ZENIT

El mundo visto desde Roma

Servicio diario - 03 de julio de 2015

La frase del día 3 de julio

"Nada es imposible para quien se fía de Dios y se entrega a Dios"
(Benedicto XVI)

 


El papa Francisco

Ecuador: una emisión postal para conmemorar la visita del papa Francisco
La imagen de Francisco se ha plasmado en un sello y una hoja souvenir. Se trata de una iniciativa de la Empresa Pública Correos del Ecuador y la Universidad Católica de Cuenca

¿Cuáles son los puntos de fuerza del Viaje del Papa en América Latina?
Entrevista al secretario de la Pontificia Comisión de América Latina, Guzmán Carriquiry, sobre las perspectivas del viaje pastoral

Sacerdote español en Bolivia: 'Estamos viviendo con entusiasmo la llegada de Francisco'
Unos mil misioneros de los 13 mil que están en en América Latina, esperan al Papa en Ecuador, Bolivia y Paraguay, junto a su gente 

El Papa pide al Espíritu que guíe hacia la unidad de los cristianos
Francisco participa en la 38 convocación italiana de la Renovación en el Espíritu en la plaza de San Pedro

Texto completo del discurso del Papa a la Renovación en el Espíritu
Francisco invita a la unidad en la diversidad y en la verdad, que es el mismo Jesús

Mundo

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Espiritualidad y oración

Beato Pier Giorgio Frassati - 4 de julio
«El hombre de las ocho bienaventuranzas. Joven atractivo, deportista, valeroso universitario comprometido con la fe e impulsor de acciones apostólicas entre sus compañeros. Es patrono oficial de las Jornadas mundiales de la juventud»


El papa Francisco


Ecuador: una emisión postal para conmemorar la visita del papa Francisco
 

La imagen de Francisco se ha plasmado en un sello y una hoja souvenir. Se trata de una iniciativa de la Empresa Pública Correos del Ecuador y la Universidad Católica de Cuenca

Por Redacción

Madrid, (ZENIT.org)

La imagen del papa Francisco aparecerá en una emisión postal conmemorativa con motivo de su próxima visita a Ecuador. Los sellos fueron presentados este martes por la Empresa Pública Correos del Ecuador y la Universidad Católica de Cuenca.

La emisión postal “S.S. Francisco Visita Ecuador 2015”, que ya se encuentra en circulación, consta de un sello impreso con tinta especial plateada y una hoja souvenir impresa en pan de plata, cuyo valor facial es de 3 y 5 dólares, respectivamente.

“El Ecuador abre sus puertas para recibir al papa Francisco, para que comparta junto a los ecuatorianos una maravillosa experiencia con el país que ama la vida”, expresó Ricardo Quiroga, gerente general de Correos del Ecuador, durante la presentación en la que se indicó que se imprimieron 100 mil sellos y 10 mil hojas souvenir que pueden ser adquiridas por la ciudadanía.

Por su parte, Adolfo Palomeque, director de Cultura y representante de la Universidad Católica de Cuenca, afirmó que el esfuerzo de las dos instituciones se ve representado en esta emisión postal que recorrerá el mundo.

Finalmente, el subsecretario de Asuntos Postales y Registro Civil del Ministerio de Telecomunicaciones y Sociedad de la Información, Adrián Ibarra, cerró el acto de presentación asegurando que “la llegada del papa Francisco al Ecuador es una oportunidad para reflexionar sobre la solidaridad humana, así como para demostrarle el amor y la alegría de este pueblo latinoamericano”.

El Pontífice aterrizará el próximo 5 de julio en Quito. Allí empezará una visita pastoral que le llevará también a Guayaquil y el Quinche. Su periplo por el país latinoamericano finalizará el 8 de julio, fecha en la que el Santo Padre partirá a Bolivia y después a Paraguay.

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¿Cuáles son los puntos de fuerza del Viaje del Papa en América Latina?
 

Entrevista al secretario de la Pontificia Comisión de América Latina, Guzmán Carriquiry, sobre las perspectivas del viaje pastoral

Por Sergio Mora

Ciudad del Vaticano, (ZENIT.org)

El papa Francisco inicia este domingo su viaje de una semana en tres países de América Latina. El profesor Guzmán Carriqury, secretario de la Pontificia Comisión para América Latina precisa en esta entrevista a ZENIT, los siete puntos de fuerza del viaje. Añade que Francisco encontrará  una Iglesia más unida y serena tras los tiempos de polarizaciones idelógicas de las ideologías. Y que el documento de Aparecida es convergente en América Latina de las más diversas sensibilidades, junto al pontificado del papa Francisco puede suscitar una gran convergencia en la comunión y la unidad de los católicos latinoamericanos. 

¿Qué llevará el Papa en este viaje por América Latina y cuáles los puntos de fuerza?
-- Prof. Carriquiry: En realidad se trata de las primeras visitas pastorales a los países latinoamericanos, porque Brasil, en la Jornada Mundial de la Juventud en Río de Janeiro en el 2013 fue un viaje apostólico y si bien se encontró con el episcopado brasileño y fue a Aparecida, la visita pastoral a dicho país va a ser otra cosa.

La segunda cosa: es el primer viaje en donde el Papa se va a dirigir a la gente en su propio idioma, en español, y si bien se ha gestionado bien con otros idiomas, esto le permitirá a Francisco una libertad y expresividad aún mayor.

Tercero: el nivel de popularidad de afecto, de credibilidad y de esperanza que suscita la figura del Papa en América Latina, en nuestros pueblos y en los Gobiernos es tal que vamos a asistir a un impresionante abrazo de amor y devoción del Papa con el pueblo y de los pueblos con el Papa.

Cuarto factor, y es de suma importancia, el Papa llevará en una mano “l’Evangelii Gaudium y en la otra la “Laudato sì”, que encuadran los contenidos fundamentales de sus enseñanzas.

Quinto elemento: el Papa no escoge a los grandes para iniciar su visita pastoral a América Latina, México, Brasil, Argentina, ni siquiera a los medianos, Chile, Colombia, Perú, etc., sino a las que personalmente llamo de 'periferias emergentes', porque en una dinámica geopolítica son periferias que han vivido una larga tradición de pobreza, desigualdades sociales, de inestabilidad políticas. Periferias sí, pero emergentes, porque en los últimos doce años, estos países han vivido un ritmo de crecimiento impresionante. Aún en el 2015, en condiciones desfavorables para América Latina, Ecuador prevé que crecerá un 4 por ciento y Bolivia y Paraguay sobre el 5 por ciento. Este intenso desarrollo económico ha sacado a estos países de cierta inmovilidad y, en especial, a las masas indígeno-campesinas de estos países, haciéndolas partícipes de la nueva ciudadanía y del proceso de desarrollo y de modernización. Han surgido nuevos sectores de clase media populares que han salido de la pobreza. Son países que se han puesto de pie, con dignidad, y han emprendido una marcha importante. ¡Que la hojarasca de cierto lenguaje ideológico, que  a veces suena algo anacronístico, no impida ver el bosque! Estos tres países que va a encontrar el Papa están en condiciones muy diversas de los países que treinta años atrás encontró Juan Pablo II.

En sexto lugar, el Papa sabe que desde las periferias se ve mejor el conjunto, la perspectiva de la totalidad. Él comenzó por las periferias de Europa: por Bosnia-Herzegovinia y Albania, ni por España, Francia o Alemania. De estas periferias emergentes el Papa va a tener muy presente el conjunto de América Latina. Y el conjunto de América Latina va a estar pendiente de este viaje del Papa. Entonces un discurso importantísimo sobre la fraternidad de los pueblos y naciones, de la cooperación y la integración, creo que va a ser muy fuerte en ocasión de este viaje.

"En séptimo lugar, diría que hay temas que están en el corazón pastoral del Papa y que serán recurrentes durante el viaje: la importancia de la  familia contra toda colonización ideológica, la evangelización de los jóvenes, la atención pastoral y solidaridad social con los indígenas-campèsinos, el diálogo con los líderes sociales por el bien común, la valorización de la religiosidad popular y la devoción mariana, el amor a los pobres y a los que sufren.

¿Cómo es la Iglesia que el Santo Padre va a encontrar ahora?
-- Prof. Carriquiry: El Papa va a encontrar a Iglesias en un estado muy diverso del que las encontró treinta años atrás Juan Pablo II. Entonces eran Iglesias muy tensas, polarizadas, a veces divididas, en donde los debates políticos e ideológicos relacionados con la teología de la liberación, estaban a la orden del día.

¿O sea?
-- Prof. Carriquiry: Hoy son Iglesias más serenas en la comunión, Iglesias que han vivido el legado y las orientaciones de la V conferencia general del episcopado en Aparecida, lanzadas en la misión continental, pero sobre todo interpeladas por lo que el papa Francisco está comunicando en su pontificado, especialmente a través de la Evangelii Gaudium. Es decir una Iglesia que mira a lo central y esencial del evangelio – el encuentro con Cristo, muerto y resucitado -, misionera en salida, misericordiosa sin exclusiones, llena de ternura y compasión, con amor de predilección por los pobres y los que sufren. Iglesias que se sienten interpeladas y con-movidas por este tiempo de gracias que estamos viviendo, que no se puede desperdiciar. Un tiempo favorable para la evangelización. No en vano el objetivo principal del viaje es custodiar, reavivar y reproponer ese precioso tesoro de los pueblos que es el patrimonio de la fe católica, tan arraigada en su historia, cultura y vida, expresado también en la religiosidad popular, en la devoción mariana, en los sentimientos de dignidad, solidaridad y esperanza que el cristianismo ha sembrado en los corazones. Por otra parte, son Iglesias llamadas a contribuir al desarrollo de estos países, estableciendo una mayor y mejor interlocución entre gobiernos y episcopados, custodiando siempre la libertad de la Iglesia. No es que falten problemas que suscitan preocupación: todavía marcadas situaciones de pobreza y desigualdad, el veneno del narcotráfico, a veces recaídas autoritarias y situaciones que merecerían ser tratadas con otra serenidad y ecuanimidad.

Aparecida retoma el desafío de luchar contra la pobreza pero en otra clave, ¿verdad?
-- Prof. Carriquiry: En el documento de Aparecida no se habla de la teología de la liberación, pero todas las que han sido intuiciones providenciales riquísimas de la teología de la liberación están allí presentes. Ya incorporadas en el magisterio de la Iglesia latinoamericana y diría incluso mundial. Y después de la caída de los muros y del socialismo real, lo que eran las infiltraciones ideológicas y apuestas políticas fallidas cayeron de por sí. Por ello Aparecida es un documento convergente en América Latina de las más diversas sensibilidades, por eso el pontificado del papa Francisco puede suscitar una gran convergencia en la comunión de los católicos latinoamericanos, atrayendo en una “cultura del encuentro” también a muchos de los que no pertenecen a la Iglesia.

El papa Francisco en la Laudato Sí, habla de proteger la tierra y no de adorarla... Una aclaración oportuna en este viaje
-- Prof. Carriquiry: Por supuesto, la Tierra es creación de Dios, la madre tierra no es una divinidad como se creía en las viejas cosmogonías indígenas. La creación hecha por Dios de alguna manera 'desacraliza la tierra', pero al mismo tiempo la confía a la sabia administración del hombre y no al dominio salvaje. Muchas expresiones que hoy se repiten sobre la Pachama, y cuando empiezan a aparecer los brujos y los chamanes, todo eso poco tiene que ver con las tradiciones de los indígenas precolombinos o de las religiones tradicionales, pero más bien son formas hoy en día mas bien artificiales que de alguna manera sirven para manifestar esta realidad pluricultural y plurinacional de algunos países.  

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Sacerdote español en Bolivia: 'Estamos viviendo con entusiasmo la llegada de Francisco'
 

Unos mil misioneros de los 13 mil que están en en América Latina, esperan al Papa en Ecuador, Bolivia y Paraguay, junto a su gente 

Por Redacción

Madrid, (ZENIT.org)

El sacerdote español Juan Carlos Devesa trabaja en la ciudad de El Alto, Bolivia, desde hace 18 años. Allí atiende una parroquia de 50 mil habitantes, es director espiritual del seminario y acompaña los primeros años de ministerio de los sacerdotes recién ordenados. Además, a través del Proyecto Burgosmarka, atiende junto a sus colaboradores a unos 200 niños para prevenir situaciones de riesgo. Su vida está junto al pueblo boliviano, también en este momento, en el que se preparan para recibir al papa Francisco, que visitará Bolivia en la segunda etapa de esta peregrinación que le llevará también a Ecuador y Paraguay.

En declaraciones a Obras Misionales Pontificias, el padre Devesa confiesa que están "viviendo con entusiasmo la llegada de Francisco", y explica las numerosas iniciativas que están llevando a cabo para preparar el encuentro con el Santo Padre.

"A nivel de la diócesis se han realizado festivales de música para escoger canciones que nos acompañen en el aeropuerto mientras la larga espera. También se ha realizado una carrera pedestre con meta en la nueva avenida Papa Francisco". Todas las parroquias están preparando la vendida del Pontífice desde las predicaciones, las catequesis, etc. 

Además, esta semana están "saliendo a las ferias (mercados al aire libre) para orar públicamente y bendecir a la gente con el atrayente agua bendita".  El misionero burgalés añade que "el sábado habrá dos vigilias de oración: una en una plaza pública dirigida principalmente a los jóvenes; y la otra en una de las capillas con adoración al Santísimo".

También en Ecuador y Paraguay se han preparado con vigilias de oración, según relatan respectivamente las misioneras Inmaculada Gamarra e Irene Alonso. Ambas lamentan perderse la visita del Papa, con quien prácticamente se cruzarán en el aeropuerto, pues las dos tenían previsto desde hace tiempo su viaje a España para visitar a la familia, una en Logroño y otra en León. Pero tanto sor Inmaculada, escolapia, como sor Irene, misionera Esclava del Inmaculado Corazón de María, han podido vivir el ambiente previo a la llegada de Francisco, tanto en Ecuador como en Paraguay.

En la oración que los católicos de Ecuador están rezando por el Pontífice, piden al "Padre Dios" que "la visita de tu servidor, el Papa Francisco, fortalecerá en nuestros corazones la alegría de ser cristianos, discípulos misioneros de tu Hijo Jesucristo e hijos de su Iglesia, nuestra Madre". Mientras tanto, miles de católicos paraguayos participaron en la Vigilia de oración que tuvo lugar el 5 de junio en el Estadio "Defensores del Chaco". Después de entonar el Himno Nacional de Paraguay, comenzó una Eucaristía que animó el llamado "Coro Papal", en el que intervienen unas 500 voces.

América es el continente con mayor presencia de misioneros españoles, casi el 70 por ciento de los 13 mil actuales. De ellos, un millar trabajan en los países que el Santo Padre visitará del 5 al 13 de julio: 487 en Bolivia, 409 en Ecuador y 189 en Paraguay.

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El Papa pide al Espíritu que guíe hacia la unidad de los cristianos
 

Francisco participa en la 38 convocación italiana de la Renovación en el Espíritu en la plaza de San Pedro

Por Sergio Mora

Ciudad del Vaticano, (ZENIT.org)

El papa Francisco se ha reunido este viernes por la tarde en la Plaza de San Pedro con unos treinta mil miembros de la Renovación en el Espíritu Santo. El encuentro ha tenido lugar con motivo de la 38 Convención Nacional de esta realidad eclesial en Italia, que ha comenzado a las 16 horas con un gesto ecuménico titulado “Vías de unidad y de paz – Voces en oración por los mártires de hoy y por un ecumenismo espiritual”. 

En presencia del cardenal Leonardo Sandri, prefecto de la Congregación para las Iglesias Orientales, del cardenal Kurt Koch, presidente del Consejo Pontificio para la Promoción de la Unidad de los Cristianos, del cardenal Angelo Bagnasco, presidente de la Conferencia Episcopal Italiana, del obispo armeno-católico de Alepo, monseñor Boutros Marayati y de otros importantes representantes de la Iglesia, Salvatore Martínez, presidente de la Renovación en el Espíritu de Italia, junto a los delegados ortodoxos y pentecostales han sido testigos de un momento de oración en respuesta a la causa del “ecumenismo de la sangre” invocado frecuentemente por el Santo Padre. 

Antes de que llegara el Pontífice, el tenor Andrea Bocelli ha cantado el Panis Angélicus en el concierto-oración, que ha contado también con la actuación de la artista israelí Noa y de líderes de adoración como el padre Moen de los Estados Unidos o Darlene Zschech de Australia. Dirigiéndose a la multitud congregada, el cantante italiano ha afirmado que “sin Dios la vida sería una tragedia anunciada” cuando en realidad es “un camino luminoso”.

Una vez en el atrio de la Basílica vaticana, el Papa ha elevado la siguiente oración: “Padre, envía al Espíritu Santo. Él nos guiará a la unidad, él es el que nos da los carismas, el que hace la diferencia en la Iglesia”. “El Espíritu Santo --ha añadido-- nos recuerde lo que Jesús dijo y enseñó”.  

“En esta Iglesia que es tuya, que no es nuestra, la historia nos dividió”, ha reconocido el Santo Padre. De ahí la plegaria a Jesús: “¡Ayúdanos a ir por el camino de la unidad o de esta diversidad reconciliada. Señor, que siempre haces lo que nos prometiste, danos la unidad de todos los cristianos”.

Así, ha llegado el turno de un magistrado italiano que participó en la lucha contra la mafia, y ha asegurado visiblemente emocionado que sobrevivió de milagro. Mirando a Francisco, ha aseverado que “la justicia sin misericordia es la peor injusticia, aunque la otra persona sea culpable”.

Por su parte, el joven Hugo, que fue dejado por su madre debido a las drogas y sufrió el abandono de su padre, ha recordado como iba a la parroquia para pasar el tiempo, hasta que escucho un día a un grupo de la Renovación que cantaban, y descubrió la oración. Jesús y su palabra le hicieron comprender que su existencia tiene una finalidad, ha subrayado.

Tras escuchar estos conmovedores testimonios, el Pontífice se ha dirigido a todos los presentes, que se han tenido que proteger de la lluvia, cubriendo la Plaza de paraguas.

Durante su intervención de más de 30 minutos, el Santo Padre ha indicado que la Renovación en el Espíritu no es exactamente un movimiento, porque no tiene un fundador y porque tiene diversas particularidades entre quienes lo integran. No le pertenece a nadie, ni a nosotros. Es del Espíritu y Jesús es el Señor, ha enfatizado.

Remontándose a los orígenes de esta realidad eclesial,  ha subrayado como el papa Pablo VI en la misa del lunes de Pentecostés de 1965 agradeció al cardenal Suenens con estas palabras: “En nombre del Señor le agradezco por haber llevado a la Renovación Carismática al corazón de la Iglesia”.

Les recordó que nadie puede decir "nosotros somos la corriente denominada movimiento Carismático Católico, ustedes no", porque el Espíritu Santo sopla donde quiere, cuando quiere, y como quiere".

El Santo Padre advirtió también de la tentación de querer ser líder, cuando "lo único insustituible es el Espíritu Santo y Jesús es el único Señor". Y también de reducirse a una ONG o de inflarse como pavos, porque el poder lleva a la vanidad. 

Por otra parte, al tratar el “ecumenismo de la sangre”, Francisco ha recordado que los enemigos de los cristianos no le preguntan a uno si es de esta o este otra confesión cristiana, basta que sea cristiano para que lo martiricen. 

En esta línea, ha tenido unas palabras de recuerdo para los cristianos coptos que fueron decapitados en la playa de Libia, y que le rezaban a Jesús. Ellos son nuestros mártires, ha aseverado. Y ha invitado a todos a trabajar en congresos con otras confesiones y también con los sin hogar.

“Vayan y prediquen la novedad que nos dio Jesús”, ha dicho el Papa al dar la bendición final, “prediquen a los pobres a los marginados, a todos”.  “Que el Señor les acompañe en esta misión, siempre con la Biblia en la mano o el Evangelio en el bolsillo”, ha concluido.

Leer también: Texto completo del discurso del Papa a la Renovación en el Espíritu

 

 

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Texto completo del discurso del Papa a la Renovación en el Espíritu
 

Francisco invita a la unidad en la diversidad y en la verdad, que es el mismo Jesús

Por Redacción

Ciudad del Vaticano, (ZENIT.org)

Queridos hermanos y hermanas, buenas tardes y bienvenidos.

También el agua sea bienvenida, porque la hizo el Señor. Aprecio tanto la respuesta que han dado a mi invitación que les hice en el mes de enero pasado para venir aquí en la plaza de San Pedro.

Gracias por esta entusiasta y calurosa respuesta. El año pasado en el estadio compartí con los presentes algunas reflexiones que me gustaría recordar hoy, porque siempre es importante recordar. La memoria. La identidad de movimiento carismático católico, de la cual nació la asociación Renovación en el Espíritu. Lo haré con las palabras del cardenal Leon joseph Suenens, gran protector de la Renovación carismática, así como lo describe en el segundo libro de sus memorias.

En primer lugar en este libro recuerda la extraordinaria figura de una mujer, que tanto hizo por el movimiento carismático. Era su colaboradora que tenía la confianza y afecto del papa Pablo VI. Me refiero a Veronica O'brien, que le pidió al cardenal que vaya a Estados Unidos para ver que es lo que estaba sucediendo, para ver con sus ojos lo que consideraba obra del Espíritu Santo.

Fue entonces que el cardenal Suenens conoció la renovación carismática que definió “un flujo de gracia”, y fue la persona clave para mantenerlo en la Iglesia.

El papa Pablo VI en la misa del lunes de Pentecostés de 1965 le agradeció con estas palabras: “En nombre del Señor le agradezco por haber llevado a la Renovación Carismática al corazón de la Iglesia”. No es una novedad de algunos años atrás. El movimiento carismático en la Iglesia tiene esta larga historia, y en la homilía de esa misma misa el cardenal dijo: “Pueda el movimiento carismático desaparecerse como tal y volverse en una gracia pentecostal para toda la Iglesia”. Para ser fiel a sus orígenes el río tiene que perderse en el océano, tiene que perderse en el océano.

Si el río se queda quieto se corrompe. Si la Renovación, esta corriente de gracia no termina en el océano de Dios, en el amor de Dios, trabaja para sí misma. Y esto no es de Jesucristo, esto es del maligno, del padre de la mentira.

La Renovación viene de Dios y va a Dios. El papa Pablo VI bendijo esto. El cardenal siguió indicando que el primer error que es necesario evitar es el de incluir a la Renovación carismática en la categoría de movimiento, porque no es un movimiento especial. Renovación no es un movimiento en el sentido sociológico común, no tiene fundadores, no es homogéneo e incluye a una gran variedad de realidades, es una corriente de gracia, un soplo renovado del Espíritu Santo a todos los miembros de la Iglesia, también para laicos, religiosos y obispos.

Es un desafío para todos nosotros. Uno no hace parte de la Renovación, mas bien la Renovación se vuelve parte de nosotros si recibimos la gracia que nos ofrece. El cardenal Suenens habla de la obra soberana del Espíritu que sin fundadores humanos suscitó esta corriente de gracia en 1967. Hombres y mujeres renovados que después de haber recibido la gracia del bautismo en el Espíritu, como fruto de esta gracia, han dado vida a asociaciones, comunidades de alianza, escuelas de formación, escuelas de evangelización, congregaciones religiosas, comunidades ecuménicas, comunidades para ayudar a los necesitados y los pobres.

Yo mismo he ido a la una comunidad coreana en mi viaje y también les visité en las Filipinas. Esta corriente de gracia tiene dos organismos internacionales reconocidos por la Santa Sede, que están a su servicio y al servicio de todas sus expresiones en el mundo, el Iccrs y la Fraternidad católica. Esta es un poco la historia, la raíz.

En el Estadio el año pasado, hablé de la unidad en la diversidad, he dado el ejemplo de la orquesta. En la Evangelii Gaudium, he hablado de la esfera y del poliedro. No basta hablar de unidad, no es una unidad cualquiera, no es una uniformidad. Dicho así se puede entender como la unidad de una esfera en donde todos los puntos son equidistantes del centro y no hay diferencias entre un punto y otro. El modelo es el poliedro que demuestra la confluencia de todas las partes que en este mantienen su originalidad. Estos son los carismas, en la unidad, pero en la propia diversidad. Unidad en la diversidad, la distinción es importante porque estamos hablando de la obra del Espíritu Santo, no de la nuestra. Unidad en la diversidad de expresión, de todas las realidades que el Espíritu Santo ha querido manifestar. También es necesario recordar que toda esta unidad es más que la parte y la parte no se puede atribuir ser el todo.

No se puede decir nosotros somos la corriente denominada Movimiento Carismático Católico, ustedes no. Esto no se puede decir, por favor hermanos esto no es así, no viene del Espíritu, porque el Espíritu Santo sopla donde quiere, cuando quiere, y como quiere. Unidad en la diversidad y en la verdad, que es el mismo Jesús.

¿Cuál es el signo común de quienes han renacido de esta corriente de gracia?, convertirse en hombres y mujeres nuevos, este es el bautismo en el Espíritu. Les pido que lean Juan 3, versículos 7,8 Jesús a Nicodemo.

Hay otro punto que es muy importante esclarecer en esta corriente de gracia, los que guían. Existe hermanos y hermanas, una gran tentación para el líder. Lo repito, prefiero el término servidor, sirven, y esta tentación para los servidores viene del demonio. Es la tentación de creerse indispensables, cualquiera sea el cargo. El demonio los lleva a querer ser quienes mandan, quienes están en el centro. Y así, así, paso a paso, se resbalan en el autoritarismo, en el personalismo, y no dejan vivir a las comunidades renovadas en el Espíritu. Estas tentaciones hacen que sea la eterna en la que ellos se consideran insustituibles, posición que siempre tiene alguna forma de poder o de dominio sobre los otros. Tengamos ésto claro. Lo único insustituible es el Espíritu Santo y Jesús es el único Señor. Les pregunto, ¿Quién es el único insustituible en la Iglesia?, es el Espíritu Santo. ¿Y quién es el único Señor? (el público responde: Jesús). Digamos que Jesús es el Señor, fuerte... (el público: Jesús es el Señor) No hay otros. En este sentido se registraron casos tristes, hay que poner un tiempo limitado a los encargos, que en realidad son servicios. Un servicio importante de los líderes laicos es hacer crecer y madurar espiritualmente y pastoralmente a quienes tomarán su cargo al terminar su servicio. Todos los servicios en la Iglesia es conveniente que tengan un vencimiento. No hay líderes vitalicios en la Iglesia, esto sucede en algunos países donde existe la dictadura. “Aprendan de mi que soy manso y humilde de Corazón”, dice Jesús.

Esta tentación del diablo hace pasar de servidor a patrón, uno se apropia de esa comunidad, de ese grupo. Esa tentación hace resbalar hacia la vanidad. Hay tanta gente, lo hemos escuchado, estos dos testimonios, el del matrimonio, el de Hugo. Cuantas tentaciones llevan a hacer sufrir a una comunidad y limitan hacer el bien, y se vuelven una organización, como si fueran una ONG. El poder nos lleva, disculpen si lo digo, cuantos líderes se hinchan como pavos, y el poder lleva a la vanidad. Uno se siente capaz de hacer cualquier cosa, se puede resbalar en los negocios, porque el diablo siempre entra por las billeteras, esta es la puerta de entrada. 

Otra cosa son los fundadores que han recibido del Espíritu Santo el carisma de fundación. Ellos por haberlo recibido tienen la obligación de cuidarlo, de hacerlo madurar, en sus comunidades, asociaciones. Los fundadores son por la vida, o sea quienes inspiran y dan la inspiración, pero dejan que las cosas vayan adelante. Conocí en Buenos Aires a un buen fundador, que a un cierto punto se volvió espontáneamente el asesor, y dejaba que los líderes fueran los otros. Esta corriente de gracia nos lleva hacia adelante, en un camino de Iglesia que en Italia ha dado mucho fruto. Les animo a ir hacia adelante, y pido vuestra importante contribución, en particular para compartir con todos en la Iglesia el bautismo que han recibido.

Si han vivido esta experiencia, compártanla en la Iglesia y este es el servicio más importante que se pueda dar a todos en la Iglesia. Ayudar al pueblo de Dios al encuentro personal con Jesucristo, que nos cambia en hombres y mujeres nuevos. En pequeños grupos humildes pero eficaces, porque es el Espíritu el que opera. No apuntar tanto a las grandes concentraciones que terminan allí, sino a las relaciones artesanales que derivan del testimonio cotidiano en la familia, en el trabajo, en la vida social, en la parroquia, con los grupos de oración, con todos, con todos.

Y aquí les pido que tomen la iniciativa para crear lazos de amistad y de confianza con los obispos, quienes tienen la responsabilidad pastoral de guiar al cuerpo de Cristo, incluido a la Renovación carismática. Comiencen a tomar las iniciativas necesarias para que todas las realidades carismáticas italianas nacidas de la corriente de gracia puedan vincularse con estas relaciones de confianza y de cooperación directamente con los obispos allí donde se encuentran.

Hay otro signo fuerte del Espíritu en la Renovación carismática: la búsqueda de la unidad del cuerpo de Cristo. Porque los carismáticos tienen una gracia especial para rezar y trabajar en favor de la unidad de los cristianos. Porque la corriente de gracia cruza a todas las Iglesias cristianas. La unidad de los cristianos es obra del Espíritu Santo, y tenemos que rezar juntos. El ecumenismo espiritual, el ecumenismo de la oración.

Pero padre, ¿yo puedo rezar con un evangélico, con un ortodoxo, con un luterano? ¡Debes, debes!, porque han recibido el mismo bautismo. Todos nosotros hemos recibido el mismo bautismo. Todos nosotros hemos recibido al mismo bautismo. Todos nosotros vamos en el camino de Jesús. Todos nosotros queremos a Jesús. Nosotros hemos hecho estas divisiones en la historia. Por tantos motivos, pero no buenos, pero ahora es el tiempo en el que el Espíritu nos hace pensar que estas divisiones no van, que estas divisiones son un anti-testimono, para ir juntos.

El ecumenismo espiritual, el ecumenismo de la oración, el ecumenismo del trabajo, de la caridad juntos, de la lectura de la Biblia juntos. Ir juntos hacia la unidad.

¿Pero padre, para esto tenemos que firmar un documento? ¡Déjate ir adelante con el Espíritu Santo!, reza, trabaja, ama, comparte y después el Espíritu hará el resto. Esta corriente de gracia cruza a todas las confesiones cristianas, a todas las que creen en Cristo. Unidad antes de todo en la oración. El trabajo por la unidad de los cristianos comienza con la oración. Rezar juntos. Unidad porque la sangre de los mártires de hoy nos hace uno.

Está el ecumenismo de la sangre. Sabemos que aquellos que odian a Jesucristo, cuando asesinan a un cristiano no le preguntan ¿Tú eres luterano, ortodoxo, evangélico, bautista, metodista? ¡Tú eres cristiano! Y le cortan la cabeza. Estos no confunden, saben que hay una raíz allí, que nos da la vida a todos y que es Jesucristo, y que está el Espíritu Santo que nos lleva a la unidad.

Quienes odian a Jesucristo, guiados por el maligno no se equivocan, saben. Por ello asesinan sin hacer preguntas. Y esto es algo que les confío. Quizás les conté esto, es una historia verdadera. En una ciudad de Alemania, en Hamburgo, había un párroco que estudiaba los documentos para llevar hacia adelante la causa de beatificación de un sacerdote asesinado, guillotinado por el nazismo, por haber hecho catecismo a los niños.

Y mientras estudiaba descubrió que después de él fue guillotinado, cinco minutos después, un pastor luterano por el mismo motivo, y la sangre de los dos se mezcló. Ambos fueron mártires, es el ecumenismo de la sangre. Si el enemigo nos une en la muerte, ¿quienes somos nosotros para dividirnos en la vida? Dejemos entrar al Espíritu para ir adelante todos juntos.

Pero hay diferencias. Dejémoslas de lado y caminemos con lo que tenemos en común, que es mucho, la Santísima Trinidad y el Bautismo, y vamos adelante con la fuerza del Espíritu Santo.

Pocos meses atrás, esos 23 egipcios coptos que fueron degollados en una playa de Libia, en ese momento decían el nombre de Jesús. Estos...
-pero no, no son católicos.
-Son cristianos, son hermanos, son nuestros mártires. Es el ecumenismo de la sangre. Hace cincuenta años el beato Pablo VI en la canonización de los jóvenes de Uganda hizo referencia que por el mismo motivo habían derramado su sangre sus hermanos catequistas anglicanos, que eran cristianos, y eran mártires. Disculpen y no se escandalicen, son nuestros mártires porque han dado la vida por Cristo, y esto es el ecumenismo de la sangre.

Rezar, la memoria de nuestros mártires comunes, unidad en el trabajo junto por los pobres y necesitados que necesitan también el bautismo en el Espíritu Santo, sería hermoso organizar seminarios de vida en el Espíritu junto a otras realidades carismáticas cristianas, con los hermanos y hermanas que viven por la calle. También ellos tienen el Espíritu por dentro que empuja para que alguien les abra la puerta desde fuera.

Terminó la lluvia, parece, terminó el calor. El Señor es bueno, nos dio primero el calor, después una buena ducha y está con nosotros. Dejemos que nos guíe el Espíritu Santo, esta corriente de gracia que busca siempre la unidad. Nadie es el patrón. Un solo Señor, ¿quién es? (el público: Jesús) Jesús es el Señor. Les recuerdo, que la renovación carismática es una gracia para toda la Iglesia. ¿De acuerdo? Si alguien no está de acuerdo que levante la mano. De acuerdo. La unidad en la diversidad del Espíritu, no cualquier unidad, la esfera y el poliedro, acuérdense bien de esto. La experiencia común del bautismo del Espíritu Santo es el vínculo fraterno y directo con el obispo diocesano, porque el todo es más que la parte. Después, unidad del cuerpo de Cristo, rezar junto con los otros cristianos, trabajar juntos con los otros cristianos por los pobres y necesitados, porque todos hemos tenido el mismo bautismo.

Organizar seminarios de vida en el Espíritu para los hermanos que viven por la calle y por los hermanos marginados por tantos sufrimientos de la vida. Me permito de recordar el testimonio de Hugo, el Señor lo ha llamado justamente porque el Espíritu Santo le hizo la alegría de seguir a Jesús. Organizar seminarios del Espíritu Santo para los que viven por la calle. Y después si el Señor nos da vida les espero a todos juntos en el Iccrs y en la Fraternidad católica que ya están organizando. A todos quienes quieran venir en el 2017. No es tan lejos. Aquí en la plaza de San Pedro para celebrar el jubileo de oro de esta corriente de gracia. Una oportunidad para la Iglesia como dijo el beato Pablo VI en la basílica de San Pedro en 1965. Nos reuniremos para dar gracias al Espíritu Santo por el don de esta corriente de gracia que es para la Iglesia y para el mundo. Y para celebrar las maravillas que el Espíritu Santo ha hecho durante estos 50 años cambiando la vida de millones de cristianos. Nuevamente gracias por haber respondido con alegría a mi invitación. Que Jesús les bendiga y la Virgen santa les proteja. Y no se olviden de rezar por mí, porque lo necesito. Gracias.

(Texto traducido y transcrito del audio por ZENIT)

 

 

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Mundo


El ISIS crucifica en Siria a una treintena de personas
 

Fueron castigadas por no respetar el Ramadán. La violencia es clave para el control de los territorios del Califato islámico

Por Redacción

Madrid, (ZENIT.org)

Los milicianos del autoproclamado Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés) crucificaron este jueves en Siria a ocho personas por no cumplir el ayuno del mes de Ramadán. Las ocho víctimas mortales fueron pendidas de una valla en un cuartel de la “hisbah”, el cuerpo policial del grupo yihadista, en la ciudad de al-Mayadeen, uno de sus bastiones en la provincia nororiental de Deir al Zur.

Además, los fundamentalistas colgaron del cuello de los fallecidos un cartel con el mensaje “crucifixión durante un día y 70 latigazos por romper el ayuno del Ramadán”, y permitieron a varios menores de edad que se habían congregado en el lugar burlarse de ellos.

En los últimos días, el ISIS ha aplicado castigos similares a varios ciudadanos por la misma acusación, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.

Así, la ONG reseñó que el miércoles fueron crucificadas otras ocho personas en al-Mayadeen. Y entre el lunes y el martes, 17 personas más sufrieron la misma pena por haberse saltado el ayuno en la citada localidad y en un monte próximo a la población de Basira, también en la provincia de Deir al Zur.

Además, el Observatorio denunció que esta semana los yihadistas degollaron por primera vez a mujeres. El ISIS las había asesinado anteriormente por delitos como el adulterio, mediante la lapidación o pelotones de fusilamiento.

El lunes, los radicales decapitaron a una mujer siria y a su marido acusados de brujería. El matrimonio fue ajusticiado con una espada en uno de los barrios controlados por el grupo terrorista en la ciudad de Deir al Zur. El domingo, otra pareja fue asesinada de forma similar por el mismo cargo en al-Mayadeen.

El 29 de junio se cumplió un año de la proclamación de un califato por parte de los milicianos liderados por Abu Bakr al-Baghdadi, que han tomado amplias partes de Siria e Irak.

En la estrategia de los islamistas para mantener el control de los territorios bajo su dominio, la violencia juega un papel clave. De ahí su afán por inspirar temor con ejecuciones públicas, decapitaciones, crucifixiones o la venta de mujeres en mercados para que sirvan como esclavas sexuales.

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ONU: el Consejo de Derechos Humanos rechaza la relación entre terrorismo y religión
 

Pide al régimen de Bachar al-Assad y a los grupos terroristas que permitan la ayuda humanitaria en Siria

Por Redacción

Madrid, (ZENIT.org)

El Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas adoptó este jueves una nueva resolución sobre el conflicto sirio, inmerso en su quinto año de violencia, que condena los actos terroristas y rechaza que los mismos sean asociados a ninguna religión, nación y civilización.

Con 29 votos a favor, 12 abstenciones y 6 votos en contra --entre ellos Cuba, China, Rusia y Venezuela-- los 47 países miembros que conforman el Consejo de Derechos Humanos piden tanto al régimen de Bachar al-Assad como a los diferentes grupos terroristas que permitan el acceso de asistencia humanitaria al país.

Así, la resolución “condena enérgicamente las vulneraciones manifiestas, continuas, generalizadas y sistemáticas de los derechos humanos cometidas por las autoridades sirias y las milicias progubernamentales”.

Dicha condena incluye también a los combatientes terroristas extranjeros y las organizaciones extranjeras que luchan en nombre del régimen sirio, en particular Hizbolá, Asaib Ahl al-Haqq y Liwa Abu-l-Fadl al-Abbas.

El texto denuncia además el uso de armas pesadas; municiones de racimo y bombardeos aéreos, incluido el uso indiscriminado de misiles y bombas de barril; el bombardeo de instalaciones médicas; y la práctica de hacer padecer hambre a la población civil.

En esta misma línea, la resolución “condena enérgicamente la utilización reiterada de armas químicas en la República Árabe Siria, en particular el gas cloro, que está prohibido por el derecho internacional, y exige que la República Árabe Siria respete plenamente sus obligaciones internacionales, incluido el requisito de declarar su programa en su totalidad y eliminarlo por completo”.

Con respecto a los grupos armados que luchan contra el régimen de Al Assad, el documento de la ONU reprueba los actos terroristas en general y, en particular, los actos violentos cometidos contra los civiles por el denominado Estado Islámico, el Frente al-Nusra y otros grupos extremistas.

La resolución recuerda que es esencial la asunción de responsabilidades y pone de relieve la necesidad de garantizar que todos los responsables de vulneraciones del derecho internacional humanitario rindan cuentas de sus actos, “por conducto de mecanismos nacionales o internacionales de justicia penal apropiados, imparciales e independientes”. Específicamente, el texto destaca la importante función que puede desempeñar a ese respecto la Corte Penal Internacional.

Por otra parte, el texto deplora el deterioro de la situación humanitaria y “exige a las autoridades sirias que faciliten, y a todas las demás partes en el conflicto que no obstruyan, el acceso total, inmediato y seguro de las Naciones Unidas y los agentes humanitarios, incluso a las zonas sitiadas”.

Finalmente, pide a la comunidad internacional que preste apoyo financiero urgente para que los países de acogida de refugiados --esencialmente los limítrofes-- puedan responder a las necesidades humanitarias cada vez mayores.

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El Gobierno de España aprueba el nuevo registro de entidades religiosas
 

El Consejo de Ministros da luz verde también a un real decreto para regular la declaración de 'notorio arraigo' de las confesiones en este país

Por Redacción

Madrid, (ZENIT.org)

El Consejo de Ministros ha aprobado este viernes dos reales decretos para actualizar el registro de entidades religiosas y regular la declaración de "notorio arraigo" de las confesiones en España.

A partir de ahora, se establecen cinco requisitos obligados para obtener la declaración de "notorio arraigo", entre los que se exige una antigüedad de 30 años en el país, aunque serán 15 años si se puede demostrar una implantación en el extranjero de al menos 60 años.

También se requiere un número mínimo de entidades y lugares de culto, además de acreditar el ámbito territorial de actuación, una estructura organizativa interna adecuada y la presencia activa en la sociedad española.

El otro real decreto aprobado esta mañana regula el registro de entidades religiosas para actualizarlo con una mejor definición de las entidades que pueden acceder al mismo.

En la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha explicado que el real decreto que regula la declaración de "notorio arraigo" de las confesiones religiosas en España establece los requisitos precisos y el procedimiento público "con todas las garantías" para solicitar y obtener este reconocimiento.

Por su parte, el ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha señalado que el objetivo de los dos reales decretos es mejorar la gestión de la pluralidad de confesiones religiosas existentes en el Estado español, avanzar en la seguridad jurídica en esta materia y actualizar una normativa de los años ochenta, con el consenso de las confesiones religiosas.

A partir de ahora, las solicitudes para obtener la declaración de "notorio arraigo" se dirigirán a la Subdirección General de Relaciones con las Confesiones y la Comisión Asesora de Libertad Religiosa emitirá un informe preceptivo, no vinculante, que será resuelto por el ministro de Justicia.

El titular de Justicia ha detallado además que el registro de confesiones religiosas es un instrumento administrativo que existe desde 1981, pero que no había sido actualizado hasta la fecha.

Catalá ha explicado que, a partir de este momento, el registro será telemático, se actualizará cada dos años y exigirá la inscripción de los ministros de culto de las distintas confesiones religiosas.

En España, ha indicado el ministro, el 59 por ciento de los ciudadanos se declara católicos. Este hecho ha generado acuerdos internacionales entre el Estado español y la Iglesia católica.

En el caso de la Iglesia Evangélica (con 1,5 millones de personas que profesan este culto), los judíos (45 mil personas) y los musulmanes (2 millones de personas) tienen acuerdos de cooperación con el Estado.

Otro grupo de confesiones religiosas tienen reconocido por el Estado el notorio arraigo: la Iglesia Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (2003), los Testigos de Jehová (2006), el Budismo (2007) y la Iglesia Ortodoxa (2010).

En el registro de entidades religiosas del Ministerio de Justicia están inscritas casi 20 mil entidades de diversa índole.

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Espiritualidad y oración


Beato Pier Giorgio Frassati - 4 de julio
 

«El hombre de las ocho bienaventuranzas. Joven atractivo, deportista, valeroso universitario comprometido con la fe e impulsor de acciones apostólicas entre sus compañeros. Es patrono oficial de las Jornadas mundiales de la juventud»

Por Isabel Orellana Vilches

Madrid, (ZENIT.org)

Pier Giorgio dio al mundo, y en particular a los jóvenes, una magistral lección que nunca se debería olvidar: «Vivir sin fe, sin un patrimonio que defender, sin mantener una lucha por la Verdad no es vivir, sino ir tirando... Incluso a través de cada desilusión tenemos que recordar que somos los únicos que poseemos la verdad». Previamente reconoció la gracia que había recibido al ser católico. Fue su mayor heredad, y no se la legó su acaudalada familia de Turín. 

Nació el 6 de abril de 1901. Su madre Adelaide Ametis era pintora, y su padre, Alfredo Frassati, agnóstico declarado, fue senador y embajador en Alemania, además de fundador del prestigioso periódico La Stampa, cuya tendencia no era precisamente afín a la Iglesia. Y aunque su entorno no proporcionó al beato una formación en la fe anclada en la vivencia, siguió los dictados de su corazón. No miró para otro lado, ni alojó en cómodo vacío la íntima persuasión que le instaba a buscar lo máximo, sino que se dispuso a vivir el evangelio con todas sus consecuencias. Su hermana y él se formaron en un centro estatal y en el colegio de los jesuitas. En éste último Pier Giorgio se vinculó a la Congregación Mariana y al Apostolado de la Oración. A los 17 años se integró en la Sociedad de San Vicente de Paúl, y a los 19 se comprometió con la Federación de Estudiantes Católicos y con la Acción Católica.

Se matriculó en la Politécnica de Turín en la carrera de ingeniería de minas. Se había convertido en un joven de finas facciones, con innegable atractivo, un consumado montañero que hacía gala de su gran sentido del humor, apasionado e idealista, inclinado a defender siempre a los débiles; ni siquiera sus estudios pusieron coto a las misericordiosas acciones que venía realizando anteriormente. La universidad era entonces caldo de cultivo para tendencias dispares; un entramado complejo en el que fácilmente germinaban conflictos ideológicos y políticos, dejando a la religión fuera de concurso.

En este ambiente, gravemente enrarecido y hostil a la fe, organizó acciones para despertar la dormida conciencia espiritual de sus compañeros. Y se le ocurrió invitarlos a una adoración nocturna. Los extremistas de fanáticos modales arrancaron los carteles en su presencia. La impresión ante ese signo de intolerancia le acompañaría hasta el fin. No se desanimó. No podía hacerlo porque se había abrazado a Cristo encarnando con su vida el evangelio. Estaba entregado a la causa de auxiliar a los enfermos, atender a los huérfanos y a los que regresaban malheridos en el cuerpo y en el alma de la sangrienta guerra mundial. Era catequista en un barrio marginal en el que, además de formar a los niños, defendía al religioso dominico que estaba al frente del centro donde se reunían de las notorias agresiones verbales y físicas que le infligían ciertos comunistas. Era frecuente verle por las calles acarreando los humildes enseres de los pobres que no tenían donde ir, costeando el transporte público a quien lo precisara, dando limosnas, etc. Lo que fuera preciso, siempre con el objeto de socorrer a quienes lo necesitaban, a costa de quedarse sin dinero en su bolsillo. Su pudiente familia no lo comprendía. Sus padres nunca supieron que pensando en ellos renunció a un amor secreto.

En 1921 organizó el primer congreso de Pax Romana en Rávena con la idea de involucrar a todos los universitarios del mundo en defensa de la paz. Cualquier situación la aprovechaba para hacer apostolado: la montaña, el teatro, la ópera, los museos. Había recibido una educación exquisita. Le agradaba el arte, la música, le apasionaba Dante, y tenía predilección por los escritos de Catalina de Siena que le indujeron a convertirse en terciario dominico en 1922. No estaba dispuesto a contemporizar con ningún «ismo». Y como observó que el totalitarismo del signo que fuera no contemplaba entre sus principios la defensa de la persona, ni el respeto a la fe católica, se enfrentó abiertamente a él.

Primeramente, plantó cara al comunismo y luego al fascismo, sin comprender cómo personas conocidas, que se declaraban católicas, podían simpatizar con estas ideologías. Era un joven coherente, auténticamente comprometido con su ideal, y este sentimiento mal entendido por los exaltados, se tornó en un peligroso azote para su vida. No querían permitir que se saliera con la suya y agredieron bárbaramente su domicilio mientras almorzaba junto a su madre. Entonces el beato dio pruebas de su hombría, y valerosamente les arrebató el bastón, «arma» de los violentos, arremetiendo contra el grupo que escapó a toda prisa.

Para ejercitar su caridad se adentraba en barrios y viviendas faltas de higiene, corriendo un alto riesgo de contagio de muchas enfermedades; ese peligro era moneda de cambio habitual. Sus amigos, a quienes invitaba a seguirle, estaban amedrentados, pero él les recordaba que en esas personas se hallaba el rostro de Cristo. A finales de 1925 en una de estas acciones a domicilio, contrajo una poliomielitis. Tenía 24 años, ¿quién podía pensar en una muerte inminente? Su entorno siguió con su rutina habitual, sin prestarle atención. La abuela se hallaba en trance de muerte, y todas las inquietudes se polarizaron en ella. Cuando la familia se percató de su gravedad, ésta era irreversible. Ni siquiera el suero obtenido del instituto Pasteur de París sirvió para remediar lo inevitable.  

A punto de morir, pensando en aquellos por los que dio su vida, encomendó a su hermana que llevase una caja de sus inyecciones a otra persona que las precisaba anotando su dirección en ella y se ocupó de costear un seguro médico. Murió en Turín el 4 de julio de 1925. Unos días antes había escrito: «En este mundo que se ha alejado de Dios falta la paz, pero falta también la caridad, o sea el amor verdadero y perfecto. Quizá si San Pablo fuese escuchado por todos nosotros, las miserias humanas serían un poco disminuidas». Juan Pablo II lo beatificó el 20 de mayo de 1990. Lo denominó «el hombre de las ocho bienaventuranzas».

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