28.07.12

 

El pasado 10 de julio fue hallado en el distrito de São Domingos, en Brejo da Madre de Deus (Pernambuco, Brasil), el cuerpo de un niño de 9 años que llevaba desaparecido desde el día 1. Flanio da Silva Macedo, que así se llamaba, fue encontrado decapitado, con las manos y los pies atados, y con señales de haber sufrido abusos sexuales, según relataba el mismo día del hallazgo el Jornal do Commercio.

Según la familia, el niño había salido de casa para cargar, en São Domingos, el viernes anterior, y nunca regresó. Los parientes acudieron a la policía y ésta recibió información de que el muchacho había sido visto empujando el carrito en la zona rural de Brejo, donde después fue localizado el cuerpo. “Yo estaba en casa y una mujer vino a mí diciendo que habían encontrado un cuerpo. Fui allí y confirmé que era él”, dijo Laudemira Ribeiro da Silva, de 25 años, tía de la víctima y también residente en São Domingos.

El niño fue encontrado ya en estado de descomposición y sin ropa, con la evidencia de haber sufrido violencia sexual. La Policía Científica se encontraba en el lugar y el cuerpo fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de Caruaru, en la misma región. Según el diario Globo, en la información publicada al día siguiente del hallazgo, el niño podría haber sido víctima de un ritual.

El delegado Antônio Dutra, responsable de la investigación policial, afirmó que en el local donde fue encontrado el cuerpo había diversos objetos que indicaban la realización de algún tipo de ceremonia macabra. La cabeza estaba a un metro del resto del cuerpo, sin los dientes y totalmente desfigurada. “Era una escena dantesca, de una violencia desmesurada. No había visto nada igual”, relató Dutra.

En el local, según el delegado, “había amuletos, muñecos de vudú, recipientes de bebidas alcohólicas, un ramo de flores, piedras e incluso huesos no identificados. En un área de 10 metros, había varios objetos extraños”.

Según relata el Jornal do Commercio, al día siguiente del hallazgo la policía ya dijo que cinco personas cometieron el crimen. La pareja formada por Genival Rafael da Costa, de 62 años, y Edleuza María da Silva, de 51 años, confesó el crimen y fue arrestada. También fueron arrestados enseguida Ednaldo Feria dos Santos, de 33 años, y Edilson Silva da Costa, de 31 años. La policía busca a un “pai de santo”, señalado por la pareja como persona involucrada.

Según las investigaciones, Flanio sufrió violencia sexual durante unos 20 minutos antes de morir. En el ritual, le presionaron el cuello con una pinza de madera hasta que la cabeza fue separada del cuerpo. De acuerdo con el oficial a cargo, la pareja agresora, que también vivía en São Domingos, tenía miedo de ser descubiertos y linchados por la población, y se entregaron en la estación de policía del distrito. “Ellos dijeron que habían recibido 400 reales del pai de santo para atrapar al niño y participar en el ritual. Antes de matar al niño, Genival y el pai de santo realizaron los actos de abuso sexual”, detalló Antônio Dutra. Según él, los otros dos hombres siguieron el crimen ritual, pero no participaron en el abuso.

De acuerdo con el investigador del Instituto Nacional de Ciencia y Tecnología de la Inclusión(INCTI) de la Universidad de Brasilia, Alexandre L’omi L’odò, el ritual no se puede enmarcar en el campo de las religiones de origen africano. “No conozco dentro de las religiones de matices africanos e indígenas ningún ritual que incluya el sacrificio humano. Dentro de mi campo de estudio, nunca he oído hablar del ritual de retorno”.