ENTREVISTA

Fray Alonso García Araya, Comisario de Tierra Santa: “La Pasión de Cristo es actual, continúa en los cristianos de Oriente”


“Tierra Santa es llamada «Quinto Evangelio», aquel que nos recuerda al amor extremo del Señor Jesús”

Fray Alfonso García Araya, fraile franciscano de la Provincia franciscana de la Inmaculada Concepción, lleva seis años de Comisario de Tierra Santa.

–¿Por qué es necesario llevar a cabo una colecta por los Santos Lugares?

–Principalmente porque de aquella tierra, y de aquella Iglesia, hemos recibido la fe. Justo es que nosotros le sirvamos en sus necesidades como decía San Pablo a sus cristianos (Rom 15,27). La Iglesia de siempre, pero particularmente desde que el Papa León XIII, en 1887, instituyó la Jornada de oración y ayuda en favor de la Custodia de los Santos Lugares y de la Iglesia presente en el País de Jesús, ha pretendido que mostráramos, cada Viernes Santo, la comunión y la caridad de las iglesias de todo el mundo con la Iglesia madre de Jerusalén y de Tierra Santa.

–La situación de los cristianos de Oriente es muy difícil actualmente, ¿verdad?

–La minoría cristiana siempre ha tenido difícil su vida y sus actividades en aquella conflictiva tierra. Pero este año, siguiendo el hilo de los dramáticos acontecimientos que se están produciendo en todo el Oriente medio, se le ha dado a la Jornada del Viernes Santo el lema “Continúa la pasión”. Efectivamente se trata de tomar conciencia que la Pasión de Cristo es actual, que continúa en los cristianos de Oriente. Y que estamos llamados a estar junto a ellos en su pasión. Tierra Santa es llamada el “Quinto Evangelio”, aquel que nos recuerda el amor extremo del Señor Jesús, particularmente en la entrega de su vida en la Cruz. Pero la memoria se actualiza en la vida de hombres y mujeres por el simple hecho de vivir y, también, por el hecho de vivir su fe. De esta difícil realidad nos hablan muchos lugares de Tierra Santa y, más ampliamente de Oriente (Siria, Irak, Líbano, Gaza…), en los que nuestros hermanos cristianos sufren persecución y muerte.

–¿Cómo podemos estar junto a ellos?

–No hace mucho el Papa Francisco les decía a los cristianos de aquellas tierras: “Toda la Iglesia está con vosotros y os apoya, con gran afecto y estima. Vamos a seguir ayudándoos con la oración y otros medios disponible”. Y efectivamente, la Iglesia ha ido en su auxilio de diversas maneras, sobre todo con instituciones como “Cáritas”, “Ayuda a la Iglesia Necesitada” y “La Custodia de Tierra Santa”, presente en aquellas tierras. Pero qué podemos hacer en concreto: rezar por la paz en aquella tierra bendita, al tiempo que damos los auxilios necesarios para nuestros hermanos cristianos de Palestina, que en nuestro nombre cuidan los Lugares Santos. Es necesario ayudar a la antigua porción de la Iglesia que vive en Tierra Santa en la educación de sus niños y jóvenes, facilitando a los matrimonios y a las familias viviendas dignas, servicios sociales y puestos de trabajo; contribuyendo a la promoción de la mujer para que salga de la marginación; y ayudando a los ancianos que carecen de jubilación y sanidad. Es necesario además colaborar para mantener los santuarios que nos recuerdan el paso del Señor entre nosotros, encargo que realiza con abnegación y entrega secular la Orden franciscana. Y los que conocéis de cerca aquella realidad de Tierra Santa bueno es que apoyéis y animéis en vuestros lugares de residencia y celebración de la fe (vuestras Parroquias, Hermandades, Asociaciones…) la Jornada y Colecta Pontificia. Será una forma concreta de mostrar nuestra solicitud y preocupación por los Santos lugares y por la Iglesia presente en el País de Jesús, nuestro Señor.

–¿En qué consiste la custodia de Tierra Santa?

 –San Francisco y los franciscanos siempre han venerado ardientemente la encarnación de Jesús. Por esto, desde el principio, amaron y aman la Tierra Santa. Nuestro fundador, san Francisco de Asís, a comienzos del siglo XIII, movido por el amor a Cristo pobre y crucificado, se acercó hasta el Oriente Medio para “tocar” aquellos lugares que, hasta hoy, constituyen un testimonio insustituible de la revelación de Dios y de su amor por el hombre. Por esta especial veneración de los franciscanos al Evangelio de Jesús y a su encarnación, la Iglesia Católica nos encargó la misión de Custodiar los Lugares de nuestra Redención. Custodiar los Santos Lugares es algo muy concreto: animar los Santos Lugares con la liturgia para los peregrinos y para las iglesias locales, acoger a los peregrinos que vienen de todas partes del mundo para rezar y descansar. Junto a los Santos Lugares viven comunidades cristianas locales que están constituidas por parroquias de diversos ritos y tradiciones católicas (occidentales y orientales). Nosotros, los franciscanos, atendemos las parroquias que tienen su centro y sede en los Santos Lugares

–¿Y su labor como Delegado de Tierra Santa?

–Principalmente apoyar la presencia y la labor de la Iglesia y de los franciscanos de la Custodia, en aquella bendita tierra. En esta labor se empeña nuestra Comisaría en el territorio que tenemos encomendado: Extremadura, Andalucía Occidental y las Islas Canarias. Con agradecimiento tengo que decir que, en general, hay mucha colaboración y respuesta generosa en esta tarea eclesial.

(Iglesia en Plasencia)