IGLESIA EN ESPAÑA

Algunos intelectuales han confundido la Religión con ciertos comportamientos religiosos’, afirma el Obispo de Ciudad Rodrigo, monseñor Raúl Berzosa

 

Algunos intelectuales anglosajones, como Hitchens o Perry, han querido desacreditar toda la religión sólo a partir de ciertos comportamientos religiosos, y se han quedado en la superficie sin querer ir a la cuestión de fondo”.

Esta es la idea central de la conferencia ¿Cómo y por qué hablar de Dios en los nuevos ateísmos?, que pronunció este pasado 20 de abril el Obispo de Ciudad Rodrigo, monseñor Raúl Berzosa, dentro del acto académico con motivo de la inauguración de la 7ª Jornada de Maestros y Profesores de Religión de las diócesis con sede en Cataluña, que este año se ha celebrado en Tortosa y que contó con cerca de 600 participantes —un auténtico récord— y con la asistencia de autoridades eclesiásticas y civiles como el Arzobispo metropolitano de Tarragona y primado, presidente de la Conferencia Episcopal Tarraconense y Obispo-delegado del Secretariado Interdiocesano de la Enseñanza de la Religión en Cataluña (SIERC), monseñor Jaume Pujol Balcells; la consejera de Enseñanza de la Generalidad de Cataluña, Irene Rigau; el Secretario General de la Fundación Escuela Cristiana de Cataluña (FECC), P. Enric Puig; el Director General de Asuntos Religiosos del Departamento de Presidencia de la Generalidad de Cataluña, Xavier Puigdollers; o el alcalde de Tortosa, Ferran Bel.

“Hay un ateísmo que toma la parte por el todo: que considera que Dios es malo porque existen fanáticos religiosos creacionistas, que la Religión es perniciosa porque hay grupos ultraortodoxos violentos”, pero este ateísmo no entra en “valorar los aspectos positivos, de amor y de servicio, que contiene el Evangelio “, afirmó monseñor Berzosa. Por otra parte, añadió que religión y ciencia no se excluyen, sino que se complementan, y ha recordado unas palabras de Albert Einstein según las cuales “la ciencia sin religión está coja y la religión sin ciencia, ciega”.

El P. Enric Puig, secretario general de la FECC, se refirió en su discurso al Santo Padre Francisco, y especialmente a una charla que éste pronunció cuando aún era Arzobispo de Buenos Aires: “La Iglesia está llamada a salir de ella misma ya ir hacia las periferias, no sólo las geográficas, sino también las existenciales [...] porque, cuando la Iglesia no sale de sí misma para evangelizar, deviene autorreferencial y, entonces, enferma”. El P. Puig ha añadido: “La clase de Religión en las escuelas debe ayudar a nuestros alumnos a abrirse al conocimiento propio y del mundo que les rodea; debe facilitar la convivencia entre ellos y con las personas con las que comparten la vida desde la acogida, el diálogo, la compasión y la caridad”. El P. Puig concluyó diciendo que la clase de Religión debe ayudar a los alumnos “a construir una cotidianidad que acompañe la aproximación personal para conocer, amar y seguir más a Jesús”.

La consejera de Enseñanza, Irene Rigau, hizo mención en su discurso del libro que, sobre el nuevo Papa titulado El Jesuita, publicaron en 2010 los periodistas Sergio Rubin y Francesca Ambrogetti, y en el que el entonces cardenal Bergoglio abordaba ampliamente el tema de la educación. “La educación debe consistir en grandes certezas existenciales, como por ejemplo hacer el bien y evitar el mal, que es una de las certezas morales más elementales. También hay certezas culturales y convivenciales, pero hay que ir a las existenciales y, a partir de aquí, adelante “.

Monseñor Jaume Pujol, Arzobispo de Tarragona, cerró la sesión con unas palabras resaltando la importancia de la enseñanza de la Religión católica y de agradecimiento por el gran papel desempeñado por los maestros y profesores de esta rama docente. También agradeció la magnífica acogida recibida por parte de la diócesis de Tortosa.

Cabe añadir que, además del acto académico, la 7ª Jornada de Maestros y Profesores de Religión Católica contado con cerca de una veintena de talleres dirigidos a tratar diversos aspectos -muchos de ellos novedosos- de la didáctica de la Religión.

Con la celebración de una solemne Eucaristía, presidida por Mn. Josep Lluís Arín, administrador diocesano del Obispado de Tortosa, se puso punto y final a un acto que hogaño —como ya se ha dicho antes— ha batido todas las marcas de asistencia.

(Fuente: Sergi Gallego/Obispado de Tortosa y Departamento para los MCS del Arzobispado de Tarragona)