13.10.13

Tres ejes de la Beatificación

A las 11:00 PM, por Tomás de la Torre Lendínez
Categorías : General

Tal como terminé ayer mi crónica, los beatos españoles han operado un enorme milagro en la ceremonia de su elevación a los altares.

El hecho prodigioso ha tenido tres ejes:

1.- Un tiempo de dulce para poder estar en la antigua universidad laboral al aire de la mañana catalana. Una temperatura de veinte a veinticinco grados. El público ha podido estar y todos los celebrantes: cardenales, obispos, sacerdotes, en una ceremonia bien preparada litúrgicamente y desarrollada en paz y armonía.

Las asistencias sanitarias han atendido a una docena de situaciones de desmayo, o asuntos similares, sin mayor importancia.

Las fuertes medidas de seguridad han impedido la irrupción de cualquier desalmado o grupo reventador del acto. Este férreo cerco ha motivado que algunos autobuses no pudieron llegar a tiempo al recinto de la antigua universidad laboral de Tarragona al producirse un atasco. En el interior iban familiares de varios nuevos Beatos, que se han contentado con oírlo por la radio.

2.- La homilía, tras la lectura del documento de elevación a los altares de los más quinientos hermanos nuestros en la fe que en el siglo pasado regaron con su sangre los pueblos y las tierras de España, la homilía, repito, pronunciada por el cardenal Amato: una maravilla de sencillez catequética, fidelidad histórica, respeto a todos, explicación de la definición de mártir, fidelidad al Magisterio de la Iglesia y conexión con la vida real de los cristianos que allí hemos estado.

3.- La despedida del cardenal Rouco: una gran ocasión de hacer un resumen, sin que nadie se lo pidiera, de su paso por la presidencia de la Conferencia Episcopal Española, cuyos miembros estaban casi al completo en la Misa de hoy.

Me ha gustado mucho todo lo dicho por el cardenal Rouco. Aún más ha servido para acallar a los que ya lo daban por amortizado a medio plazo. Ha sido él quien ha puesto el primer clavo a su tumba como cabeza visible en la cúpula de los obispos de España. Los enterradores de turno han llegado tarde. Es mejor poner uno el primer clavo y el epitafio, ya vendrán los cuervos a comerse los despojos.

Conclusión

Me alegro de haber participado en esta inmensa e histórica Beatificación de más de quinientos hermanos mártires del siglo pasado.

Que todos los nuevos Beatos intercedan por todos los españoles. Lo necesitamos mucho en estos momentos de nuestra historia.

Recomendación

Invito a leer una novela y un ensayo.

La novela se titula:

Cuerpos y almas.

El ensayo se titula:

Ensayo sobre el agradecimiento

Pueden pinchar aquí.

http://marianojv.awardspace.com/novela.html

Tomás de la Torre Lendínez