Editorial

Cuatro años de InfoCatólica, sirviendo al Señor con alegría

 

Aquí solamente hay lugar para la acción de gracias al Señor. Y si queremos que Él siga asistiéndonos y acrecentándonos, mantengámonos en la humildad más profunda, aunque prosperemos mucho.

06/05/13 12:03 AM


Servite Domino in lætitia (Sal 99,2). Cuatro años publicando InfoCatólica, desde el 6 de mayo de 2009... son unos cuantos años. Renovar siete días a la semana en la página-web las noticias, y con mayor o menor frecuencia los artículos de los blogs, las diversas secciones, opinión, vídeos, facebook, el boletín, en un clic todas las noticias; atender llamadas y mensajes... es mucho trabajo, mucho.

Sepan que en estos cuatro años InfoCatólica ha publicado 10.294 noticias, 14.410 posts en los blogs y 681 artículos. Y que en las noticias y los blogs se han recibido 338.658 comentarios, que siempre requieren una revisión, aunque sea mínima, y una contestación a veces.

Pero quede claro que es Dios el protagonista principal de cuanto vamos trabajando. Eso es así en toda la vida cristiana, y más cuando se trata, como es el caso, de una obra apostólica: «es Dios quien activa en nosotros el querer y el obrar para realizar su designio de amor» (Flp 2,13). Es Él quien nos mueve con su gracia, iluminando nuestra mente y auxiliando nuestra voluntad, para que actuemos con perseverancia en el trabajo de InfoCatólica. Es Él quien dispone en su providencia nuestra buena voluntad, las circunstancias de trabajo y todo lo que hace posible nuestro empeño, concretamente la actitud de los familiares. Un monumento, dicho sea de paso, tendríamos que hacer a los cónyuges de quienes llevan asiduamente un blog.

Nuestro Señor Jesucristo no era ni quietista ni luterano, ni pelagiano ni voluntarista. Y como Él entendía su actividad, exactamente igual tenemos nosotros que entender la nuestra: «El Hijo no puede hacer nada por sí mismo, sino lo que ve hacer al Padre: lo que éste hace, lo hace igualmente el Hijo» (Jn 5,19). «Yo no puedo hacer nada por mí mismo» (5,30, cf. 8,28). «Las obras que mi Padre me dio hacer, ésas son las obras que yo hago» (5,36). «El Padre que mora en mí, hace sus obras» (14,10)... ¿Está bastante claro, no? Pues bueno, así como el Hijo vive por el Padre, nosotros vivimos por el Hijo (6,57). Es Él, la Cabeza, la que mueve a los miembros de su propio Cuerpo. Es Él, con perdón, el autor principal de InfoCatólica. Nosotros, la treintena de subnormales que la hacemos (todos somos subnormales; los santos son los únicos normales, fieles del todo a la norma, Cristo), no pasamos de ser co-laboradores Suyos privilegiados, y en muchos casos, estorbos que Él aguanta y supera con su bondad omnipotente.

Así que nadie alce aquí la cabeza y saque pecho. Guardémonos de ello muy mucho, porque quien se ensalce, será humillado (Lc 14,11; 18,14). Aquí solamente hay lugar para la acción de gracias al Señor. Y si queremos que Él siga asistiéndonos y acrecentándonos, mantengámonos en la humildad más profunda, aunque prosperemos mucho. Porque ésta es otra: en estos cuatro años hemos ido creciendo cada año, como media, un 51 %... Y siendo buena una obra, como lo es InfoCatólica –ya que tratamos de caminar siempre sin soltarnos de la mano de la Iglesia, Madre y Maestra–, podemos-debemos pensar que «es Dios quien [nos] da el crecimiento» (1Cor 3,7). Sí, ya sabemos que también hay otras obras que son malas y crecen igualmente mucho; pero si no son buenas, es Otro quien les da el crecimiento.

Nuestro trabajo, día a día, hay que reconocerlo, es muy laborioso. También es cierto que, en la treintena de apostólicos currantes que mantenemos viva la página, unos trabajan más, otros menos. Pero bueno, haga cada uno según lo que Dios le dé hacer: ni más, ni menos, ni algo diferente. Y unos y otros sirvamos al Señor con alegría. Servite Domino in lætitia: en alegría y gratitud. Dios nos da el trabajo, los medios, las luces y fuerzas, la perseverancia. Y también nos da los lectores, pues, como ya sabemos, «todo buen regalo y todo don perfecto desciende de arriba, procede del Padre de las luces» (Sant 1,17).

«El Señor ha estado grande con nosotros, y estamos alegres» (Sal 125,3)... ¿Seguro? ¿Siempre estamos alegres?... Bueno, eso es lo que está mandado: «alegraos siempre en el Señor; de nuevo os digo: alegraos» (Flp 4,4). Pero a veces... Donde han de colaborar treinta personas, ya se sabe... Hay días... «Es que ese N.N. se pone a veces inaguantable. Mira que le hemos dicho veces que»... Seamos sinceros y confesémoslo con toda humildad: en InfoCatólica, perfectos, lo que se dice perfectos, somos muy pocos. Y a veces saltan chispas, hay sus-más y sus-menos. Pero nos perdonamos, es decir, nos per-donamos: volvemos-a-donarnos la amistad. De este modo se reafirman en las dificultades los vínculos de la unión: por el don de nosotros mismos a los otros y por el per-don mutuo. Y así llevamos cuatro años, sin graves heridas que lamentar, gracias a Dios.

Estamos alegres, sí. Echándole caridad al asunto, por supuesto. Obedeciendo a las Escrituras: «que todas vuestras obras sean hechas en caridad» (1Cor 16,14). Estamos alegres porque los trabajos que hacemos cuestan tanto menos cuanto con más amor son hechos. Da con alegría el que da con amor, amor a Dios y amor a nuestros lectores. «Dios ama al que da con alegría» (2Cor 9,7). En fin, que el Señor nos conceda por su gracia vivir lo que por su gracia nos manda: servir al Señor con alegría.

Comenzamos, pues, en InfoCatólica el quinto año.

No hay quinto malo.