Gran revuelo en la opinión pública germana

Los obispos alemanes acuden a la justicia para no ser acusados de censurar a Pfeiffer

 

La Conferencia Episcopal Alemania anunció ayer que recurrirá a la justicia para impedir que se la acuse de tratar de censurar el estudio elaborado por expertos en criminología sobre los casos de pederastia en instituciones católicas. La Iglesia católica reaccionó así a las declaraciones en medios de todo el país del director del Instituto de Crimonología de Baja Sajonia, Christian Pfeiffer, quien aseguró que el estamento eclesiástico trata de impedir la difusión de sus conclusiones.

11/01/13 8:47 AM


(Efe) Pfeiffer recibió en 2010 el encargo de la Conferencia Episcopal de esclarecer los casos de abusos sexuales a menores revelados en prácticamente todas las diócesis alemanes durante décadas.

La Iglesia se comprometió así a llegar al fondo de la cuestión, para lo que puso al frente de la investigación al equipo de expertos independientes de Pfeiffer.

El pasado martes, sin embargo, la propia Conferencia dio por cancelado el acuerdo, al tiempo que anunciaba que el trabajo sería delegado en otro equipo.

La Iglesia reaccionó así a las acusaciones lanzadas el día anterior por el propio Pfeiffer al diario muniqués "Süddeutsche Zeitung", a lo que siguieron otras intervenciones en la televisión pública hablando de intentos de censurar su trabajo.

Fuentes de la Conferencia Episcopal rechazaron estas acusaciones y aseguraron que no se pretendía ocultar las conclusiones de los trabajos, sino preservar la divulgación de datos personales, lo que afecta tanto a víctimas como a presuntos abusadores.

El equipo de Pfeiffer ha sustentado su trabajo en actas recabadas desde 1945 y conservadas en archivos eclesiásticos de diversas diócesis e instituciones católicas.

Ello les permitió el acceso a datos y material almacenados en los archivos eclesiásticos, lo que desde el principio topó con las protestas de algunas diócesis.

La cancelación del contrato por parte de la Conferencia, entre acusaciones de censura, ha causado gran revuelo en Alemania. La ministra de Justicia, Sabine Leutheussen-Schnarrenberger, defendió la profesionalidad de Pfeiffer.