Señor, para proclamar su Evangelio de salvación con la palabra y sobre todo con la vida".

Se puede leer el texto completo de las palabras del papa en: http://www.zenit.org/article-42761?l=spanish.

Tras sus palabras, el papa se dirigió a los distintos grupos lingüísticos en su idioma. A los peregrinos de lengua hispana, les dijo: "Saludo a los peregrinos de lengua española, en particular a los fieles de la parroquia del Santo Niño, de Atocha, en México, así como a los que participan en esta oración mariana a través de los medios de comunicación. En el evangelio que nos propone la liturgia en este domingo, vemos a Jesús que llama y envía a los apóstoles a predicar la conversión. En efecto, la finalidad de la Iglesia es la propagación del Reino de Dios, para hacer partícipes a todos los hombres de la redención. Animo, pues, a todos los miembros de la Iglesia, y de modo especial a los laicos, a responder con generosidad y prontitud de corazón a la voz de Cristo, para unirse más íntimamente a él y colaborar en su misión salvífica".

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Mundo


Catorce mil misioneros españoles a favor de los empobrecidos
Clausura de la 65 Semana Española de Misionología
BURGOS, domingo 15 julio 2012 (ZENIT.org).- El pasado jueves concluyó la 65 Semana Española de Misionología en Burgos, que se celebró del 9 al 11 de julio con una importante participación.

El número de matriculados alcanzó los cien, lo que supone un incremento en más del 30%. El tema elegido en esta ocasión era de notable actualidad: "Ser Misionero en la Nueva Evangelización". La inmediatez del Sínodo de Obispos sobre la Transmisión de la fe (próximo octubre) hizo que acudieran participantes de Almería, Jaén, Cádiz, Tarragona, Valencia, Tenerife… Muchos de ellos mostraban su satisfacción por el curso y la ciudad, tan bella y cómoda en verano, informa la Facultad de Teología de Burgos.

En las ponencias destacaron las aportaciones de los profesores Eloy Bueno y José Valdavida (Burgos), Xavier Morlans y Francesc Torralba (Barcelona) y Francisco Serrano (Madrid). En todas ellas se destacó el importante esfuerzo que debe hacer la Iglesia para que la Nueva Evangelización sea una acción que responda al ser mismo de la Iglesia y no sólo a las cambiantes circunstancias. La cultura, los mass media, las metrópolis, los empobrecidos, las sectas… hacen al Evangelio más necesario y más posible.

A la vez que el aula magna de la Facultad de Teología se convertía en el ágora de la reflexión y diálogo, los obispos de la Comisión Espiscopal de Misiones se reunían para conocer y aprobar el "Informe sobre la Cooperación Misionera de la Iglesia Española con la Humanidad".

Son más de catorce mil misioneros españoles en el mundo al lado de los empobrecidos. De ellos 750 son laicos y el 40% de estos, matrimonios. Se ratificó la exigencia de permanecer tres años en el país de misión y se insistió en la necesidad de acentuar su formación.

Igualmente se reunió el Consejo Asesor de la OCSHA (Obra de Cooperación Sacerdotal Hispanoamericana). Abordaron la manera de seguir acompañando a los 320 sacerdotes españoles en Latinoamérica. Por este motivo, habrá diversos encuentros de misioneros en Ecuador y Bolivia a lo largo del próximo curso. Se celebrará, como todos los años, el 4 de marzo la Jornada de Hispanoamérica. También se ocuparon de la ONG de la Conferencia Episcopal "Misión América", que apoya proyectos sociales (el presente año por un valor de 300.000€). Algunos de ellos han sido subvencionados por entidades como la Diputación de Palencia, el Ayuntamiento de Madrid o el Ayuntamiento de Burgos.

La Semana de Misionología fue clausurada por monseñor Braulio Rodríguez Plaza, arzobispo de Toledo y presidente de la Comisión Episcopal de Misiones.

Don Anastasio Gil García, director de Obras Misionales Pontificas (OMP) anunció las fechas de la próxima Semana: 8-11 de julio. Don Francisco Pérez Herrero, decano de la Facultad de Teología de Burgos, dio las gracias a todos e invitó a continuar con este ambiente misionero con la exposición de carteles del DOMUND, "70 imágenes y un solo mensaje".

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México: Peregrinación de la diócesis de Querétaro al Tepeyac
Con asistencia del nuncio apostólico
QUERÉTARO, domingo 15 julio 2012 (ZENIT.org).- El nuncio apostólico en México, monseñor Christophe Pierre, visitó la ciudad episcopal de Santiago de Querétaro para conocer su fe, cultura y tradiciones. Junto con la diócesis, el representante del papa peregrinó al Tepeyac para visitar a la Virgen de Guadalupe.

El miércoles 11 de julio, el nuncio apostólico fue recibido, acogido y bienvenido con un concierto en su honor en la Escuela Diocesana de Música Sacra. La armonía y las voces de niños y jóvenes fueron muestra de la sensibilidad del alma de la gente de estas benditas tierras que aclama “solamente para gloria de Dios”, informa la diócesis de Querétaro.
El jueves 12 de julio, el obispo Faustino Armendáriz Jiménez, agradeció la visita del representante del papa en México.

La invitación de venir a esta Iglesia local fue para compartir una de las experiencias "más hermosa, llena de piedad y de fe" de la Diócesis: La Peregrinación al Tepeyac, para los hombres es la 122, para las mujeres es la 53.

"Como Iglesia compartimos con el señor nuncio la fuerza de nuestra fe hecha camino, sacrificio, conversión, profunda oración en los pies de miles de peregrinas y peregrinos que en sus manos desgranan el rosario y sus corazones se convierten al Señor. Así vivimos y expresamos la fe del Evangelio predicado por Jesús nuestra paz, nuestra luz y nuestra gloria", informa la Diócesis.

Este jueves, muy temprano el señor nuncio y el obispo iniciaron el viaje al encuentro de los peregrinos en la población de Canalejas, donde celebraron la Eucaristía y compartieron el pan de vida. Un grupo de niños recibieron la Comunión por primera vez y juntos aclamaron a la Madre del Cielo, en la presencia de la Patrona Diocesana: Nuestra Señora de los Dolores de Soriano. Un detalle singular fue la imposición de la Medalla de Peregrino por primera vez, que recibió monseñor Pierre de monseñor Armendáriz.

Ya por la tarde reanudaron el camino hasta llegar con las hermanas peregrinas, ellas lo recibieron con muestras de cariño y mucho respeto, le entregaron un paliacate, sombrero y con ellas caminaron desde la comunidad La Cañada hasta Tepeji del Río. Venciendo la adversidad de las inclemencias de la lluvia, el peregrinar concluyó en la Parroquia con el saludo y bendición por parte del señor nuncio y del obispo.

Monseñor Christophe Pierre reconoció la gran disciplina de los peregrinos y peregrinas que aún bajo la lluvia caminaron en orden, cantando y rezando con mucha fe y alegría.

En su homilía, el nuncio apostólico recordó el gesto de Jesús al entregar a María por madre a su discípulo Juan.

"Esto fue lo que sucedió en aquel día terrible y glorioso, en el que Cristo moría sobre la cruz; ese día en que en el apóstol San Juan, todos nosotros fuimos hechos, ya desde entonces, hijos de la Virgen María. Hecho maravilloso que da sentido a nuestro peregrinar hacia la casa de la Virgen 'bendita entre las Mujeres', del Tepeyac".

"En efecto, queridos hermanos, nosotros vamos peregrinos en camino hacia el Santuario del Tepeyac santificado por la presencia de Santa María, la 'Madre del verdadero Dios por quien se vive' y por la oración de generaciones de hombres y mujeres que a lo largo de los años se postran a sus plantas para agradecerle tantos favores y para poner confiadamente bajo su intercesión, sus proyectos y dificultades", añadió.

"Nuestra peregrinación --subrayó--, es una, entre muchas, de las más bellas y significativas tradiciones que se han ido trasmitiendo de generación en generación en el pueblo mexicano creyente; verdaderas lecciones de vida cristiana: oraciones aprendidas de nuestros padres, peregrinaciones que nos convocan y nos llevar a vivir mejor la piedad litúrgica, a participar consciente y activamente en la oración común de la Iglesia; a recibir frecuentemente el sacramento de la penitencia a través del cual, confesando nuestros pecados al sacerdote, nuestros pecados son perdonados; y también a participar en la Santa Misa, en donde podemos y debemos recibir con dignidad y sin pecado alguno, la vida de gracia que se nos da en la Sagrada Comunión, especialmente los domingos".

"Hoy, entonces, caminamos como hermanos, 'en familia' hacia la casa bendita de Santa María de Guadalupe. Pero, preguntémonos: ¿Qué es lo que nos impulsa a no hacer caso a la fatiga, al cansancio y al sacrificio? ¿Qué es lo que hace posible esta manifestación de piedad que año tras año han llevado a cabo tantas y tantas generaciones de nuestro pueblo? ¿Qué pasó en el Tepeyac, para que miles y miles de mujeres y hombres, superando dificultades de toda índole, vayan a él día a día?

Ir en peregrinación hacia el Tepeyac ciertamente tiene motivos y significados diversos; pero, a la base, con nuestro peregrinar hacemos algo muy sencillo y, al mismo tiempo algo sumamente importante: queremos decirle a la Virgen María que la reconocemos como Madre del Verdadero Dios hecho hombre y como Madre nuestra. Queremos confesar ante el mundo y ante la sociedad nuestra convicción de que efectivamente la reconocemos como Madre, y también, como Reina de la Patria mexicana; como Madre de todos los llamados a ser discípulos misioneros de Jesús; como Madre de la Iglesia, Madre de la Unidad y Madre de la Comunión".

"Queridos hermanos: Cuando contemplemos con fe y amor la bendita imagen de Nuestra Señora de Guadalupe en su Basílica del Tepeyac, volverá a cumplirse lo que aconteció desde el principio: que junto al Evangelio que anuncia a Cristo, indisolublemente se hace presente también la Madre".

"Pongamos bajo el manto cubierto de estrellas de Santa María de Guadalupe, nuestras personas con sus necesidades e intenciones, y pongamos también nuestra preocupación por las familias y por la misma institución familiar, seguros de que Ella nos ayudará a transformar esa preocupación en esperanza. Le pido y le pediremos, que nos dé fuerza apostólica para saber, no sólo resistir, sino también para difundir con claridad y serenidad el patrimonio invalorable de nuestra fe.

Y pongamos bajo la protección de la “bendita entre las mujeres”, a todas las mujeres de México: a las esposas, a las viudas, a las novias, a las hijas, para que, sostenidas por el amor de Dios y por el amor de ustedes, se esfuercen por imitar a nuestra Madre la Virgen.

Agradezcamos al Señor por las virtudes femeninas con las que ellas contribuyen al bien de todos y que por todos deben ser siempre apreciadas, valoradas y alentadas. Que la Virgen María nos ayude a mirarlas y a tratarlas con respeto, comprensión, ternura y fortaleza, en y desde la fidelidad mutua y la fidelidad a Dios y a María. Será así que lograrán hacer de cada hogar un remanso de paz y una fuente de alegría cristiana".

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La comunicación más allá de la palabra
La madre Escolástica Rivata, un testimonio profético que se cumple hoy
ROMA, domingo 15 julio 2012 (ZENIT.org).- Ofrecemos un artículo sobre la sierva de Dios madre Escolástica Rivata, quien inició la congregación de las Pías Discípulas del Divino Maestro, a los 25 años de su muerte.

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Por sor M. Joseph Oberto PDDM

En la constelación de la santidad de la Familia Paulina se integra la sierva de Dios madre Escolástica Rivata, quien nació hace 115 años, y que este año celebra el 25 aniversario de su dies natalis.

En 1924, el beato Santiago Alberione elige a la joven Úrsula, que llevará el nombre de hermana Escolástica de la Divina Providencia, para dar vida a las Pías Discípulas del Divino Maestro. Una mujer sin títulos ni diplomas, pero con la sabiduría elaborada diariamente, desde la adolescencia, de la fuente de la Eucaristía. Acogió, dio a luz e hizo crecer, en medio de muchas pruebas, lo que era el carisma de una nueva institución, en un estilo de silencio y ocultación, pero con el sello de "mujer de la comunicación".

Benedicto XVI, el 27 de junio pasado, hablando de san Pablo dijo que, "el encuentro con el resucitado Cristo, le hizo comprender que él es el único tesoro que la propia existencia merece la pena gastar", y esto también ha ocurrido en Escolástica, cuando hizo su declaración de amor incondicional: "¡Señor, Tú solo, y basta!", que vivió en la vida cotidiana, en la fidelidad para siempre, "en la alegría, en el dolor, en la enfermedad y en la salud ..."

¿Qué puede decir la madre Escolástica al mundo de hoy? Se podría resumir su mensaje en "Silencio y palabra", casi un icono del mensaje del papa para la Jornada de las Comunicaciones 2012.

Vivimos en un mundo de tanto ruido, medios de comunicación y de mensajes que se han multiplicado enormemente, llevando con frecuencia, si no hay silencio, a la no-comunicación. Y se presenta en ella un retrato de una mujer de silencio, un silencio que revela una plenitud interior, alimentada por la escucha de la Palabra de Dios, conquistada por un auto-control, que se convierte en "una obra de la misión" por mejorar la palabra de los que evangelizan con los medios de comunicación.

Aunque encerrada dentro de las paredes de la casa religiosa, la madre Escolástica tuvo siempre sus ojos extendidos a todo el mundo, se ha acercado con el amor de apóstol a cada ansiedad de los hombres y mujeres de todos los continentes, incluso a través del periódico y otros medios de comunicación, que metía en su corazón para ser presentado en la adoración eucarística al Maestro Divino. En sus propósitos, escribió: "Leer los periódicos, escuchar la radio y la televisión para conocer las necesidades de las almas y orar por las necesidades del país, la Iglesia, las almas de toda la humanidad". Élla veía las noticias, porque "ahí va el mundo por el cual oramos y damos".

"El silencio se convierte en esencial para discernir lo que es importante de lo que es innecesario o incidental" (Benedicto XVI). En un mundo consumista y materialista en el que quien "posee un tesoro" es sinónimo de éxito, dinero, poder, fama, que identifica la felicidad personal con la compra, posesión y consumo de bienes materiales de forma continua, Madre Escolástica anuncia que el verdadero tesoro es caminar en la voluntad de Dios, y siempre en los labios con un "gracias" por lo que el Señor nos concede, respetando sus dones.

"En silencio, se le permite hablar a la otra persona, expresarse ..." (Benedicto XVI), y la madre Escolástica fue capaz de escuchar a todos los hermanos y hermanas, y en particular a las generaciones más jóvenes. Incluso entonces, cuando era una mujer con arrugas que le surcaban la cara, tenía un corazón joven, abierto a la comprensión del lenguaje de la juventud, de su tiempo y constructora de futuro.

Las vicisitudes de la historia, impusieron en ella el "silencio" en diferentes circunstancias y en los últimos tres años de vida también fue privada del uso de la palabra, pero no de la comunicación que continuaba siendo incisiva a través de las expresiones faciales, sobre todo en la sonrisa y las manos."En el silencio --dice el mensaje del papa--, se capturan los momentos de verdadera comunicación entre las personas que se aman: el gesto, la expresión facial, el cuerpo, como señales que muestran a la persona ...".

"En el silencio hablan la alegría, las preocupaciónes, el dolor, que en este encuentra una forma particularmente intensa de expresión" (Benedicto XVI), y la madre Escolástica, especialmente en el silencio comunicó la alegría. Desde la primera opción que la hizo exclamar: "¡Señor, Tú solo, y basta!", a la consumación de la oferta, conoció la alegría duradera de quien ofrece el servicio, la gratuidad. Su vida no fue vaciada, ya que siempre estuvo hecha de la fuente de luz que viene de la Palabra de Dios y de la Eucaristía.

La sierva de Dios madre Escolástica Rivata, dio pleno sentido a su vida encontrando en Jesús Maestro, Camino, Verdad y Vida, "la respuesta capaz de dar paz a las inquietudes del corazón humano", y su silencio se vuelve también hoy, una palabra densa de contenido, de comunicación de la vida.

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México: 'Con paz y alegría construimos la Iglesia común'
Caminata por la paz, la vida y la Familia en la diócesis de Nezahualcóyotl
NEZAHUALCÓYOTL, domingo 15 julio 2012 (ZENIT.org).- El obispo de Nezahualcóyotl, México, monseñor Héctor Luis Moráles Sánchez, convocó para este domingo la caminata por la vida y la paz en la familia. Un evento multitudinario diocesano de movilización, que encabezó el mismo pastor de la Diócesis de Nezahualcóyotl.

"Le he pedido a la Comisión Diocesana de Pastoral Familiar, Juventud, Laicos y Vida que sea quien coordine este evento, en comunión con la Pastoral de Multitudes", explica el obispo.
La cita fue este domingo, en la Glorieta del Coyote a las 11 a.m., desde donde partieron por la avenida López Mateos hasta la 4ª Avenida y de ahí hasta la calle de México lindo para llegar a la Catedral, Jesús, Señor de la Misericordia y culminar con la celebración Eucarística donde juntos pidieron a Dios por la vida, por la paz y por nuestras familias.

A la manifestación estaban convocados todos los sacerdotes, religiosos, religiosas, fieles de la diócesis, hombres y mujeres de buena voluntad, fueran de la religión que fueran.

El obispo explica por qué caminar juntos: "Considerando responsablemente que no se puede permanecer insensible, ajeno o indiferente a las diversas situaciones que se presentan como problemáticas en nuestra diócesis de Nezahualcóyotl y que intentan ser resueltas por caminos considerados contarios a nuestros principios desde la luz del Evangelio.

Queremos unirnos como hermanos que habitamos en los distintos lugares , que conforman nuestra diócesis de Nezahualcóyotl y con todos los hombres y mujeres de buena voluntad, profesen la religión que sea, donde todos podamos encontrarnos y reconocernos como hermanos, como iguales, y manifestarnos públicamente que estamos a favor de los valores de la vida, de la paz y de la familia. Esta acción quiere ser generadora de sentido de la vida, de paz y de familia".

¿Para qué hacer esta caminata?, se pregunta. Y responde monseñor Morales: "Para celebrar públicamente, agradecer, proteger, promover los valores de la vida, de la paz y la familia.
Tenemos razones para valorar, proteger, promover y agradecer la vida como un gran regalo de Dios, que hay que aprender también a disfrutar con sentido. Por esto, cuando se está vivo, se hace fiesta y celebramos juntos la vida.

Queremos decir juntos un ¡Sí a la vida! A pesar de todo, y a pesar de la cultura de “muerte”. Sí a la fiesta por la vida, ¡sí a la alegría de vivir! Y un ¡sí a la vida con sentido!
Manifestarnos a favor del derecho fundamental de toda persona humana a la vida".

Así mismo, es una manifestación en favor de la paz: "Es evidente que la sociedad de la que cada uno forma parte necesita ser redimida de la violencia, y de otras formas comunes que dañan a la comunidad, ya que se ha excedido de los límites tolerables y por esto es urgente la organización y a la movilización como parte del pueblo de Dios, como un camino para participar activamente en la construcción de la paz.

Expresar de forma pública nuestra voluntad-derecho de vivir con paz en nuestros hogares y tranquilidad en nuestras calles, y que la paz regrese a nuestra diócesis.

Nuestra manifestación quiere ser propositiva, y no reactiva de frente a nuestra situación particular. Donde se favorezca el dialogo y el respeto a la pluralidad y no se acentúe la confrontación, ni el antagonismo, sino todo aquello que nos hermana.

La paz en un Don de Dios, pero también una tarea, compromiso y responsabilidad de todos.
Necesitamos hombres y mujeres responsables que pongan su granito de arena en el trabajo por la paz, necesitamos políticos, gobernantes que estén dispuestos a entregar su vida en el esfuerzo cotidiano por superar las causas de la violencia.

Juntos hagamos posible expresiones nuevas de paz, con lo que contribuyamos al despertar y formar las conciencias a favor de la construcción de la paz.

Súmate a formar parte de las personas valientes y ayuda a crear una nueva conciencia de paz, de fraternidad, de justicia, de igualdad, de respeto y tolerancia".

Por último es una manifestación en favor de la familia: "Queremos manifestar pública y pacíficamente nuestro apoyo a la Institución familiar, sólidamente constituida sobre la base de la unión matrimonial de un hombre y una mujer, como el camino natural para la procreación. Y como el sustrato necesario para la construcción y sostenimiento de cualquier sociedad que quiera la paz. Los niños tienen derecho a un padre y a una madre. Queremos cuidar y promover los valores de la familia y el matrimonio, especialmente ahora que varias leyes y proyectos de ley minan sus fundamentos, y de frente a las situación de fracturación de la institución familiar, que provoca muchas de las veces una crisis y frustración existencial. Si la familia está mal, la sociedad está mal, siendo así la sociedad de hoy un reflejo fiel de nuestras familias. La familia no es el problema, es la solución".

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Desmienten que una persona acusada de abusos sexuales sea sacerdote
Comunicado del Arzobispado de Granada
GRANADA, domingo 15 julio 2012 (ZENIT.org).- El Arzobispado de Granada ha hecho público este sábado un comunicado desmintiendo informaciones aparecidas en la prensa local. Ofrecemos el texto del comunicado.

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Ante la noticia, aparecida hoy en el periódico “Ideal”, según la cual un muchacho de nacionalidad brasileña hace diversas actuaciones a un clérigo de la diócesis de Granada, entre ellas la de abusos sexuales, el Arzobispado quiere hacer públicas las aclaraciones siguientes:

1. La persona en cuestión no es “cura”, ni tampoco “diácono permanente” en el sentido que este término tiene en la legislación de la Iglesia, es decir, una persona casada que recibe el sacramento del orden en el grado de los diáconos. Fue al parecer ordenado de diácono en la diócesis de Madrid en el año 1971, en orden sin duda a seguir su camino al presbiterado, pero, o bien el arzobispo de Granada creyó que no debía dar el paso o él mismo nunca solicitó las órdenes de presbítero.

2. En este sentido, puede decirse que su situación eclesial es, cuando menos, “irregular”, porque en la Iglesia sólo existe el diaconado como situación transitoria o el “diaconado permanente” en el sentido que se acaba de explicar. Y, de hecho, la Iglesia no le ha confiado desde hace años a esta persona ningún ministerio de los que corresponderían a un clérigo ordenado.

3. La persona en cuestión no había informado para nada a este arzobispado del procedimiento judicial abierto contra él.

4. Al tener noticia de los acontecimientos a los que hace referencia la información del periódico, y de acuerdo con la disciplina de la Iglesia, el diácono en cuestión ha sido inmediatamente suspendido en todo ejercicio de su ministerio, y se le retira también la missio canonica, retirándole con ello toda misión educativa que hubiera podido recibir de la Iglesia o en relación con ella.

5. La disciplina de la Iglesia exige también que, apenas se tengan conocimientos de hechos de esta naturaleza por parte de la autoridad eclesiástica, ésta los ponga en conocimiento de las autoridades judiciales, lo que no ha sido necesario en esta ocasión porque ya un juzgado de Granada está instruyendo el caso.

6. En cuanto a la asociación benéfica fundada por él, es una obra absolutamente privada, y reconocida civilmente, que no ha tenido jamás ningún tipo de aprobación por parte de la Iglesia.

7. Todos los cristianos sentimos dolor por el pecado y el mal, que también crecen dentro de la Iglesia cuando nos apartamos de su tradición, de sus enseñanzas y de su disciplina, y le pedimos insistentemente al Señor que nos libre de caer en él. Junto con las personas de bien, creyentes y no creyentes, ese dolor es más grande siempre que en el pecado hay víctimas, y especialmente si se trata de menores de edad y de inocentes. La Iglesia desea, en esto como en todo, que prevalezcan la verdad y la justicia, y colaborará en lo que sea necesario con las autoridades civiles para erradicar el mal y el escándalo.

Que Dios nos perdone a todos nuestras culpas, y nos ayude a hacer penitencia por ellas y por las de todo el cuerpo de Cristo, que todos hemos de sentir como nuestras, fruto amargo de nuestra propia falta de amor a Dios y los demás. Que Él nos ayude también a encontrar los medios más eficaces para ayudar a las víctimas y para aliviar o curar sus heridas.

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Donde Dios llora


Sudáfrica: "Los preservativos son parte de la arrogancia de la comunidad internacional"
Entrevista al obispo XoleloThaddaeus Kumalo, de Eshowe
ROMA, domingo 15 julio 2012 (ZENIT.org).- Mark Riedemann para "Donde Dios llora" en colaboración con la fundación pontificia internacional Ayuda a la Iglesia Necesitada, entrevistó al obispo XoleloThaddaeus Kumalo de Eshowe, Sudáfrica.

¿Puedes contarnos un poco acerca de Zululand y el pueblo Zulú?

--Mons. Kumalo: Zulu fue fundada por el rey Shaka, que es conocido en todo el mundo como un guerrero que fue capaz de derrotar a un regimiento de soldados ingleses. Los zulúes han tenido sus reyes y jefes y ellos siguen creyendo en su vida tradicional.

¿Cuáles son sus actividades económicas?

--Mons. Kumalo: Como la mayoría de los sudafricanos, trabajan en fábricas en ciudades alejadas como Johannesburgo y Devon, pero los que permanecen en este territorio se ocupan de la agricultura, por ejemplo.

La tierra Zulu ha sido un área de creencias tradicionales africanas y muchos de los zulúes creen en estas. ¿Qué entendemos cuando hablamos de religión tradicional africana?

--Mons. Kumalo: Es la manera de comportarse, su manera de hablar, la forma en que viven sus vidas. El pueblo zulú como la mayoría, si no todos los pueblos africanos, siempre he creído en un Dios. Pero la expresión de su fe ha sido diferente.

Por ejemplo...

--Mons. Kumalo: Los zulúes creen en un Dios y este Dios es muy grande, y es por eso que se llama "Unkulunkulu", que significa, el que es grande; o "Umvelinqangi", que es el que llegó primero. Y, por lo tanto, debe haber algunas personas que puedan hablar a este dios en nuestro favor, y son los antepasados. Y estos antepasados siempre demandan ciertos rituales que deben ser hechos, como es la matanza de una vaca o una cabra para pedirles ciertas, y para que puedan llevar esto a Dios. Cada etapa de la vida se celebra con un ritual en la tradición Zulú. Cuando nace un niño, y cuando se le da un nombre, se ofrece un sacrificio de algo y los ancianos hacen ciertas cosas para introducir al niño a los antepasados.

Si he entendido bien, hay muchas cosas similares a la tradición cristiana, la presentación del niño, la creencia en un Dios; todas estas cosas facilitan la "inculturación". Cuando el cristianismo llegó allí, tal vez los zulúes estaban dispuestos a aceptarlo porque muchas de los tradiciones podrían ser reconocidas en el cristianismo que les presentaban.

--Mons. Kumalo: Por desgracia, cuando llegaron los misioneros no reconocieron todas las creencias tradicionales. En el bautismo y la forma en que el Zulú introduce a un nuevo bebé a los antepasados, la religión cristiana en realidad nunca unió estas dos cosas. Es solo ahora, más tarde, cuando se habla sobre este lenguaje de la inculturación. ¿Cómo podemos usar nuestra cultura para que seamos mejores cristianos, o ser mejores católicos utilizando lo que somos.

Estamos a más de diez años del fin del apartheid. ¿Se puede decir que este sigue siendo un país en busca de su identidad?

--Mons. Kumalo: Creo que, sin duda, todavía está buscando su identidad. Usted sabe que estamos separados en grupos y nos va a llevar años hasta que tengamos una identidad como Sudáfrica. Incluso ahora para la fiesta nacional, difícilmente se encuentran los blancos celebrando junto a los negros. Esto demuestra que tenemos un problema de identidad como sudafricanos, y creo que nos va a llevar mucho tiempo hasta que lleguemos a eso.

El otro desafío es, por supuesto, la cuestión del vih/sida. ¿Cómo está trabajando la iglesia en esta área?

--Mons. Kumalo: En cuanto a la cuestión del Vih/Sida, nosotros copiamos el programa de Uganda llamado "Educación para la Vida", que estamos tratando de difundir en las distintas diócesis. Educamos a los jóvenes a no infectarse de esta enfermedad a través de la educación, a través de los grupos de pares y el cambio de estilo de vida.

El sida se está desarrollando en un 22% y la comunidad internacional ha tratado de presentar una respuesta con la solución del uso del perservativo. ¿No lo perciben esto como un poco de arrogancia y prejuicio de la comunidad internacional, que viene y lo presenta como lo que resolvería el sida en Sudáfrica?

--Mons. Kumalo: Creo que la comunidad internacional es siempre arrogante con nosotros los africanos. Vienen con las soluciones ya hechas. No preguntan. Ellos saben lo que es correcto para nosotros como africanos, y los condones son parte de esa arrogancia. Creo que porque la gente, en sus mentes, cree que los condones previenen la enfermedad. Esto porque lo difunden entre todos los jóvenes, incluso con aquellos que no son conscientes de la actividad sexual, porque se imparte en la escuela como educación sexual. Lo intentan, y es por eso que todavía se tiene un alto índice de personas infectadas con esta epidemia del Sida.

Traducción del inglés por José Antonio Varela V.

Esta entrevista fue realizada por Mark Riedemann para "Dios llora en la Tierra", un programa semanal de radio y televisión producido por la Catholic Radio and Television Network, en conjunto con la fundación pontificia de caridad católica Ayuda a la Iglesia Necesitada.

En la red: www.WhereGodWeeps.org y www.acn-intl.org.

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Entrevistas


Los movimientos eclesiales y las nuevas comunidades aportarán sus carismas en el Año de la Fe
Entrevista a monseñor Miguel Delgado, subsecretario del Consejo Pontificio para los Laicos
Por H. Sergio Mora

ROMA, domingo 15 julio 2012 (ZENIT.org).- Entre los diversos eventos del Año de la Fe, convocado por Benedicto XVI el 18 de mayo estará la vigilia de Pentecostés, dedicada a todos los movimientos antiguos y nuevos. Se hará un peregrinaje a la tumba del apóstol Pedro, se rezará también en la plaza de San Pedro “para pedir a Dios que envíe nuevamente con gran abundancia su Espíritu, de manera que se renueven los prodigios como en los primeros tiempos de la Iglesia naciente”, como indica el programa oficial.

Para entender mejor qué son los nuevos y antiguos movimientos eclesiales y las nuevas comunidades que participarán al Año de la Fe, que se realizará del 11 de octubre de 2012 al 24 de noviembre de 2012, ofrecemos una entrevista que el subsecretario del Consejo Pontificio para los Laicos, el presbítero español Miguel Delgado, concedió a ZENIT, en la que indicó que el contacto del papa con los movimientos será un momento de gran importancia del evento.

Monseñor Delgado explicó algunas particularidades de estos "nuevos y antiguos movimientos" integrados esencialmente por fieles laicos, si bien indicó que “las inspiraciones de Dios son tantas que es difícil encuadrarlas en criterios rígidos”.

¿Qué se entiende por nuevos y antiguos movimientos?

--Mons. Delgado: Nuevos quizás aquellos que nacieron un poco antes del Concilio Vaticano II; como el Movimiento de los Focolares fundado por Chiara Lubich en 1943 y Comunión y Liberación en los años cincuenta con don Luigi Giussani, y los que vinieron después de la conclusión del Concilio, como la Comunidad de San Egidio, nacida en 1968 en Roma por iniciativa del profesor Andrea Riccardi, y muchos otros. Pero también antiguos como las Congregaciones Marianas, que ahora se llaman Comunidad de Vida Cristiana. A esta jornada del 18 de mayo están todos invitados, sin olvidarse de otro evento relacionado: la Jornada Mundial de la Juventud que se realizará en Río de Janeiro en Julio del año próximo.

¿Cuál es la característica de un movimiento eclesial?

--Mons. Delgado: En los movimientos eclesiales y en las nuevas comunidades cada fiel que forma parte asume el empeño de vivir un carisma particular que penetra toda la existencia cristiana, con espacios de formación cristiana y evangelización. En estas realidades eclesiales las personas tienen la posibilidad de encontrar y hacer encontrar Cristo a los demás, o sea son incentivados a volverse apóstoles en los ambientes en los que viven.

¿Todos los católicos tienen que pertenecer a algún movimiento?
--Mons. Delgado: Seguramente no, si bien en la Iglesia existe del derecho de asociación, por lo tanto los fieles son siempre libres de participar a un movimiento eclesial o no.

¿Y los movimientos eclesiales cuándo tienen que ser reconocidos por la autoridad eclesiástica?
--Mons. Delgado: En un cierto grado de desarrollo de un movimiento, el derecho tiene que llegar, no para sofocar, sino para garantizar en el futuro la continuidad de los movimientos eclesiales, así como para un uso ordenado de los carismas en la Iglesia. El Consejo Pontificio para los Laicos se informa siempre con los obispos en donde los movimientos se implantan. Después en cada movimiento tienen que existir los criterios de eclesialidad que están indicados en la exhortación apostólica Christifideles Laici, de Juan Pablo II, así como la adhesión al magisterio, la unión filial con el papa y con los pastores de las Iglesias locales, el descubrimiento de la llamada a la santidad, etc.

¿Cómo se obtiene el reconocimiento y qué pasa con quien no quiere inscribirse?

--Mons. Delgado: La solicitud de un eventual reconocimiento de un movimiento eclesial debe partir siempre del sujeto interesado; por lo tanto es un acto libre de cada unión de fieles. Es un procedimiento que necesita tiempo, no es como ir al registro civil y hacerse poner un sello. Además a nivel de la Santa Sede se pide que el movimiento tenga una presencia internacional.

¿Cómo entender la fidelidad doctrinal que estos movimientos tienen que tener hacia la Iglesia?
--Mons. Delgado: La autoridad eclesiástica tiene que evaluar siempre la adhesión de cada realidad asociativa a los criterios de eclesialidad antes indicados. Criterios fundamentales y que no pueden faltar por ningún motivo.

¿Cómo operan los carismas?

--Mons. Delgado: En las formas más diversas, como en el testimonio personal de la fe, en el servicio a las personas más necesitadas de la sociedad, a través de la música, el arte, etc. No es que todos tengan que hacer lo mismo: en este gran concierto cada uno tiene que operar como es. Pienso en un movimiento que trabaja con los musicales y que reúne y ayuda a tantos jóvenes. Son personas que ayudan a llevar a Cristo a los demás. Pienso por ejemplo en la diócesis de Murcia en España, en dónde hay tantas comunidades del Cammino Neocatecumenal y en donde el nivel de la práctica religiosa aumentó mucho. En Estados Unidos y en todo el continente americano está muy presente la Renovación Carismática católica, como también en África.

¿En qué medida son importantes estos movimientos eclesiales y las nuevas comunidades?

--Mons. Delgado: Diría que se habla más bien poco de los movimientos eclesiales y de las nuevas comunidades respecto a todo lo que hacen. El bien generalmente no hace noticia y es necesario que lo haga.

En el anuario estadístico de la Iglesia no aparecen aún datos relativos a las asociaciones de los fieles.

Los movimientos eclesiales proporcionan mucha información sobre las propias actividades.

¿Cómo distinguir un movimiento laical de uno religioso?
--Mons. Delgado: Es necesario conocer de cerca cada realidad eclesial. El criterio fundamental que caracteriza la vocación propia de los fieles laicos es justamente su relación con el mundo: por ejemplo, un médico que trabaja en un hospital, la madre de familia que tiene que gestionar tantas cosas relacionadas con la vida cotidiana de la familia, la periodista que trabaja en una radio, etc. Es allí donde los laicos tienen que impregnar el mundo con el espíritu cristiano y hacer conocer a Dios a sus familiares, amigos y colegas de trabajo.

¿Cuál es el estado de salud del mundo de hoy desde el punto de vista de la fe?

--Mons. Delgado: Mejor de lo que parece, incluso si la situación no es fácil. Por esto el papa ha convocado el año de la Fe y está hablando continuamente sobre el tema de Dios. Según mi opinión hay más luces que sombras. Por naturaleza no soy catastrofista. Además, Jesús nos aseguró que está con nosotros hasta el final del mundo, pero no nos dijo 'sin dificultades'. La Iglesia es la presencia continua de Cristo en la historia y es el Señor que sostiene la navegación de esta barca desde hace más de dos mil años.

¿Cuál es su sitio web?

--Mons. Delgado: Es www.laici.va

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Foro


¿Por qué en Brasil los católicos diminuyen?
Análisis de las causas de este fenómeno
ROMA, domingo 15 julio 2012 (ZENIT.org).- Ofrecemos un artículo del padre Piero Gheddo, sacerdote italiano del Pontificio Instituto de Misiones Extranjeras (PIME), experto en temas misioneros. En el artículo analiza las causas de la disminución de católicos en Brasil.

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Por Piero Gheddo
El 29 de junio de 2012, un comunicado del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IGBE) suscitó un amplio eco en la prensa brasileña e internacional. Según el censo de 2010, el porcentaje de católicos sobre los 190 millones de brasileños es hoy del 64,6% (123 millones). En el primer censo barsileño de 1872 los católicos eran 99,7%, en 1972 el 91,8%, en 2000 el 73,6% y en 2010 el 64,6%. Brasil corre el riesgo de dejar, dentro de no muchos años, la palma de "primer país católico del mundo" a México, que tiene 112 millones de habitantes, el 88% de los cuales, en el censo de 2010, se declaran católicos.

Los católicos que dejan la Iglesia siguen a las Iglesias históricas protestantes o las varias denominaciones evangélicas, que en 1980 eran el 6,6% de los brasileños, en 1991 el 9,0%, en 2000 el 15,4% y en 2010 el 22,2%, con un total de 42,6 millones de creyentes. En el mundo "evangélico" brasileño las denominaciones "pentecostales" atraen a la mayoría de los fieles, cerca de 25 millones, y están en fuerte ascenso. Aumenta también el número de los ateos, agnósticos y personas sin una religión definida, pasado del 4,7% al 8%, con un total de cerca de 15 millones de personas. Entre estos la gran mayoría se declara sin una religión específica, mientras que los ateos son 615.096 y los agnósticos 124.436. En descenso en cambio los brasileños que se declaran seguidores de la religión "espiritista", mientras que sólo el 0,3% se adhieren a la religión de origen africano como el candomblé o umbanda.

Brasil tiene las dimensiones de un continente, su extensión es 27 veces la de Italia y es el único país del Sudamérica que no ha conocido guerras ni guerrillas y menos dictaduras feroces como todos los otros países. Además es la única potencia económica de América Latina ya catalogada entre los cuatro Grandes de lo que una vez era el "tercer mundo": los BICS: Brasil, India, Sudáfrica y China. Inevitable que haya registrado inmigraciones en masa de los países fronterizos y menos afirtunados, que, junto a otras categorías de pueblo pobre, caracterizan la vida brasileña con una continua migración interna.

La Iglesia católica no puede asistir religiosamente a estas poblaciones, aunque tiene una poderosa articulación en el territorio. Brasil tenía una treintena de diócesis al inicio de 1900, 152 en 1960 y hoy superan con mucho las 300. La inmensa Amazonia brasileña (14 veces Italia) en 1900 tenía dos diócesis (Belem y Manaos), hoy son cerca de cuarenta. Pero las personas consagradas (sacerdotes, hermanos y religiosas) no se han multiplicado en la misma medida, a pesar de la fuerte ayuda dada por los misioneros y los sacerdotes y religiosas extranjeros (hoy en rápida disminución).

La última vez que estuve en Manaos en 1997, el italiano padre Piero Vignola del PIME, que en los años setenta había fundado la primera parroquia en la periferia de la capital amazónica (Cidade Nova), me decía: "En Manaos hay un flujo ininterrumpido de inmigrantes de todas partes de Brasil y de los estados vecinos, viven en barracas, buscan trabajo y tienen necesidad de un consuleo religioso. El territorio de mi parroquia (San Benito) tenía unos ocho mil habitantes cuando nació conmigo en 1973, hoy tiene cerca de 90.000, han nacido otras dos parroquias, pero nosotros los sacerdotes somos en total solo cinco. Pero en estos 24 años he visto nacer 4-5 sectas protestantes, que luego han hecho escuela y se han multiplicado por su cuenta con elementos brasileños. la confusión de las voces es enorme. Nuestra gente es toda católica, si están cercanos a la parroquia vienen, si no siguen a otros predicadores o charlatanes.

En el último medio siglo, Brasil ha sido literalmente invadido por las Iglesias y sectas de origen protestantes. El cristianismo pentecostal-carismático, como se experimenta también en Asia y África, es el que más atrae también en América Latina. Para la "nueva evangelización" es un desafío a la Iglesia católica y a las Iglesias históricas protestantes. Muchos se preguntan sobre esta rápida difusión de un movimiento que se inspira y se identifica con Pentecostés y muchos, justamente, también los critican. Recuerdo cuando en los años 60, 70 y 80 se escribían artículos (he escrito tambiñen yo muchos) titulados "Aprendamos de las jóvenes Iglesias", pero nadie podía imaginar este reto que viene del Sur del mundo. El Espíritu Santo ayude a la Iglesia a discernir las vías para volver a llevar a Cristo a poblaciones ya bautizadas y anunciar a Cristo a los no cristianos. El movimiento carismático-pentecostal puede de algún modo (¿pero cuál?) ayudar a una recuperación del factor religioso en las sociedades cristianas y no cristianas.

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Iglesia profética y colaboradora
Para la construcción de una sociedad justa y fraterna
SAN CRISTÓBAL DE LAS CASAS, domingo 15 julio 2012 (ZENIT.org).- Ofrecemos el artículo de nuestro colaborador habitual monseñor Felipe Arizmendi Esquivel, obispo de San Cristóbal de las Casas, México, en el que aborda la misión profética y evangelizadora de la Iglesia.

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+ Felipe Arizmendi Esquivel

HECHOS

La Iglesia Católica se esfuerza por cumplir su misión evangelizadora y profética cuando hay regímenes contrarios a la fe, y también colaborar con autoridades más afines y abiertas. No han faltado tiempos en que el poder secular y la institución eclesial parecieran estar casadas, y una servirse de la otra para sus propios fines.

Después de las elecciones que hubo en nuestro país, muchos sólo piensan cómo acomodarse con los elegidos, qué ventajas podrán alcanzar, o qué riesgos pueden correr. Los obispos no estamos exentos de estos planteamientos, pero nuestra decisión no puede depender de cálculos oscuros e interesados, de ventajas personales o institucionales, sino de analizar cómo ser una Iglesia profética, que anuncia el misterio de Cristo y denuncia lo contrario al Reino de Dios, y también una Iglesia dispuesta a colaborar en la construcción de una sociedad justa y fraterna. Lo decisivo es mantenerse fieles al proyecto de Jesús, que es buscar la gloria de Dios, que se manifiesta también en la vida digna del pueblo.

CRITERIOS

Anunciar el amor del Padre, centrado en Jesús, y presente hoy por el Espíritu, es una tarea que debemos hacer en todo tiempo y lugar, aunque no hubiera las libertades mínimas. Es la misión que nos da identidad. Sin Cristo en el centro de nuestras vidas y de nuestro ministerio, no seríamos su Iglesia. Nuestra tarea fundamental es anunciar a Jesucristo. Este anuncio no puede ser desencarnado, etéreo, vago, sin incidencia en la realidad. Jesús siempre se preocupó por lo que vive y sufre el pueblo.

El profeta Amós decía: “Escuchen esto, los que buscan al pobre sólo para arruinarlo. Disminuyen las medidas; alteran las balanzas, obligan a los pobres a venderse; por un par de sandalias los compran y hasta venden el salvado como trigo. Convertiré en duelo las fiestas de ustedes” (Am 8,4-6.10). En sintonía con esta denuncia profética, considero inmoral que, en las pasadas elecciones, algunos se hayan dedicado a comprar el voto de los pobres, aprovechando su indigencia, o hayan hecho trampas para cambiar los resultados. Es indigno que se regale dinero, que se obsequien comales, láminas, camisetas, gorras, refrescos, cubetas, o que se rifen muebles e inmuebles, con tal de convencer a los ciudadanos de votar por una persona. Reprobamos el abusivo poder del dinero, para tratar de influir en la decisión de los electores. Es vergonzoso que se sigan dispendiando tantos recursos en publicidad, por parte de todos los partidos. Es un dinero que ahora se convierte en basura, mucha ni siquiera reciclable.

Sin embargo, estamos dispuestos a colaborar, desde nuestra identidad y competencia, para construir, entre todos, una patria mejor. Así lo decía el papa Benedicto XVI a los obispos de Papúa y Nueva Guinea: “Otra parte importante de vuestro ministerio pastoral la ejercéis cuando habláis públicamente como voz moral objetiva en nombre de los necesitados. Cuando la Iglesia manifiesta su preocupación en el ámbito público, lo hace legítimamente y con el fin de contribuir al bien común, no proponiendo soluciones políticas concretas, sino más bien ayudando a purificar e iluminar la aplicación de la razón al descubrimiento de principios morales objetivos. Teniendo esto en cuenta, os aliento a seguir dialogando y colaborando con las autoridades civiles, para que la Iglesia pueda ser libre de hablar y proporcionar servicios para el bien común de modo plenamente conforme con los valores evangélicos” (9-VI-2012).

PROPUESTAS

Quienes formamos la Iglesia de Jesús (laicos, consagrados, jerarquía), tendamos puentes de comunicación con las autoridades civiles, no para hacer tratos convenencieros, ni para buscar privilegios, sino para ofrecerles información sobre las necesidades reales de nuestros pueblos, pues muchas veces no las conocen de cerca, o sus colaboradores no les presentan la realidad de las cosas. Pedirles que tomen en cuenta lo que los pobres requieren y los consulten antes de tomar decisiones que les afecten. Ser profetas que no sólo denuncian, sino que también proponen caminos de vida.

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Documentación


'Toda la historia tiene como centro a Cristo'
Palabras de Benedicto XVI en el Ángelus
CASTEL GANDOLFO, domingo 15 julio 2012 (ZENIT.org).- A la vuelta de Frascati, donde esta mañana se trasladó en visita pastoral, a las 12 horas, Benedicto XVI se asomó al balcón del patio del Palacio Apostólico de Castel Gandolfo y recitó el Ángelus junto a los fieles y a los peregrinos presentes. Ofrecemos las palabras del papa al introducir la oración mariana.

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¡Queridos hermanos y hermanas!

En el calendario litúrgico, el 15 de julio es la memoria de san Buenaventura de Bagnoregio, franciscano, doctor de la Iglesia y sucesor de san Francisco de Asís en el gobierno de la Orden de los Frailes Menores. Él escribió la primera biografía oficial de Francisco, y al final de su vida fue también obispo de esta diócesis de Albano. En una de sus cartas, Buenaventura escribe: "Confieso ante Dios que la razón que me hizo amar más la vida del beato Francisco es que es similar al origen y al crecimiento de la Iglesia" (Epistula de tribus quaestionibus, en Opere di San Buenaventura. Introduzione generale, Roma 1990, p. 29). Estas palabras nos dirigen directamente al evangelio de este domingo, que presenta el primer envío en misión de los Doce Apóstoles de parte de Jesús. “Jesús llamó a los Doce --narra san Marcos-- y comenzó a enviarlos de dos en dos... Y les ordenó que nada tomasen para el camino, fuera de un bastón: ni pan, ni alforja, ni dinero en el cinturón: sino calzados con sandalias y que no vistan dos túnicas" (Mc 6,7-9 ).

Francisco de Asís, después de su conversión, practicó a la letra este Evangelio, convirtiéndose en un fiel testigo de Jesús; y asociado de un modo especial al misterio de la Cruz, fue transformado en un "otro Cristo", como san Buenaventura lo presenta. Toda la vida de san Buenaventura, así como su teología, tiene como centro de inspiración a Jesucristo. Esta centralidad de Cristo la encontramos en la segunda lectura en la Misa de hoy (Ef.1,3-14), el famoso himno de la Carta de Pablo a los Efesios, que comienza así: "Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos ha bendecido con toda clase de bendiciones espirituales, en los cielos, en Cristo". El Apóstol muestra cómo se ha realizado este designio de bendición, en cuatro etapas que comienzan todos con la misma expresión "en Él", refiriéndose a Jesucristo. "En él", el Padre nos ha elegido antes de la fundación del mundo; "en Él" tenemos la redención por su sangre; "en Él" nos hemos convertido en herederos, predestinados a ser "alabanza de su gloria"; "en Él", cuantos creen en el Evangelio fueron sellados con el Espíritu Santo.

Este himno paulino contiene el punto de vista de la historia que san Buenaventura ha contribuido a difundir en la Iglesia: toda la historia tiene como centro a Cristo, el cual garantiza también novedad y renovación a cada época. En Jesús, Dios ha hablado y ha dado todo, y ya que Él es un tesoro inagotable, el Espíritu Santo no deja nunca de revelar y actualizar su misterio. Por lo tanto, la obra de Cristo y de la Iglesia no vuelve hacia atrás nunca, sino que avanza siempre.

Queridos amigos, invoquemos a María Santísima, a quien mañana celebraremos como la Virgen del Monte Carmelo, para que nos ayude, como san Francisco y san Buenaventura, para responder generosamente al llamado del Señor, para proclamar su Evangelio de salvación con la palabra y sobre todo con la vida.

Traducción de original italiano por José Antonio Varela V.

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