Diócesis
Nueva ordenanza de ruidos

El ayuntamiento de Sevilla prohíbe a las iglesias tocar las campanas para dar la hora

El ayuntamiento de Sevilla comenzará a aplicar en los próximos días la nueva Ordenanza de Ruidos que viene a sustituir a todas las normativas vigentes al respecto después de su aprobación definitiva el pasado verano tras un largo proceso que la mantuvo paralizada por falta de consenso. La nueva normativa contempla aspectos que pueden chocar con costumbres y actividades de ocio de buena parte de los sevillanos.

 

La nueva normativa aprobada por el gobierno municipal del PP, consultada por El Confidencial Autonómico, afecta a numerosos establecimientos de la capital hispalense: por ejemplo, a las populares peñas sociales o recreativas, donde es común el juego del dominó, los dados o los dardos. Estos juegos son, a juicio del ayuntamiento, actividades que generan ruidos de impacto por lo que quedan expresamente prohibidos.

Otra de las aficiones de una mayoría de sevillanos, consumir bebidas en la calle, práctica común en numerosas zonas de la ciudad tanto de día como de noche, serán perseguidas por las autoridades. Se sancionará a cuantos establecimientos sirvan bebidas al público cuando éstas se consuman de pie en el exterior. Son numerosos los bares que tienen una ventana-mostrador que, a partir de ahora, sólo podrá ser utilizada por los camareros.

Sólo podrán tocar a misa y en fin de año

Pero si algo llama la atención en Sevilla, donde hay decenas de templos religiosos, es la prohibición expresa de tañer las campanas para dar la hora, como es tradicional en ciudades y pueblos de toda España. A partir de ahora, según la ordenanza de ruido consultada por ECA, las iglesias sólo tendrán permitidas los toques de campana para llamar a misa y también en fin de año.

La guerra contra el ruido afecta también a todos aquellos usuarios de vehículos que generen un ruido innecesario o molesto, incluso que vayan dando acelerones por la vía pública. Estas infracciones serán sancionadas directamente sin necesidad de realizar comprobación acústica alguna.

Uno de los aspectos más sorprendentes de la nueva ordenanza de ruido aprobada por el equipo de Juan Ignacio Zoido es que permite la instalación de bares con música y discotecas en núcleos residenciales, es decir, en edificios colindantes a las viviendas siempre y cuando no compartan estructura.

Eso sí, los “coches-discoteca” serán especialmente perseguidos: estará prohibido hacer funcionar equipos de música en vehículos a un volumen manifiestamente excesivo a juicio de los agentes de la Policía Local. Por último, las nuevas ordenanzas advierten a los sevillanos que el funcionamiento deelectrodomésticos, receptores de televisión y equipos de sonido no deberá causar molestias por ruido en la vecindad.