Católicos
Cuenta con el permiso explícito de su Arzobispo

Un sacerdote de San Francisco, EE.UU., acaba con la presencia de 'monaguillas' en su parrroquia

Aumenta el número de fieles

El sacerdote Joseph Illo, que recientemente se ha hecho cargo de una parroquia en San Francisco, EE.UU., ha decidido que sólo los niños varones pueden ser monaguillos en el templo a su cargo. Esta declaración está despertando tanto críticas como elogios y llega en medio de un profundo debate dentro del catolicismo norteamericano en torno a la cuestión de si la Iglesia Católica se está "feminizando".

El sacerdote Joseph Illo, párroco de Estrella del Mar, defendió su decisión de prohibir las 'monaguillas' en un comunicado emitido el pasado lunes, afirmando que decidió hacer este cambio en noviembre, unos meses después de haberse convertido en pastor de su nueva parroquia. Illo citó dos razones que le llevaron a tomar esta decisión.

La primera, señaló, es que "los chicos suelen terminan perdiendo interés (en el servicio del altar) porque las chicas, en general, hacer un mejor trabajo." La segunda y más importante razón, precisó Illo, es que "el servicio del altar está intrínsecamente ligado al sacerdocio y sirve como programa de conexión con el seminario."

"Si la Iglesia Católica ordenara mujeres, las monaguillas tendrían sentido, pero el sacerdocio católico es un carisma masculino", explicó. "Nada despierta un mayor deseo de ser sacerdote que la hermandad que se genera entre los chicos jóvenes durante el servicio en el altar. A riesgo de generalizar, sospecho que los jóvenes que prestan servicios junto a mujeres jóvenes no sólo podrían distraerse del sacrificio de la Misa, y si no tal vez incluso de la misma vocación sacerdotal".

Los comentarios de Illo, que tiene un blog personal, enlazan con declaraciones realizadas recientemente por el cardenal Raymond Burke. "Se requiere una cierta disciplina masculina para servir como monaguillo a lado de un sacerdote, y la mayoría de los sacerdotes tienen sus primeras experiencias profundas de la liturgia como monaguillos", señaló Burke, para agregar que "el santuario se ha llenado de mujeres", y este hecho, según el cardenal, ha desalentado a los hombres de la participación en la vida eclesial. Burke también manifestó que la Iglesia Católica, a su juicio, se ha visto influenciada por "el movimiento feminista radical". 

"Debemos preguntarnos si no hemos aceptado inconscientemente los errores de la época actual; en concreto, que las diferencias entre los hombres y las mujeres no tendrían mayor significado espiritual que, por ejemplo, los arreglos de plomería '', bromeó el cardenal para, a continuación, plantear, ya en tono más serio, la siguiente pregunta: "¿Crees que María, la Madre de Dios, querría servir en la Misa o ser sacerdote, e incluso si hubiera sido así, ¿por qué Jesús no la incluyó en la Última Cena?".

Estrella del Mar, por el momento, es única parroquia de la Archidiócesis de San Francisco que ha prohibido las monaguillas, si bien el arzobispo Salvatore Cordileone ha dado permiso explícito a Illo para dar ese paso. Sólo en una diócesis de EE.UU. -en Lincoln, Nebraska- no está permitida la presencia de monaguillas en todas las iglesias, aunque un número considerable de parroquias individuales en otras diócesis de los EE.UU. ha tomado una decisión similar a la de Illo.

Varios feligreses de Estrella del Mar han dicho a medios locales que están molestos con la decisión de Illo, y algunos declararon que están dejando la parroquia. Nancy Bye, un madre que sirve de enlace entre la escuela y la parroquia, declaró a un periódico local que las denuncias sólo proceden de "unas pocas personas." "Creo que muchas de las personas que están molestas no son feligreses", comentó Bye. Illo también dijo que creía que la nueva decisión no sólo impulsaría las vocaciones al sacerdocio, sino que también acercaría a más parroquianos de los que está perdiendo. "Estamos experimentando un crecimiento general de fieles," indicó Illo.