Crecimiento del 154 por ciento en poco más de una década

El aumento de hispanos en Carolina del Sur es «bendición» para los católicos

 

El crecimiento de los hispanos en Carolina del Sur ha caído como «una bendición» para las iglesias católicas del estado, dado el fervor religioso que aporta esta comunidad, aunque a la vez su integración con los católicos locales constituye un «reto». «Este proceso de integración no se llevará a cabo de inmediato, tardará un tiempo, no es automático», afirmó a Efe Gustavo Valdez, el director del Ministerio Hispano de la Diócesis de Charleston, al sur del estado.

27/10/13 12:53 PM


(EFE/InfoCatólica) «Como hispanos, tenemos la obligación cristiana de aceptar a la comunidad angloamericana como es, respetar sus costumbres, aprender su idioma, cultura; sin olvidar quienes somos, nuestro idioma y costumbres. Se trata de integrarnos», destacó.

Según Valdez, católico de origen mexicano, hay 150.000 feligreses católicos de origen hispano inscritos en la Diócesis de Charleston, conformada por 98 parroquias, de las cuales 46 ofrecen servicios religiosos a los feligreses latinos, incluidas misas, confesiones y retiros espirituales, con el soporte de apenas 12 sacerdotes de origen hispano.

Por otro lado, un estudio del Pew Hispanic Center estimó que en 2011 habían 240.884 hispanos residiendo en Carolina del Sur, una cifra que revela un notable crecimniento respecto a los 94.652 hispanos que estaban censados en el año 2000.

Este crecimiento del 154 por ciento en poco más de una década vuelve a incluir a Carolina del Sur en la lista de los diez estados con mayor crecimiento de población hispana en el país entre 2000 y 2011, superado sólo por el estado de Alabama. Este incremento de población hispana en el estado si bien ha aportado muchos beneficios económicos, también ofrece retos a nivel social y cultural.

«Hemos visto un problema. Que la comunidad hispana está creciendo a su propio ritmo y la angloamericana busca mantener las parroquias en el país, pero no necesariamente estamos teniendo una ‘comunión’ de comunidades. Buscamos asimilarnos más que integrarnos», enfatizó Valdez.

El laico considera que Carolina del Sur se ha beneficiado en gran medida de la presencia de los inmigrantes, quienes con su trabajo en las industria de la agricultura, los servicios, y la construcción, han logrado «mover y fortalecer la economía estatal».

«También lo notamos en las iglesias, porque los hispanos somos católicos muy fervientes, una comunidad muy joven, que le gusta tener hijos, y participar activamente de la vida cristiana y católica. Debemos integrar entre sí a ambas comunidades para ayudar a la iglesia a crecer», resaltó.

Para Valdez, la «integración» no será fácil, pero tampoco imposible de cumplir, y aunque reconoce que existe cierta «incomodidad» entre ambas comunidades, recuerda que el catolicismo es «universal» y promueve la «aceptación» mutua entre las culturas.

Valdez fue uno de los participantes del foro que organizó la Cámara de Comercio Hispana de Carolina del Sur (SCHCC), entidad que reunió por primera vez a los representantes de los diferentes sectores económicos, sociales, religiosos y legislativos para discutir el impacto que han tenido los inmigrantes hispanos en este estado sureño.