Radio Vaticano entrevistó a la actual Embajadora de Chile ante la Santa Sede, la Señora Mónica Jiménez de la Jara, quien es Asistente Social por la Universidad Católica de Chile, y también presidió la Comisión Justicia y Paz de la su país. Así mismo, la Embajadora Jiménez fue Titular de la cartera de Educación en el anterior mandato de la Presidenta Michelle Bachelet.

Ante los micrófonos de Radio Vaticano, donde fue entrevistada por el jesuita Guillermo Ortíz, declaró que se siente honrada por ser la primera mujer en representar a su país ante la Santa Sede.

-¿Cuál es la tarea principal de la Embajada y de la Embajadora ante la Santa Sede?

-Representar a mi país ante la Santa Sede es algo especial, porque no es lo mismo que representarlo ante otro Organismo multilateral en las típicas relaciones bilaterales, porque aquí no hay relaciones comerciales, no hay relaciones militares, en este caso existe un interés común por ciertos temas: como por ejemplo el tema de la paz, el tema de la superación de la pobreza, la igualdad, la inclusión, entre otros. En este sentido la tarea fundamental es mantener e incrementar las buenas relaciones ante la Santa Sede y el país que represento.

-¿Cuál es su experiencia en el campo de la educación en su país y en Latinoamérica?

-He trabajado casi toda mi vida en el campo educativo, al punto que la Presidenta Bachelet me nombró Ministra de Educación en su primer mandato. En este ámbito estamos buscando un modelo que apunte a una verdadera calidad educativa, y que busca la integración de la sociedad y la justicia social. Estos son objetivos totalmente cristianos.

-¿Cómo tomó usted esta misión de ser la Embajadora de su país con el Papa Francisco?

-Ha sido increíble, primero por ser Embajadora y más aún por ser Embajadora con el Papa Francisco. Personalmente estoy muy vinculada con la Iglesia y para mí el Papa Francisco es absolutamente excepcional y sintonizo mucho con su forma de evangelizar. El Papa está retomando la energía del Vaticano II, le está dando el lugar que merece la persona humana, recordándonos que el centro de todo es el ser humano. Y en este sentido, estoy dispuesta ayudarlo a difundir este mensaje.

(Renato Martínez – RV)