4.09.14

El Padre Ángel parece que no sabe eso

A las 12:23 AM, por Eleuterio
Categorías : General, Defender la fe

Padre Ángel

Hay algo elemental cuando se habla: pensar lo que se dice. Aunque aún es peor que lo que se diga no tenga nada que ver con la fe que se dice tener.

El caso del Padre Ángel, ingrediente de muchas salsas bastante indigestas, parece que no ha estado muy oportuno en esta ocasión. A lo mejor, sin embargo, lo que ha dicho lo piensa de verdad. Entonces, francamente, la cosa es mucho peor.

Resulta que en su portal de cabezonería (no digo de cabecera porque lo que allí impera es la cazurrería contra la Iglesia católica) le han colgado una entrevista en la que se ha deslizado más de la cuenta.

No es que haya aparecido fotografiado bajo una bandera palestina con ya sabemos qué intenciones sino que ha dicho algo que tiene poco sostén católico o, mejor, ninguno.

Al respecto de lo aquí traído, hace unas semanas se produjo en esta casa InfoCatólica un debate muy bueno sobre si Dios castiga o no castiga. Y después del mismo se concluyó (lo cual, por cierto, era fácil si un atiende a su fe católica) que, en efecto, el Creador castiga. No con malasombra y porque le dé la gana sino a quien se lo ha buscado con ganas.

Pues bien, ahora va y el Padre Ángel dice esto que sigue al respecto de la guerra entre Israel y el grupo de desarrapados con armas que constituyen Hamas y sus seguidores:

“Si Dios castigara iría a castigar a EE UU y a España, no a Haití o a África”.

Y esto lo anecdótico (es decir, se refiere al caso concreto de lo que ahora está pasando).

Pero ahora viene lo categórico que es lo que diferencia un pensamiento esporádico o de situación concreta de uno final o definitivo:

“Si Dios castigara, castigaría a los ricos, no a los pobres”.

Como diría el castizo: ¡Amos, anda ya!

Ahora resulta que debemos dudar acerca de que Dios castiga. Lo digo porque utiliza el “si” condicional que, como sabemos, es expresión de falta de seguridad en lo que se dice y determina que, al o mejor, así dicho en general, Dios no castiga pero que no lo sabemos.

Pero es que lo otro aun es mejor.

Resulta que Dios, si castigara (que castiga) nada haría con el pobre sino sólo con el rico. Es decir, que pasaría por alto los pecados, aunque fueran malos de mucha malura, de los pobres y haría lo que fuese necesario hacer con el rico por el simple hecho de serlo.

¡Viva la demagogia religiosa!

A mí me parece que el Padre Ángel anda un poco desnortado aunque él crea que su norte lo tiene claro. Y, en verdad, lo tiene pero es un norte un poco desviado de su destino final que no ha de ser otro que el cumplimiento de la voluntad de Dios y no el arrimarse al sol progre que más calienta.

Y es que además olvida que Jesús no ataca a la riqueza por el hecho de que sea riqueza (lo cual, por cierto, habría sido absurdo pues personas con mayor poder económico, por las causas y razones que sean, las ha habido y las habrá siempre… como pobres) sino la riqueza mal utilizada. Sin embargo, el Padre Ángel… ¡Hala!, a todo rico… al paredón espiritual del castigo de Dios… si castiga, claro está porque si no castiga (según tal modo extraño y ciego de pensar en un católico) pues, nada, ni castigo para el pobre ni para el rico.

Ciertamente, leer algunas cosas produce una agonía espiritual de no corto calibre pues es sabido que el Padre Ángel tiene muchos seguidores. Es cierto que muchos de ellos parecen estar bastante perdidos pero otros, a lo mejor, son los pequeños en la fe a los que puede escandalizar con lo que dice.

¡Ay, pues, la rueda de molino!

Eleuterio Fernández Guzmán