5.06.14

Robert Fico, primer ministro socialista de Eslovaquia, protege constitucionalmente la familia natural

Casi el 70% de la Naródná Rada (Cámara Nacional de Eslovaquia) votó a favor de la reforma constitucional que define el matrimonio como el «vínculo único entre un hombre y una mujer. La República de Eslovaquia protege absolutamente el matrimonio y procura el bien del mismo». La defensa de la familia, en este caso, la ha encabezado el Smer-SD, «Dirección», el partido socialista de Robert Fico, que gobierna el país desde 2006 en coalición con el SNS (Partido Nacional Eslovaco), y el LS-HDZS (Partido Popular-Movimiento por una Eslovaquia Democrática).

Se pone fin a los reiterados intentos de 1997, 2000 y 2012, de introducir el gaymonio en el país por la vía directa o por la puerta de atrás. La reforma apostilla en las motivaciones que «no es posible que los derechos y obligaciones derivados del matrimonio le sean conferidos a algo que no sea la unión legalmente reconocida entre un hombre y una mujer», que no sólo cierra el paso a las uniones civiles, también protege a los niños.

De este modo Eslovaquia se une a otros países como como Polonia, Hungría, Croacia, Serbia, Montenegro, Bulgaria, Letonia, Lituania, Bielorrusia, Ucrania y Moldavia, cuyas constituciones ya protegen a la familia natural.

Es significativo que sean las naciones machacadas por el comunismo, las que se vieron privadas de las libertades más básicas las que más valoren y defiendan las libertades e instituciones fundamentales de cualquier sociedad como es la familia. Qué razón tenía san Juan Pablo II con la necesidad de los ‘dos pulmones’ de Europa.