21.03.13

 

Recapitulamos una serie de artículos de prensa publicados la semana pasada en Brasil, en torno a un caso de asesinato. Como puede verse, no todo lo que parecen cultos sincretistas o esotéricos en casos de sucesos lo son de verdad.

El cuerpo de una adolescente fue encontrado carbonizado en la mañana del pasado 15 de marzo, junto a la vegetación en la Tierra de la Esperanza, en el barrio de Serraria (ciudad de Feira de Santana, estado de Bahía, Brasil. Hallado con ollas de barro y plumas de gallina al lado del cadáver, los equipos de la Policía Militar creen en la posibilidad de que el crimen esté vinculado a la magia negra, según leemos en Gazeta Web.

El joven Weverton Henrique Ferreira informó de que el cadáver fue encontrado por su padre, que caminaba alrededor de las 5 de la mañana con un amigo por las inmediaciones. “Él vio el cuerpo y llamó inmediatamente a la policía”. Una joven, morena y con el pelo corto y rizado, estaba sin camisa y no tenía ningún documento que la identificara. “Queremos el apoyo de la prensa a informar a la familia de que, si tienen un familiar desaparecido con estas características, se acerquen al Instituto Forense para reconocer el cuerpo”, dijo la soldado Rosa Maria Cunha.

El cuerpo de la víctima fue encontrado en un camino de tierra situado en una zona residencial cerca de una vegetación que también fue quemada. “Creemos que fue quemada viva en la zona de matorral y trató de correr hacia el camino de tierra, pero no pudo resistir las lesiones”, dijo la soldado.

Además de la violencia sufrida por la joven, lo que intrigó a la Policía Militar era un material encontrado en la vegetación quemada. Había tres vasijas de arcilla con latas de cerveza y plumas de gallina. “No se descarta la posibilidad de que el crimen fuera motivado por arte de magia negra”, agregó.

Avances en la investigación

Poco después de conocerse esta noticia, el coordinador de la División de Homicidios, delegado Cicero Lima, dijo la misma tarde del día 15 que investigaba ya nombres de posibles sospechosos de implicación en el asesinato. “Es prematuro hablar de ritual de magia negra, pero ya podemos decir que lo sospechamos en este caso. Estamos investigando y tendrán más información en los próximos días”, dijo Lima.

El cadáver de la adolescente asesinada fue identificado por sus familiares a través de un tatuaje en un brazo. Franciele da Rocha, que así se llamaba, tenía 18 años y vivía en el conjunto Benedito Bentes. Mientras tanto, dos amigas de la joven, que la habrían visto por última vez antes de ser asesinada, declararon en la mañana del día 16.

De acuerdo a la información facilitada a Gazeta Web por los familiares, las adolescentes informaron al delegado Cicero Lima, de la División de Homicidios, que estaban en compañía de Franciele cuando un grupo invitó a la joven a ir a una fiesta la noche del 14 de marzo. “Al parecer, conocía a la gente que la invitó, pero sus amigas querían ir con ella”.

También de acuerdo con las adolescentes, tres personas se encontraban dentro del vehículo que se llevó a las tres chicas a un apartamento en el barrio de Cruz das Almas. “Ellos dijeron que el apartamento era normal, no tenía portero, y nunca desconfiaron”, afirmó la familia de una de las jóvenes, que pidieron no ser identificados. Al subir en el ascensor y en el apartamento, ubicado en el quinto piso, las chicas se dieron cuenta de que la “fiesta” en realidad se trataba de una emboscada. “Empezaron a golpear a Franciele y ordenó a las otras dos salir de allí, diciendo que la eliminaría. Ellas se fueron enseguida”.

Detenciones

Efectivos de Fuerza Nacional y de la Policía Civil llevaron a cabo una operación conjunta en la mañana del día 16 con el objetivo de detener a los implicados en la muerte de Franciele. De acuerdo con la Policía Civil, el delito fue pasional, ya que la joven, supuestamente embarazada de dos meses, estaría manteniendo una relación con el novio de una prostituta.

Por la tarde, el estudiante de derecho Saulo José Pacheco Araújo, de 22 años, fue detenido acusado de haber participado en el crimen. Además de Saulo, la policía también capturó a dos menores de edad involucrados, de 14 y 17 años. Otros 10 acusados están siendo buscados por la policía.

El estudiante dijo a la prensa que se vio obligado a realizar el transporte de la víctima y otras siete personas en el barrio de Serraria. “Los llevé a todos a Cruz das Almas y no sabía lo que estaba pasando, porque nadie dijo nada”, aseguró. Saulo dijo además que “las personas involucradas son muy influyentes”, y que una mujer llamada Vanessa, que es una prostituta, habría comprado la gasolina que se usó para quemar el cuerpo de Franciele después de una sesión de tortura, lo que condujo a su muerte.

La prostituta acusada fue identificada como Vanessa Ingrid Souza Luz (en la foto), considerada ahora fugitiva. Según la policía, Franciele fue sometida a una sesión de tortura. “Ellos la amordazaron, la quemaron con cigarrillos, le afeitaron las cejas, le cortaron el pelo y la golpearon bastante. Entonces la llevaron al lugar donde prendieron fuego a su cuerpo, aún con vida”, explicó la Policía Civil. Al final, el delegado Cicero Lima, de Homicidios, dijo que, a diferencia de lo que inicialmente se especuló por las pruebas, el asesinato no tendría ninguna conexión con la magia negra.

Según informan los medios brasileños, el 18 de marzo fue detenida Vanessa, y se descubrió que ya había sido responsable de el asesinato de otra joven (exactamente había pagado para que la mataran), y estaba planeando un tercer asesinato. En Alagoas 24 Horas leemos que niega las acusaciones. Otros medios indican que tras la detención de la acusada podría destaparse una red de prostitución a través de Internet, en la que Vanessa tendría un importante papel.