31.05.13

 

Para el paseante primerizo por la Gran Vía de Madrid lo primero que sugiero es que se siente sin prisas en un banco y observe. Ante sus ojos se desplegará un infinito desfile de tipos y modelos capaces de mostrar en minutos la variopinta riqueza de la ciudad de Madrid: los personajes más elegantes, la decadente dignidad, tribus urbanas, colectivos turísticos. Esto es Madrid.

Ayer lo hice. Sentarme y más tarde pasear. Estas son algunas de las cosas que uno puede encontrar en este poblachón manchego.

- Extraños compañeros de cama. Encontré gente pidiendo firmas para solicitar un referéndum sobre pensiones. Un enorme cartel señalaba los grupos y movimientos implicados en el asunto: Asociación Afectados Fórum Filatélico, Alternativa Sindical de Trabajadores, Asociación Española de Profesionales de Emergencias, Asociación de Vecinos SURAL, Asociación Ecologista Atalaya, Ateneo Cultural Madrid XXI, Juventud Obrera Cristiana, Los Verdes – Grupo Verde, Partido de los Pensionistas en Acción, Partido Mayores y Autónomos, Partido Pirata, Piratas de Madrid, Planeta Verde, Plataforma Yo No Pago, Partido Castellano, Por Un Mundo Más Justo, Unificación Comunista de España, Unión Sindical Obrera, Yayoflautas Granada, Yayoflautas Madrid, Yayoflautas Sevilla Colaboran: Ciudadanos – Partido de la Ciudadanía, Ciudadanos de Centro Democrático, Hermandad Obrera de Acción Católica.

No espabilamos. ¿Qué pintamos los católicos al lado de “Yo no pago”, el partido Pirata o la Unificación Comunista de España? Hay gente y grupos con los que no se puede ir a ni a recoger una herencia. Entre los firmantes, Benjamín Forcano, que ya no sabe qué hacer para salir en los papeles.

- Oferta para la degradación. Ya dije que hay de todo. Una hora bebiendo cuba libres por diez euros. Está visto que aquí el que no se emborracha es porque no quiere. Entiendo que el bar en cuestión ponga en macha iniciativas comerciales para sanear sus cuentas. Pero sigo creyendo que el fin no justifica los medios.

- Una iglesia abierta, la de San Martín, donde rezar ante el Santísimo expuesto. Un oasis para retirarse uno un momento del torbellino de coches y gentes.

- La posibilidad de encontrarte con amigos infocatólicos, como Juanjo Romero y Bruno Ramos, y conocer a un bloguero de allende los mares: Daniel Iglesias.

- Acompañar a Daniel a su hotel y, por el camino, que te ofrezcan propaganda para un show de sexo, y mira que iba servidor con su tirilla de cura bien visible.

Gran Vía de Madrid. La magia existe.