11.08.13

La Palabra del Domingo -11 de agosto de 2013

A las 12:27 AM, por Eleuterio
Categorías : General, Apostolado laico -La Palabra del Domingo

Panecillos de meditación

Llama el Beato Manuel Lozano Garrido, Lolo, “panecillos de meditación” (En “Las golondrinas nunca saben la hora”) a los pequeños momentos que nos pueden servir para ahondar en determinada realidad. Un, a modo, de alimento espiritual del que podemos servirnos.

Panecillo de hoy:

Si nos miramos comparándonos con Jesucristo, seguramente, creeremos que no somos nada pero, en realidad, nos daremos cuenta de que somos hermanos suyos y eso es mucho más que nada.

Lc 12, 32-48

Biblia

32 «No temas, pequeño rebaño, porque a vuestro Padre le ha parecido bien daros a vosotros el Reino. 33 «Vended vuestros bienes y dad limosna. Haceos bolsas que no se deterioran, un tesoro inagotable en los cielos, donde no llega el ladrón, ni la polilla; 34 porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón. 35 «Estén ceñidos vuestros lomos y las lámparas encendidas, 36 y sed como hombres que esperan a que su señor vuelva de la boda, para que, en cuanto llegue y llame, al instante le abran. 37 Dichosos los siervos, que el señor al venir encuentre despiertos: yo os aseguro que se ceñirá, los hará ponerse a la mesa y, yendo de uno a otro, les servirá. 38 Que venga en la segunda vigilia o en la tercera, si los encuentra así, ¡dichosos de ellos! 39 Entendedlo bien: si el dueño de casa supiese a qué hora iba a venir el ladrón, no dejaría que le horadasen su casa. 40 También vosotros estad preparados, porque en el momento que no penséis, vendrá el Hijo del hombre.» 41 Dijo Pedro: «Señor, ¿dices esta parábola para nosotros o para todos?» 42 Respondió el Señor: «¿Quién es, pues, el administrador fiel y prudente a quien el señor pondrá al frente de su servidumbre para darle s su tiempo su ración conveniente?43 Dichoso aquel siervo a quien su señor, al llegar, encuentre haciéndolo así. 44 De verdad os digo que le pondrá al frente de toda su hacienda. 45 Pero si aquel siervo se dice en su corazón: “Mi señor tarda en venir", y se pone a golpear a los criados y a las criadas, a comer y a beber y a emborracharse, 46 vendrá el señor de aquel siervo el día que no espera y en el momento que no sabe, le separará y le señalará su suerte entre los infieles. 47 «Aquel siervo que, conociendo la voluntad de su señor, no ha preparado nada ni ha obrado conforme a su voluntad, recibirá muchos azotes; 48 el que no la conoce y hace cosas dignas de azotes, recibirá pocos; a quien se le dio mucho, se le reclamará mucho; y a quien se confió mucho, se le pedirá más.
 

COMENTARIO

Conformados a la voluntad de Dios

Este texto del evangelio de san Lucas tiene un sentido claramente escatológico. Lo que está por venir y que es nuestro futura vida eterna… sin duda vendrá y a cada cual lo encontrará en lo que tiene que estar ocupado o, por el contrario, mirando para otro lado.

Jesús se dirige a los pequeños en la fe. Aquellos que han aceptado que es el Mesías puede que padezcan mucho a lo largo de su existencia pero, en el fondo, saldrán ganando más que mucho pues obtendrán la tan anhelada vida eterna que dura siempre, siempre, siempre.

Al respecto de lo que está por venir, es muy común pensar que sólo vale o sirve aquello que, en esta tierra y en este mundo, podemos acumular. Sin embargo, es más que sabido que, para empezar, nada de aquí nos podemos llevar al otro mundo y, en segundo lugar, todo lo que acumulamos, por tanto, de nada nos sirve. Todo, como dice Jesús, lo corroe la polilla.

Por tanto, vale más acumular para el cielo que no para la tierra por la que peregrinamos hacia el definitivo Reino de Dios.

Pero Jesús dice mucho más en este texto.

Hay que estar alerta o, lo que es lo mismo, preparados. Quien permanece en situación de alerta sabe que no le van a ocupar sus posesiones. Espera sabiendo que pueden venir y, por lo tanto, sabe cómo estar actuando en cada momento de su existencia. Sin embargo, quien no quiere prepararse porque cree que nunca va a ser llamado puede verse llamado en el momento que menos espera y, entonces, será, seguramente, el llanto y el rechinar de dientes…

Jesús sólo nos recomienda aquello que es bueno para nosotros. Como hermano nuestro, como Hijo de Dios y como Dios mismo sabe perfectamente qué nos conviene. Por eso, muchas veces pudiera parecernos que nos pone sobre la mesa grandes verdades que debemos seguir a rajatabla y, por eso mismo, es más que normal que las sigamos pero, también es cierto, que no son pocas las ocasiones en las que miramos para otro lado porque creemos que no nos conviene lo que nos dice aunque sean muchas las veces en las que nos propone lo mismo.

PRECES

Por todos aquellos que no confían en la llegada, de nuevo, de Cristo y se entregan al mundo y a sus mundanidades.

Roguemos al Señor.

Por todos aquellos que prefieren acumular en este mundo y no para el que tiene que venir.

Roguemos al Señor.

ORACIÓN

Padre Dios; ayúdanos a estar bien preparados para cuando llegue tu Hijo en su Parusía.

Gracias, Señor, por poder transmitir esto.

El texto bíblico ha sido tomado de la Biblia de Jerusalén.

Eleuterio Fernández Guzmán