El sacerdote del presbiterio abulense Mons. Enrique Planas Coma
ha sido galardonado con el Premio ¡Bravo! Especial 2014
que otorga la Comisión Episcopal de Medios de Comunicación
Social de la Conferencia Episcopal Española. De esta manera, se
reconoce su amplia labor en el campo de la comunicación social,
especialmente durante su estancia en Roma. Estos premios tienen
como objetivo “reconocer, por parte de la Iglesia, la labor
meritoria de todos aquellos profesionales de la comunicación en
los diversos medios, que se hayan distinguido por el servicio a
la dignidad del hombre, los derechos humanos y los valores
evangélicos”.
Nacido en Barcelona en 1938,
Mons. Planas fue ordenado sacerdote de esta diócesis de Ávila en
enero de 1972. Estudió Ingeniería Química en el Instituto
Químico de Sarrià, en Barcelona, y Periodismo en la Escuela de
la Iglesia, en Madrid. Fue el primer director del Secretariado
de la Comisión de Medios de Comunicación Social de la
Conferencia Episcopal Española, entre 1968 y 1972. A
continuación fue destinado al Vaticano para trabajar en el
Consejo Pontificio para las Comunicaciones Sociales. Durante su
amplia estancia en el Vaticano, ha sido Encargado para los
países de lengua hispana del Pontificio Consejo de las
Comunicaciones Sociales, Miembro del Comité Directivo para la
Comunicación Social en el Consejo de Europa, Cordinador General
de la Red Informática de la Iglesia en América Latina (RIIAL),
Presidente del Comité Científico del Instituto Europeo de
Estudios Políticos, Económicos y Sociales y Director de la
Filmoteca Vaticana.
Cuenta de él el
sacerdote Peio Sánchez que
fue “muy cercano
colaborador del cardenal Andrea M. Deskur, ayudó en retos
comunicativos como la primera retransmisión televisiva con la
apertura de la Puerta Santa en 1975 por el papa Pablo VI, el
evento de su muerte, la elección como papa del cardenal Albino
Luciani (Juan Pablo I), la muerte del mismo después de 33 días
de su elección y la elección a papa del cardenal Karol Wojtyla
(Juan Pablo II). Así mismo acompañó los años de enfermedad de
Mons. Deskur tras su ictus cerebral. Posteriormente con
el cardenal John P. Foley, durante la Asamblea Plenaria de la
Pontificia Comisión de 1985, en conformidad con los Estatutos de
la Filmoteca Vaticana, se le designa como Oficial Delegado de la
misma (vacante desde 1980)”.
Al frente de la filmoteca
vaticana, Mons. Planas creó un “Comité
Organizativo “ad hoc” para responder a la exigencia de una
investigación más profunda sobre el tema del cine como portador
de valores a las puertas del siglo XXI. Desde este comité Mons.
Enrique Planas realizó una importante tarea y la Iglesia pasa de
insistir en la calificación moral de las películas a señalar
aquellas de máximo interés”. La
última iniciativa que recordamos fue precisamente en Madrid en
octubre de 2006, con la celebración del Congreso Internacional
de Televisiones Católicas; allí “se
pudieron elaborar algunos criterios para la viabilidad de las
televisiones en un momento en que eclosionaba internet”.
Importante también su labor
durante el Jubilero del año 2000: él fue quien “contribuyó
a la preparación del Jubileo de los periodistas (del 1 al 4 de
junio) y, sobre todo, del Jubileo del Mundo del Espectáculo (del
15 al 17 de diciembre), convocando a directores y actores
significativos con los que mantuvo una cercana relación”,
continúa Peiso Sánchez. Igualmente, “contribuye
a la redacción de importantes documentos como “Ética en las
comunicaciones sociales”, “La Iglesia e Internet” y “Ética e
Internet” desde su experiencia en el lanzamiento de la RIIAL”.
Importante este último punto. “La Red
Informática para la Iglesia en América Latina es un buen ejemplo
de su tipo de trabajo eclesial abriendo redes de comunión y con
una mirada con gran visión de futuro. Hoy esta red es un ejemplo
eclesial de lo que es un servicio comunicativo con implicación
de las diócesis, las conferencias episcopales y toda la Iglesia
latinoamericana”.