El papa revive en Asis la vida del santo que da nombre a su pontificado. Se reunirá con pobres y enfermos además de visitar algunos de los sitios mas emblemáticos de la vida de San Francisco

Hoy viernes tiene lugar uno de los viajes más esperados que ha realizado el papa Francisco hasta el momento. A las siete de la mañana Francisco dejará el Vaticano para iniciar su visita a la ciudad de Asís, el hogar del santo por el cual Jorge Mario Bergoglio eligió su nombre de papa. Tal y como confesaba hace unos días en una entrevista para el diario italiano La Republica, su santo preferido es Francisco de Asís, más que San Ignacio de Loyola, fundador de los jesuitas, orden a la que pertenece. "San Francisco es grande porque es todo: un hombre que quiere hacer cosas, itinerante y misionero. Es poeta y místico. Constató sobre sí mismo el mal y salió de él. Ama la naturaleza, los animales, el hilo de hierba del prado y los pájaros que vuelan en el cielo, pero sobre todo ama a las personas, a los niños, a los ancianos y a las mujeres" explicó el Santo Padre.

La visita a Asis sirve para recordar todas esas virtudes de austeridad; de valor, para romper con la idolatría del dinero; y de esperanza, para dejarse en las manos de Dios, que caracterizaron al santo, y que precisamente el papa Francisco busca reforzar en la iglesia de hoy. Será una visita para recordar que es preciso "una Iglesia pobre y para los pobres".

La jornada contará con visitas a distintos lugares de oración como el santuario de San Damiano, la celda de San Francisco o la Basílica de Santa Clara, donde se encuentra el cuerpo de la santa. Sin embargo el día también estará repleto de visitas a grupos de enfermos, discapacitados y pobres. En el campo deportivo del Instituto Seráfico de Asís, Francisco se encontrará con niños y con enfermos atendidos en esa institución, y almorzará con los pobres en un centro de primera acogida, cerca de la estación de Santa María de los Ángeles. Por la tarde el papa se dirigirá a los jóvenes en la explanada de la basílica de Santa Clara. Sera una visita en la que la atención y el cuidado hacia pobres y enfermos tendrá un papel de gran importancia, muy al estilo al que el papa Francisco nos tiene acostumbrados.