Conferencia Episcopal
Primera semana al frente de la Iglesia de España

Blázquez, presidente de la Conferencia Episcopal, no nombrará un obispo auxiliar para ayudarle en Valladolid

El que es desde hace una semana nuevo presidente de la Conferencia Episcopal Española, Monseñor Ricardo Blázquez, no tiene previsto de momento nombrar a ningún obispo auxiliar para ayudarle a compatibilizar su nuevo cargo al frente de los obispos de España y sus obligaciones pastorales como Arzobispo de Valladolid.


 

El recién nombrado presidente de la Conferencia Episcopal ha querido esta semana insistir en que su nuevo cargo, como ya lo hizo siendo obispo de Bilbao, es compatible con el de arzobispo de Valladolid.

En este sentido el arzobispo añadió que Valladolid, con una población entre la capital y provincia de unas 525.000 personas, “no es una diócesis considerada grande”, por lo que no cree necesario nombrar un obispo auxiliar.

“Muchos ya lo hicieron antes aunque otros lo compatibilizaran estando solo en Madrid”, indicó aunque, no obstante, matizó que se apoyará en “el vicario, arciprestes y colaboradores de la curia” para poder desempeñar la presidencia pastoral de la diócesis con la de la Conferencia Episcopal.

Por otra parte, sobre los análisis que le sitúan como un “moderado» que va a seguir la línea marcada por su predecesor, Antonio Rouco Valera, el prelado vallisoletano consideró que cada uno de los obispos “es teólogo, con un estilo y ministerio distintos. Ninguno es modelo de todos los pastores, ya que solo lo es Jesucristo”.

A su vez, puso de manifiesto el deseo de poder llevar a cabo una buena labor al frente de la Conferencia Episcopal “y hacerlo de la mejor forma posible con ayuda de todos los obispos”. “Debemos actuar como somos, con autenticidad, con lo que nos sale de dentro”, explicó en torno a su nueva responsabilidad dentro de la Iglesia española.

Sobre las directrices de su segundo mandato como presidente de la Conferencia Episcopal, Blázquez cree que el papa Francisco será “un referente fundamental con su estilo propio”. “Tenemos que estar con los que más sufren en sintonía con lo que él viene marcando y, en el caso de España, tratar de ayudar a paliar los efectos de la crisis en colectivos vulnerables”, expuso, en referencia a inmigrantes, niños o mujeres.