25.09.12

Argentina también quiere ver al Papa

A las 11:08 AM, por Andrés Beltramo
Categorías : Iglesia en América
Del Vatican Insider (ITA)

Argentina también quiere recibir a Benedicto XVI. No se trata de una iniciativa oficial, sino espontánea, en uno de los países más secularizados de Sudamérica. Un grupo de fieles “autoconvocados” lanzó una recopilación de firmas para solicitar al Papa que visite su país en julio de 2013, antes o después de su estancia en Río de Janeiro (Brasil) para la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ). Una iniciativa que ya se sumó a intereses similares suscitados en Colombia, Panamá, Chile y Paraguay.

Se sabe, en América Latina vive más del 45 por ciento de la población católica mundial. Si el sucesor de Pedro va a esa región, todos los países querrán recibirlo. Incluso aquellos donde la relación entre la Iglesia y el Estado no es de las mejores, a causa de sus gobiernos.

Argentina vive tiempos difíciles, en materia política pero también eclesiástica. En este contexto un grupo de feligreses lanzó la campaña “Benedicto, Argentina te espera”. Sin muchos recursos ni apoyos institucionales y con buena voluntad, sus miembros pusieron en línea el blog Generación Benedicto XVI y una página en la red social Facebook. Todo surgió de padres de familia que preparaban los viajes de sus hijos a Brasil.

El más imponente encuentro de jóvenes católicos del mundo volverá a Sudamérica después de 26 años. Los días 11 y 12 de abril de 1987 tuvo lugar en Buenos Aires la segunda JMJ, ideada por el beato Juan Pablo II. Se trató de la primera experiencia fuera de Roma y por ello todavía no contaba con las características de la Jornada actual.

El próximo evento de Río, previsto del 23 al 28 de julio de 2013, tendrá un eco continental. Por eso varios gobiernos y episcopados de la región han puesto en práctica estrategias para lograr que Joseph Ratzinger haga una parada en otro país latinoamericano en torno a esa cita. Y aunque en El Vaticano existen colaboradores del Papa interesados en concretar alguna de estas opciones, el mismo Papa es prudente y ha demostrado propensión a realizar sólo la etapa brasileña, si la salud se lo permite.

De todas maneras los interesados insisten, como Chile que se ha movilizado con particular intensidad en las últimas semanas con la esperanza de lograr una visita apostólica. Algo prácticamente imposible si se considera la distancia geográfica entre Río y Santiago.

En el caso de los argentinos, comunicaron su iniciativa ante la Conferencia Episcopal y la nunciatura apostólica en Buenos Aires. De la cúpula de obispos no recibieron respuesta, mientras de la embajada vaticana obtuvieron un “caluroso” apoyo. Además, varios sacerdotes y escuelas se sumaron a la recogida de firmas. La idea es lograr que Benedicto XVI visite el santuario nacional de la Virgen en Luján.

En declaraciones al Vatican Insider uno de los organizadores de la iniciativa, Carlos Colazo Benavidez, precisó: “La patria vive momento difíciles, la familia atacada ya vida humana despreciada, un intento muy fuerte por unificar los códigos Civil y Comercial, abriendo la puerta a todo tipo de aberraciones: aborto, adopción por parte de parejas homosexuales, manipulación de embriones, alquiler de vientres. La visita del Papa al santuario nacional es vista como la posibilidad de fortalecer la fe de los argentinos y de iluminar y mostrarle al pueblo lo que está sucediendo, desde la óptica del evangelio”.