En la crítica situación económica que vivimos, buscamos soluciones en todos los espacios posibles: administración pública, mercados internacionales, justicia distributiva… Jesucristo nos ha dado la clave de todas las relaciones humanas: el amor, la solidaridad, compartir entre todos los bienes que Dios nos ha dado.
Este precepto es el que, hasta el momento, han llevado a cabo 50 sacerdotes y 6 comunidades religiosas de la diócesis de Ávila, quienes, siguiendo la llamada que realizó el Obispo monseñor Jesús García Burillo con motivo de la festividad del Corpus Christi, han renunciado expresamente a su paga extraordinaria de verano a favor de Cáritas diocesana. También el Pastor abulense ha hecho lo propio. Un generoso gesto que alcanza la cifra, por el momento, de 37.000 euros, que irán destinados a paliar el sufrimiento de los afectados por la crisis económica.
No obstante, son datos no definitivos. Estos son los números de los que hasta ahora se tiene constancia. A ellos, hay que sumar la cifra de sacerdotes, religiosos y particulares que han hecho esta misma donación de la paga extra, pero de una forma anónima y privada a través de las distintas Cáritas parroquiales.
Asimismo, a este gesto hay que sumar las donaciones realizadas en su día por la empresa de productos cárnicos Carhesan, así como por el Sindicato de Médicos de Ávila.
Desde el Obispado de Ávila, se quiere seguir animando a los abulenses a realizar este acto solidario para poder seguir prestando esa ayuda tan necesaria a aquellos convecinos que tan mal lo están pasando, y que acuden diariamente a los servicios de Cáritas para seguir subsistiendo.