Tras el estreno en 13tv de la temporada de Misioneros por el Mundo en Manila, las cámaras del programa presentarán este viernes a las 22:00 horas un recorrido por el Caribe. Los reporteros han viajado a la República Dominicana, Cuba y Haití para descubrir el testimonio de cuatro misioneros que han descubierto en estos países cómo sus habitantes sonríen siempre frente a la adversidad. Pobreza, narcotráfico, acceso a la educación, prostitución… son algunos de los problemas a los que se enfrentan nuestros misioneros.
La Ciénaga, entre el barro y la pólvora
Desde las ventanas de sus hoteles de lujo, los turistas contemplan asombrados el paisaje del Caribe Dominicano. Sin embargo, más allá de las playas de ensueño, existe una realidad diferente marcada por la pobreza, las dificultades para acceder al agua potable y la presencia de un paraíso también para los narcotraficantes.
La Ciénaga es uno de los barrios más peligrosos de Santo Domingo en el que trabaja la hermana Isabel Pomares. Misioneros por el Mundo recorre con esta Jesuita sus calles y nos descubre cómo en este lugar los niños juegan con pistolas.
Pese a las frecuentes inundaciones que deterioran el barrio, sus vecinos se resisten a abandonar sus hogares por miedo a que otras personas se los arrebaten. Esta enorme resistencia, en ocasiones, se cobra la vida de los propios vecinos.
Ayuda a la mujer
Cuba también es otra joya turística caribeña. Sin embargo, este pequeño paraíso esconde una cara oculta. A la falta de libertades se une un nivel de pobreza que obliga a sus habitantes a buscar otros recursos para ganarse la vida.
Las Hermanas Teresianas trabajan por el desarrollo de la mujer y evitar que se vea obligada a dedicar su vida a la prostitución. Una de ellas es Teresa Redó, quien durante las dos décadas que lleva en La Habana busca ayudar a cientos de mujeres a salir adelante y educar a sus hijos.
Al mismo tiempo, ella y sus compañeras de congregación ofrecen refugio a las personas sin recursos, un hogar temporal que en ocasiones se convierte en su cobijo durante más de diez años.
Con la hermana Teresa recorremos La Habana Vieja y llegamos a su Catedral, un símbolo de la libertad religiosa que ha comenzado a cobrar vida en los últimos años en la isla gracias a las visitas de Juan Pablo II y Benedicto XVI.
Haití: las réplicas del terremoto
Haití sufre todavía las réplicas del seísmo incluso dos años después del terremoto. No porque tiemble de nuevo la tierra, sino porque su pueblo lucha por su reconstrucción.
Agustín y Paloma son un matrimonio de misioneros con los que visitaremos un campo de desplazados en el que siguen viviendo personas rodeados de escombros y suciedad. Allí deben superar cada día la carencia de alimentos, la falta de agua potable y la insalubridad del terreno.