21.03.13

 

Quizá algunos no vean la relación, pero yo creo que esto tiene que ver también con eso de llevar los niños a misa. La noticia aparecía estos días en la prensa: un padre llama a la policía para que la maestra devuelva unos cromos a su hijo.

Los niños son los nuevos reyes de la creación, a todo tienen derecho y todo se les puede consentir. Algo tan simple como estar unos adultos charlando, llegar el mocoso interrumpir la conversación y no sólo no se lleva una reprimenda, sino que nos parece normal que lo haga, le escuchamos con atención y hasta decimos que niño tan mono.

Qué les voy a decir de lo que pasa en los colegios. Pobre del docente que ose reprender incluso de la forma más suave y educada a un pequeñajo. A nada que se descuide se encontrará un papá o una mamá que le van a llamar de todo por traumatizar a su niño, humillarle y no sé cuántas cosas más. Todo al revés. Ante una mala nota no se le piden explicaciones al niño por vago, sino al maestro.

Lo de los cromos, muy significativo. Los que nos hemos dedicado a la docencia sabemos lo que es el niño jugando con cromos, pegatinas, chapas o tazos. Supongo que más de uno hemos tenido que hacer una requisa cuando menos temporal. Pues ya ven, el padre que reclama a la policía que intervenga para que su retoño recobre su juguete. Esto se llama educar al niño en la responsabilidad, colaborar con el colegio y hacerle ver que en clase no se juega y que si lo ha hecho para la próxima aprende.

Con lo de ir a misa con los niños solo pretendía que pudiéramos ver entre todos el estado de la cuestión, y descubrir que hay posturas distintas, todas ellas muy dignas de consideración. La inmensa mayoría se decanta por educación en cuanto es posible y mientras sensatez y cuidado para que molesten lo menos posible. Pero no dejas de descubrir que sigue existiendo una no exigua teoría según la cual son niños y por tanto pueden hacer lo que quieran y los demás a aguantarse. Pues tampoco es eso.

A un bebé no se le controla. Y si llora o grita de forma compulsiva pues lo normal es que alguien lo saque del templo hasta que la situación se calme. Pero cuando los niños ya van teniendo algunos añitos se les puede ir educando en lo que está bien o mal y aprenden sin demasiadas dificultades. El problema es que hay que estar un poco encima de ellos y no siempre es fácil. Niños he visto subirse a la pila bautismal o a la imagen de la beata Mogas y los padres tan tranquilos con la respuesta de que son niños. Efectivamente son niños, por eso tienen unos padres que los cuidan.

Lo de los cromos y la policía es muy serio. Anoche lo hablaba yo con la señora Rafaela. En sus tiempos no había cromos, pero se entretenían con otras cosas. Y desde luego si la maestra le hubiera quitado algo, no sólo su padre no hubiera puesto pegas, sino que encima se llevaría un soplamocos de su parte. Así hemos vivido, me decía, con respeto y educación. Que nosotros hemos estudiado poco, pero hemos sabido respetar a los maestros, sacerdotes, a las personas mayores. Igualito que ahora, me decía, que el otro día llamé la atención a un niño porque me estaba arrancando las plantas de las macetas y tuve que aguantar al padre que quién era yo para decir nada a su niño. Así que si chillan en misa tú a aguantar, no sea que encima te sacuda algún padre, que los hay muy brutos.