Los Obispos de la Provincia Eclesiástica de Oviedo se solidarizan con las personas que sufren los efectos de la crisis económica


 

Durante la reunión mantenida el domingo 2 de septiembre en el santuario de Covadonga, los Obispos de la Provincia Eclesiástica de Oviedo, que integran las diócesis de Oviedo, Astorga, León y Santander, expresaron su preocupación por los efectos que la crisis económica está teniendo entre distintos sectores de la población de sus respectivas diócesis.

Durante su encuentro, los prelados reiteraron especialmente su solidaridad cristiana con las personas que han perdido el empleo y con aquellos que todavía no han tenido la oportunidad de encontrar por primer vez un puesto de trabajo.

Los Obispos recordaron algunas reflexiones contenidas en el documento “Ante la crisis moral y económica”, de la Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal de 27 de noviembre de 2009, en el que se enumeran los sectores más afectados por la crisis (parados, familias, jóvenes, inmigrantes, pequeños y medianos empresarios…) y en el que se pone de manifiesto que “la raíz de nuestros problemas no está sólo, ni principalmente, en las dificultades económicas”, sino “en haber prescindido de los valores morales y del significado trascendente de la vida, creyendo que puede conseguirse un verdadero desarrollo sin Dios”.

Los Obispos hacen un llamamiento a sus respectivas comunidades diocesanas para aliviar los efectos de la miseria que se abate sobre tantas personas y sectores de la sociedad, al objeto de “promover actitudes cristianas en las que compartir con las victimas más afectadas por la crisis, se hace particularmente necesario en esta coyuntura”.

A la reunión, presidida por el Arzobispo Metropolitano, monseñor Jesús Sanz Montes, asistieron los Obispos de Astorga, monseñor Camilo Lorenzo Iglesias; León, monseñor Julián López Martín y Santander, monseñor Vicente Jiménez Zamora, que posteriormente participaron en los actos litúrgicos de la novena a la Santina.