Su misión, maestro de la Fe y doctor de la Verdad, «no debe estar sujeta a las efímeras modas culturales»

Mons. Xavier Salinas toma posesión como nuevo obispo de Mallorca

 

Mons. Xavier Salinas Viñals ha tomado posesión como obispo de Mallorca en una ceremonia solemne celebrada ayer en la Catedral, que contó con la participación de obispos, cardenales y numerosos sacerdotes y a la que asistieron unos 4.000 fieles y las principales autoridades de Baleares. Mons. Salinas ha recibido el báculo de manos del Nuncio de la Santa Sede en España, Mons. Renzo Frattini.

13/01/13 12:20 PM


(Agencias/InfoCatólica) El sonido de la campana mayor, Eloi, ha marcado la llegada del nuevo obispo a la Catedral de Mallorca, que ha llegado caminando desde el Palacio Episcopal acompañado por el Nuncio Renzo Frattini; el arzobispo metropolitano de Valencia, Carlos Osoro, los cardenales de Barcelona, Lluis Martínez y Ricard Maria Carles (emérito) la comunidad diocesana y varios familiares.

El administrador diocesano, Lluc Riera y el canónigo decano del capítulo de la Catedral de Mallorca, Joan Bauzà, han recibido a las autoridades en el portal mayor de la Catedral y después al obispable que llegaba con su séquito. Al entrar en la Catedral, el nuncio apostólico Frattini ha presentado el nuevo obispo al Deán de la Catedral, Joan Bauzà, y al resto de los canónigos de la Seo. 

Posteriormente, Bauzà, presentando la Veracruz a la veneración del nuevo obispo, le ha ofrecido el hisopo con agua bendita, con el que el prelado se ha asperjado a si mismo y a los presentes. Con una procesión de entrada presidida por el nuncio apostólico ha comenzado la ceremonia. 

Antes de entrar al templo, le han saludado el presidente del Govern, José Ramón Bauzá; la presidenta del Parlament, Margalida Durán; el alcalde de Palma, Mateo Isern; la delegada del Gobierno, Teresa Palmer; el comandante general de Baleares, Adolfo Orozco; y la presidenta del Consell de Mallorca, Maria Salom.

Palabras del Nuncio

Mons. Frattini ha agradecido entonces la labor del antecesor de Salinas, Mons. Jesús Murgui, así como del administrador, Lluc Riera durante el período de interinidad. Ha alertado de que “se ha verificado una pérdida importante del sentido de lo sagrado” razón por la que el papa Benedicto XVI, en la bula del nombramiento del nuevo obispo “le anima vivamente en la tarea evangelizadora, exhortándole a alimentar a los fieles para que crezcan firmes en la fe”. “Todos esperan su cercanía espiritual”, ha afirmado, y le ha pedido “particularísima atención” a las nuevas vocaciones y al cuidado de las familias cristianas que ha calificado como “iglesia doméstica”.

Después Mons. Frattini ha pedido que se presentaran al colegio de consultores las letras Apostólicas, con las que el Papa Benedicto XVI ha nombrado al obispo de Mallorca. Tras la lectura de las letras, el nuncio apostólico ha invitado a Mons. Xavier Salinas a sentarse en la cátedra episcopal y le ha ofrecido el báculo. Con ese gesto, el nuncio apostólico le ha cedido a Salinas la cátedra, la Seo, desde donde presidirá las celebraciones a partir de ese momento y ha sido proclamado obispo.

El presidente del cabildo catedralicio y el hasta hoy administrador diocesano le han dado la bienvenida al cargo en nombre de toda la iglesia de Mallorca. Después, el colegio de consultores, los miembros del Cabildo de la Catedral, y algunos religiosos, religiosas y seglares en representación del pueblo, han saludado también al nuevo obispo y le han prometido respeto, fidelidad y obediencia.

Homilía de Mons. Salinas

En su primera homilía, Mons. Salinas ha anunciado que su labor estará guiada por la misión primordial de ser pregonero del Evangelio “con respeto y temor pero con gran constancia y libertad de espíritu”. Ha declarado que anunciar el Evangelio “no es proferir un bello discurso” sino “acercarse a todos y reconocer, especialmente en las personas que sufren, la presencia. 

Mons. Salinas ha saludado a las instituciones presentes, “especialmente”, a las que tienen “responsabilidades de gobierno” en Mallorca. En este sentido, ha afirmado que la comunidad cristiana “orará siempre” por ellos y “ofrecerá su colaboración desde la libertad y la verdad para el bien común del pueblo”. Además, también ha saludado a los fieles laicos que están “en el corazón mismo” de las “realidades humanas”, “especialmente en la familia, fundada en el matrimonio entre un hombre y una mujer, ámbito donde la persona puede nacer con dignidad, crecer y desarrollarse de una manera integral”. 

El nuevo obispo ha hecho hincapié en que la diócesis de Mallorca se encuentra “marcada por grandes cambios sociales y culturales, que presenta retos y desafíos múltiples ante los cuales urge reavivar el impulso de los orígenes, dejándonos impregnar por el ardor de la predicación apostólica tras Pentecostés”. 

Acerca de su ministerio episcopal, ha afirmado que es “ser pregonero del Evangelio, ‘magister fidei et doctor veritatis’ porque el mundo tienen la necesidad de que le hablen de Dios” y ha añadido que esta misión “no debe estar sujeta a las efímeras modas culturales”. En este sentido, ha incidido en que ésta “debe estar impulsada por la libertad que sólo da la certeza de pertenecer a Dios” por lo que corresponde llevarla a cabo “con respeto y temor” pero también con “gran constancia y libertad de espíritu”. 

Asimismo, ha confiado su “ser” y su “ministerio” a la intercesión de María, que “a partir de hoy” invocará con otro “título entrañable”: Mare de Déu de Lluc, de la cual ha dicho que en “la familia”, aprendió a “confiar en ella” y que “en cada una de las comunidades cristianas en que ha servido, su devoción en la Virgen ha crecido”. 

Vida de Mons. Salinas

Mons. Xavier Salinas nació en Valencia el 23 de enero de 1948 y cursó estudios eclesiásticos en el Seminario valenciano, recibiendo la ordenación sacerdotal el 23 de junio de 1974. Es Doctor en Catequesis por la Pontificia Universidad Salesiana de Roma (1979-1982). 

Su ministerio sacerdotal lo desarrolló en la Archidiócesis de Valencia. Su primer destino fue la Parroquia de San Jaime, en Moncada, de la que fue Coadjutor de 1974 a 1976. Este último año fue nombrado formador del Seminario Menor de Valencia, cargo que desempeñó hasta 1977, cuando fue nombrado, por un año, Consiliario diocesano del Movimiento Junior de Acción Católica. 

Tras su estancia en Roma, volvió a Valencia como Delegado Episcopal de Catequesis (1982-1992), Capellán y Director Espiritual en el Colegio Seminario Corpus Christi (1987-1992) y Vicario Episcopal (1990-1992). 

Asimismo, fue nombrado Obispo de Ibiza el 26 de mayo de 1992, de modo que recibió la ordenación episcopal el 6 de septiembre del mismo año. Posteriormente, el 5 de septiembre de 1997 fue trasladado a la sede Tortosa, al tiempo que fue Administrador Apostólico de la diócesis de Lleida de 2007 a 2008.

En la Conferencia Episcopal Española, es presidente de la Subcomisión Episcopal de Catequesis desde 1999, mientras que el pasado 23 de octubre, la Santa Sede le nombró miembro del Consejo Internacional para la Catequesis (COINCAT), organismo consultivo vinculado a la Congregación para el Clero.