Roma
05 de julio del 2013

Juan XXIII y Juan Pablo II, santos. El papa da luz verde a las dos canonizaciones y también a la beatificación de Álvaro del Portillo

Jornada intensa en el Vaticano. Si ayer por la mañana se daba a conocer la ya anunciada primera encíclica de Francisco, que comenzó Benedicto XVI, horas más tarde se conocía que el papa había dado su visto bueno a la canonización de Juan Pablo II, una vez analizado el último milagro, a la de Juan XXIII, para la que no ha exigido milagro, y la beatificación de monseñor Álvaro del Portillo, que fue prelado del Opus Dei tras la muerte de san Josemaría Escrivá de Balaguer.


 

Los dos esperados decretos de canonización de Juan Pablo II y de Juan XXIII acercan aún más la posibilidad de una beatificación conjunta, como se había especulado estos mismos días. Las fechas que indican entre los vaticanistas son el 24 de noviembre, el 8 de dicimebre, que coincide con la celebración de la Inmaculada, o quizá ya la primavera del año siguiente.

En el caso del papa Juan Pablo II, el proceso ha concluido después de que la Congregación para las causas de los Santos diera el vistuo bueno al expediente de un milagro acaecido por intervención del papa. Se trata de una costarricense que se ha salvado de un aneurisma incurable. En el caso de Juan XXIII, el papa Francisco ha utilizado su potestad para determinar su canonización a pesar de que no hay un segundo milagro.

En este mismo día, junto al reconocimiento de varios martirios, el papa también ha dado el visto bueno a la beatificación de don Álvaro del Portillo, sucesor de san Josemaría Escrivá de Balaguer en el Opus Dei.