Católicos
23 de enero del 2013

Tarragona trabaja en una nueva ordenanza para endurecer la concesión de licencias a los centros religiosos. El texto definitivo entrará en vigor entre marzo y abril

El Ayuntamiento de Tarragona ha cambiado de dirección en pocas semanas. Según informaba hace unos días Religión Confidencial, el consistorio pretendía 'desterrar' los lugares de culto a polígonos industriales.  Ahora la administración pública en esa misma línea de reubicar los templos religiosos fuera de la trama urbana tiene la intención de endurecer las condiciones de licencia para su traslado.


 

La exigencia de estas condiciones para poder abrir un espacio dedicado al culto se materializará en que estos edificios tengan que estar ubicados en polígonos industriales, fuera de la trama urbana.

En el Ayuntamiento de Tarragona, los técnicos municipales parecen tener bastante avanzada la redacción de la nueva legislación que según las fechas establecidas entraría en vigor entre los meses de marzo y abril.

Esta nueva normativa endurece las condiciones para poder obtener una licencia especialmente si se trata de ubicar el centro de culto en la misma ciudad, de esta forma lo explica el concejal del ayuntamiento, Carles Castillo: "sólo podrán abrir en edificios aislados, sin vecinos, o que estén perfectamente insonorizados". "Nuestra prioridad será evitar conflictos con los residentes y por eso apostamos por una ordenanza que es mucho más restrictiva pero posibilista, porque no cerramos la puerta a nadie siempre que se cumplan todos los requisitos".

Este tipo de condiciones dejan poca maniobra de actuación para ubicar equipamientos religiosos en el centro de la ciudad, a pesar de esto el Ayuntamiento de Tarragona no entorpecerá la entrada y el funcionamiento de los templos que ya estén abiertos con anterioridad y no "provocan conflictos de ningún tipo".

Por el momento el Consistorio sigue trabajando en el texto que después tendrán que aprobar con el máximo consenso posible los demás partidos (CiU, PP e ICV). Desde el mes de marzo ni se tramita ni se concede permisos de apertura, en este tiempo concejales trabajan para dejar cerrado el texto de la nueva ordenanza que verá la luz próximamente y que no dejará conformes a muchos.